Con la promesa de cuadruplicar el PIB local en un lapso de tres años, Chen Guohua obtuvo una victoria abrumadora en la carrera por alcanzar el cargo de jefe del Partido Comunista de la población de Longxing en Chongqing, municipalidad suroccidental china sin salida al mar.
Durante su periodo de cinco años en el cargo, Chen tiene que realizar verdaderos esfuerzos por lograr sus elevados objetivos económicos, pues las mismas personas que votaron por Chen revisarán anualmente su desempeño y un tercio de votos de no confianza emitidos por un total de 900 miembros del Partido en Longxing podrían retirarlo de inmediato del cargo.
Longxing se encuentra entre los 200 poblados de la municipalidad de Chongqing y las provincias de Sichuan y Hubei en donde se organizan elecciones directas experimentales para los jefes del Partido Comunista.
Candidatos múltiples y campañas disputadas en elecciones directas han sido puestos a prueba en más del 90 por ciento de los comités de diferentes aldeas de todo el país.
Después de cumplir 86 años y de haber gobernado a China durante 58 años, el Partido Comunista de China (PCCh) está avanzando paso a paso hacia la reforma política. Durante el XVII Congreso Nacional del PCCh inaugurado el lunes, el líder chino Hu Jintao prometió en su primer informe político "profundizar la reestructuración política" .
Sin embargo, reconoció que la reforma debe tener una "orientación política correcta" y realizarse bajo el liderazgo del PCCh, lo que hizo eco de un discurso pronunciado por él en la Universidad de Yale, durante una visita en abril de 2006 a Estados Unidos, durante la cual dijo que China no adoptará una democracia al estilo occidental, aunque está abierta a cualquier experiencia probada que apoye la democracia.
La prudencia de Hu ha sido apoyada por la mayor reunión de la historia del PCCh. Los delegados que asisten al congreso del Partido señalaron que el liderazgo del PCCh, la participación del pueblo en los asuntos políticos como amo del país y la administración del país conforme a la ley son los tres fundamentos de la "democracia socialista".
Yu Keping, subjefe del Buró Central de Compliación y Traducción de China, describió la democracia como "la menos defectuosa" de todas las instituciones políticas creadas y adoptadas por los seres humanos.
"En forma comparativa, la democracia es lo mejor de la historia humana" dijo Yu en un artículo titulado "La democracia es una cosa encantadora" publicado a principios de este año en el Study Times, un diario patrocinado por la Escuela de Partido del Comité Central del PCCh.
Sin embargo, el momento de impulsar la democracia y los arreglos institucionales debe ser elegido con cuidado, dijo Yu de 48 años de edad, quien es profesor invitado de la Universidad de Duke, Estados Unidos, y la Universidad Libre de Berlín, Alemania.
"Se requiere buen juicio tanto de los políticos como de las personas comunes y corrientes para obtener los máximos beneficios de la democracia con el menor costo político y social", dijo Yu.
El profesor Yang Guangbin, director del Instituto de Política Comparativa de la Universidad de Renmin de China, dijo que "cada país tiene sus propias particularidades para desarrollar la democracia tomando como base su propia historia, cultura y situación real".
"Resulta bastante perjudicial simplificar de manera excesiva los singulares procesos de las diferentes democracias a ciertos modos", dijo Yang. "Incluso las democracias occidentales han sobrevivido a procesos difíciles".
Yang señaló que en su opinión está surgiendo una democracia al estilo chino.
En el proceso de profundización de la reestructuración política, el PCCh también trata de desarrollarse a sí mismo para convertirse en una organización política que abarque todo a través de la diversificación de los miembros del Partido.
En 2002, el Partido enmendó su Estatuto y abrió sus puertas a empresarios privados que solían ser considerados como símbolo del capitalismo y que eran excluidos del equipo de vanguardia de la clase trabajadora china.
Mejorar la "democracia al interior del Partido" es el enfoque último en relación con el desarrollo de la democracia del pueblo y la promoción de la armonía social, dijo Tian Peiyan, un importante teórico de la Oficina de Investigación de Políticas del Comité Central del PCCh.
Como una señal notable, el margen de pérdida en la elección de los delegados del XVII Congreso Nacional del PCCh fue elevado hasta 15 por ciento desde 10 por ciento de hace cinco años.
En los niveles más bajos, la cuota marginal electoral de los congresos provinciales del Partido varía entre 15 y 30 por ciento, casi el triple que en el pasado.
En su informe, Hu también prometió que el Partido intensificará sus esfuerzos por "evitar la toma de decisiones arbitrarias por parte de un individuo o de una minoría de personas".
Lai Hongyi, profesor conferenciante de la Escuela de Estudios Chinos Contemporáneos de la Universidad de Nottingham, dijo que el éxito económico de China tiene mucho que ver con la atención prestada por el Partido gobernante al sustento del pueblo y a su pragmática búsqueda de una reforma de mercado. "Esta atención debe sostenerse en las próximas décadas", dijo Lai.
No obstante, dijo Lai, con el aumento en el nivel educativo del público y el desarrollo de los medios masivos, la opinión pública debe constituir una importante referencia en la elaboración de políticas.
Con el fin de garantizar que los funcionarios atiendan las preocupaciones del pueblo, la democracia debe ser introducida en forma creciente, dijo Lai.
El crecimiento acelerado no necesariamente lo cura todo y Hu advirtió al Partido sobre la creciente brecha en cuanto a riqueza, sobre un camino de desarrollo de despilfarro de recursos, injusticia y corrupción. Para abordar tales desafíos, esta organización política de 70 millones de miembros tiene que reclutar cerebros externos y reunir tantas fuerzas como sea posible.
Dos personas no comunistas, Wan Gang y Chen Zhu, fueron nombrados este año para ocupar cargos de gabinete y supervisar el Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Ministerio de Salud Pública.
Sus históricos nombramientos no serán los últimos pues el Partido gobernante prometió reclutar más personas no comunistas para altos cargos gubernamentales.
En palabras del profesor David Shambaugh, director fundador del Programa de Políticas para China de la Universidad George Washington y miembro no residente de Brookings, la reforma política del PCCh "avivará el Partido Comunista de China de la base hacia arriba y dará un ámbito más pleno a los cuadros para que intercambien puntos de vista y hagan aportaciones a las deliberaciones sobre políticas, más que simplemente poner en práctica y colocar el sello a las decisiones tomadas en niveles altos".
"El objetivo es crear un aparato partidista dinámico y no uno fosilizado e inflexible", dijo Shambaugh. Fin