Comunicado conjunto de China y los Estados Unidos (resumen)

A invitación de Wiliam J. Clinton, Presidente de los Estados Unidos de América, Jiang Zemin, Presidente de la República Popular China, efectuó, del 26 de octubre al 3 de noviembre de 1997, una visita oficial a los Estados Unidos. Esta fue la primera vez en 12 años, que el Presidente de China realizaba una visita oficial a los Estados Unidos. Durante su visita a Washington, el Presidente Jiang Zemin y el Presidente Clinton sostuvieron una entrevista, a la cual asistieron Qian Qichen, Vicepremier y canciller de China y Mabeleine Albright, secretaria de Estado de EE.UU.

Los Jefes de Estado de los dos paises llevaron a cabo conversaciones fructíferas y abordaron temas profundos acerca de la situación internacional, las relaciones sino-norteamericanas, así como las importantes oportunidades y desafíos que los dos países encaran. Ambas partes estuvieron de acuerdo en que unas relaciones sino-norteamericanas sanas y estables responden a los intereses vitales de los pueblos de China y los Estados Unidos, y además, son importantes para que ambas partes asuman juntos la responsabilidad y se esfuercen por hacer realidad la paz y la prosperidad del siglo XXI. Ambas partes estuvieron de acuerdo en que entre China y los Estados Unidos hay a la vez puntos comunes y discrepancias; en que ambas partes tienen intereses comunes de importancia; en que ambas partes se esforzarán en forma conjunta y con el espíritu de cooperación y sinceridad, por aprovechar las oportunidades y enfrentar los desafíos con el fin de conseguir progresos concretos. Sobre los problemas de los derechos humanos, hay importantes discrepancias entre China y los Estados Unidos. Al mismo tiempo, existe un gigantesco potencial de cooperación entre los dos países en la salvaguarda de la democracia, la paz y la estabilidad regionales y el fomento del crecimeinto económico de todo el planeta; en la prevención de la proliferación de las armas de destrucción masiva, la promoción de la cooperación de la región Asia-Pacífico para combatir el narcotráfico, las actividades de la deliencuencia internacional organizada y el terrorismo; en el fortalecimiento del intercambio y cooperación bilaterales en la economía, el comercio, las leyes, la protección ambiental, los energéticos, la ciencia y tecnología, la educación y la cultura, así como entre las fuerzas armadas de los dos países.

Los Jefes de Estado de los dos países decidieron enfrentar los desafíos incrementando su cooperación, promover la paz y el desarrollo del mundo y esforzarse juntos por formar una asociación estratégica constructiva entre China y los Estados Unidos. En pro de realizar esta meta, ambas partes estuvieron de acuerdo con tratar las relaciones entre los dos países sobre la base de los principios contenidos en los tres comunicados conjuntos de China y los Estados Unidos.

La parte china enfatizó que el problema de Taiwan es el problema medular, el más importante y sensible, en las relaciones ente China y los Estados Unidos. Observar estrictamente los principios de los tres comunicados de China y los Estados Unidos y tratar adecuadamente el problema de Taiwan es el factor clave del desarrollo sano y estable de las relaciones sino-estadounidenses. La parte norteamericana reiteró que persistía en la política de una China y que observaba los principios de los tres comunicados conjuntos de China y los Estados Unidos.