R: Desde la reforma y la apertura en
1978, si bien la economía china ha crecido rápido y la vida del
campesinado ha mejorado mucho, es verdad que subsisten ciertos
problemas de no coordinación entre la ciudad y el campo, entre las
regiones y entre la economía y la sociedad. En el septenio que va
de 1997 a 2003, según estadísticas, el ingreso neto por campesino
se acrecentó en 4% por año, pero el ingreso disponible por
residente urbano se elevó a un ritmo anual de 8%. La diferencia
entre ambos fue de 3,23 veces, o sea, cada 3,23 campesinos ganaron
lo que percibió un residente urbano medio. El 2004 fue el año en
que el ingreso neto por residente rural se incrementó con mayor
rapidez a escala nacional desde 1997, llegando a 2.936 yuanes (un
dólar americano=8,27 yuanes); pero deducido el alza de precios, el
incremento real fue de apenas 6,8%.
El retardado incremento del ingreso
del campesinado no sólo afecta a la elevación de su nivel de vida y
a la expansión del mercado de consumo interno, sino también
directamente a la producción de cereales y al suministro de
productos agrícolas, inhibiendo en cierto grado el desarrollo de la
economía rural y el crecimiento de la economía nacional en su
conjunto.
Como China tiene más de 800 millones
de campesinos, le es muy difícil elevar rápido su ingreso al nivel
de los residentes urbanos. En el momento, la prioridad para
aumentar el ingreso del campesinado está enfocada en las
principales zonas productoras de cereales y las zonas pobres del
agro. Pero lo difícil es que faltan nuevos puntos que permitan a
los campesinos aumentar su ingreso, ya que la lentitud de este
aumento proviene justamente de la baja rentabilidad de la
agricultura y de los limitados canales de empleo para los
campesinos emigrados a la ciudad debido al pobre entorno social y a
su pobre calificación personal.
En 2004, con el propósito de ayudar
a los campesinos a aumentar su ingreso y a promover la producción
agrícola, China adoptó varias medidas esforzándose porque aquéllos
tuvieran mayor ingreso en un corto tiempo. De entre estas medidas
políticas, las principales son: primero, proseguir impulsando la
reestructuración agrícola para poner en pleno juego el potencial
interno de la agricultura a favor del aumento del ingreso; segundo,
desarrollar las empresas de cantón y poblado, las empresas privadas
de propiedad individual y otros sectores económicos de propiedad no
pública en el campo, para hacer prosperar la economía de los
poblados y la de los distritos para acrecentar las oportunidades de
empleo a favor de los campesinos; tercero, mejorar el ambiente de
empleo para los campesinos emigrados a la ciudad, garantizar sus
derechos e intereses legales, proporcionarles servicio público y
fondos para su administración social, e impartirles formación
vocacional; y cuarto, propender más en lo fiscal hacia la
agricultura y el campo, hacer que la industria realimente a la
agricultura y la ciudad preste apoyo al agro, y dar más a los
campesinos, cobrarles menos y permitirles mayor agilidad en sus
actividades. Paralelamente, se impulsarán aún más las diversas
reformas rurales con la transformación de las tarifas en impuestos
como contenido principal, de manera de rebajar gradualmente el
impuesto agrícola y abolirlo por completo al final.
Como es sabido de todos, China no
gozará de una vida modestamente acomodada en el verdadero sentido
si no la disfruta el campo, ni la nación prosperará a menos que los
campesinos hagan lo mismo. Dado que los campesinos chinos son un
enorme grupo humano, el aumento de su ingreso puede ser tan sólo un
proceso progresivo. No obstante, con tal de persistir en considerar
al hombre como lo primordial y establecernos el concepto del
desarrollo científico, seremos capaces, sin duda, de lograr el
objetivo de incrementar de continuo el ingreso del campesinado en
el curso de la reforma y el desarrollo.
|