China planea lograr un 8 por ciento de crecimiento de su producto interno bruto (PIB) este año sobre la base de ahorro energético y reducción de emisiones contaminantes, dijo hoy el primer ministro Wen Jiabao.
"El PIB subirá en alrededor del 8 por ciento sobre la base de optimizar la estructura, elevar la rentabilidad, reducir los insumos y proteger el medio ambiente," indicó Wen en su Informe sobre la Labor del Gobierno presentado ante la I Sesión de la XI Asamblea Popular Nacional (APN, parlamento), inaugurada este miércoles.
Explicó que la meta del gobierno consiste en "mantener un crecimiento económico estable y relativamente rápido, así como hacer encauzar las principales energías de las diversas partes y la prioridad de sus trabajos hacia el cambio de la modalidad de desarrollo, la profundización de la reforma y el aceleramiento de la construcción en el ámbito social".
Se debe prevenir un afán unilateral o ciega emulación por la velocidad de crecimiento económico y adquirir un desarrollo sano y rápido de la economía y la sociedad, dijo Wen.
La meta de un crecimiento económico del 8 por ciento muestra que el gobierno chino ha tomado en consideración diversos factores tanto nacionales como internacionales, incluso riesgos de sobrecalentamiento, de acuerdo con Mao Weiming, diputado a la APN.
"Esta meta orientará el cambio de la modalidad de crecimiento económico, así como el desarrollo sano y rápido de la sociedad y la economía," afirmó Wei Wei, miembro del XI Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh), máximo órgano asesor de China.
La economía de China ha crecido un 65,5 por ciento durante los últimos cinco años, lo que supone un incremento anual promedio del 10,6 por ciento, para convertirse en la cuarta mayor economía del mundo.
En el año pasado, el PIB chino alcanzó 24,66 billones de yuanes (unos 3,425 billones de dolares).
Se han anotado progresos positivos en el ahorro de energía y la reducción de emisiones contaminantes, de modo que en 2007 el consumo de energía por unidad de PIB se recortó en un 3,27 por ciento con respecto al año anterior.
Mientras tanto se registró por primera vez en los últimos ejercicios el doble descenso de la demanda química de oxígeno y la emisión global de dióxido de azufre, con una disminución del 3,14 y el 4,66 por cienot, respectivamente, sobre el año anterior.
