China anunció hoy martes una integración de las políticas y mecanismos de supervisión de gestión energética, funciones ahora repartidas entre varios departamentos gubernamentales, mediante la creación de la Comisión Nacional de Energía (CNE), que se establecerá como un organismo de coordinación interministerial de alto nivel.
La nueva comisión se encargará de estudiar y elaborar estrategias de desarrollo energético, además de examinar cuestiones relativas al desarrollo y a la seguridad en esta materia, explicó Hua Jianmin, secretario general del Consejo de Estado (gabinete central), en la sesión anual de la XI Asamblea Popular Nacional (APN, parlamento chino).
Al mismo tiempo, se fundará un buró nacional de energía, administrado por la Comisión Estatal de Desarrollo y Reforma (CEDR) , y que funcionará como un órgano permanente para desempeñar el trabajo diario derivado de las decisiones tomadas por la CNE, señaló Hua.
Las instituciones relacionadas con el sector energético y las funciones pertenecientes a la CEDR, el Grupo Dirigente Nacional de Energía (GDNE) y la Comisión de Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa Nacional, serán integradas en el nuevo buró.
Esta institución se responsabilizará de elaborar y aplicar los programas, políticas y normas de la industria energética, promover nuevas y alternativas formas de energía, además de fomentar la conservación de recursos, dijo el funcionario.
El nuevo buró estará sometido a la supervisión de la CEDR para asegurar la estrecha coordinación de la gestión en materia energética con los programas de desarrollo económico y social nacionales y las políticas de macrocontrol, afirmó Hua.
Como consecuencia de la creación de estas nuevas instituciones, el GDNE y sus órganos ejecutivos se disolverán, confirmó Hua.