El vicedirector de esta gala, Zhao Dongming, llamó a esta representación "cubo de luz", refiriéndose a la conocida construcción Olímpica "Cubo Acuático", el Centro Nacional Acuático de Beijing. El edificio, equipado con luces LED, puede cambiar sus luces a varios colores por la noche.
Los actores del "cubo de luz" representaron los 60 años de la historia de la República Popular China, desde su fundación en 1949, hasta 2009. Mientras tanto, los fuegos artificiales volvieron a estallar en el cielo nocturno formando el número arábigo 60, simbolizando el 60º cumpleaños de la Nueva China.
Segundos después, se encendió una cortina de fuegos artificiales, colocada frente al podio de Tian´anmen. Los fuegos artificiales de la cortina, de 90 metros de ancho por 25 metros de alto, crearon el sol, los ríos, las cataratas y las montañas, representando la extensa tierra de China.