Durante 1999, haciendo frente a la compleja situación política y económica tanto en el plano nacional como en el internacional, el Gobierno chino, a la cabeza del pueblo de todo el país, ha aplicado una serie de directrices y políticas centradas en el incremento de la demanda interna, ha luchado por vencer diversas dificultades, ha centrado sus esfuerzos en la defensa del fomento del desarrollo económico y ha perseverado en el fortalecimiento de la civilización espiritual. Como consecuencia de todo ello, la nación china ha conquistado nuevos éxitos en el desarrollo social y económico y ha alcanzado las diversas metas fijadas para el desarrollo y la reforma.

    La economía nacional ha registrado un aumento sostenido. En 1999 el PIB fue de 8.205.400 millones de yuanes, cifra que representa un incremento del 7,1% en comparación con el año anterior. En términos más concretos, el valor añadido del sector industrial primario fue de 1.421.200 millones de yuanes, es decir, aumentó un 2,8%; el valor añadido del sector secundario fue de 4.080.600 millones de yuanes, es decir, se incrementó un 8,l%; y el valor añadido del sector terciario fue de 2.703.600 millones de yuanes, es decir, se elevó un 7,5%. La tasa de productividad social anual fue de 11.677 yuanes per cápita, proporción que supone un incremento del 6,3% con respecto al año anterior.

    El índice general de los precios del mercado continuó bajando. El índice general anual de precios al consumo descendió un 1,4% en relación con el año anterior, siendo la mayoría de los precios inferiores a los del año precedente. En cuanto a los sectores específicos, los precios de los alimentos bajaron un 4,2%; los del vestido, un 2,7%; los de los electrodomésticos y artículos para el hogar, un 2,3%; y los de los medios de transporte y los de las telecomunicaciones, un 5,5%; en cambio, los precios de los servicios subieron un 10,6%. El índice general de los precios al por menor bajó un 3% con respecto al año precedente.

    El empleo experimentó un constante fortalecimiento. A fines de 1999, había en el país 705,86 millones de trabajadores, 6,29 millones más que en 1998. De ese total, 210,14 millones, es decir, 3,36 millones más que en el año precedente, eran trabajadores de las ciudades, mientras que el número de trabajadores autónomos de las ciudades era de 39,4 millones, es decir, 7,08 millones más que en el año precedente. El proyecto de reempleo hizo nuevos progresos. En 1999, se produjo el desplazamiento de 5,64 millones de trabajadores de empresas estatales, 4,92 millones de los cuales encontraron un nuevo puesto de trabajo por diversos canales. A fines de ese año, el número de desplazados de las empresas estatales era de 6,5 millones, es decir, 400.000 más que en el año anterior. En las ciudades, la tasa de desempleados registrados fue del 3,1%, equiparándose con el índice del año precedente. Debido a las jubilaciones y a los fallecimientos, la población activa se redujo en 320.000 trabajadores.

    La tasa de cambio del Renminbi (moneda china) se mantuvo estable y las reservas de divisas siguieron aumentando. A fines de 1999, las reservas de divisas del país alcanzaban los 154.700 millones de $ EE.UU., 9.700 millones más que en el año anterior, mientras la tasa de cambio del Renminbi se situaba en los 8,2793 yuanes por dólar, bajando en 4 puntos respecto al nivel registrado a fines de 1998.

    Los principales problemas subsistentes en el desarrollo social y económico son estos: la demanda social efectiva es insuficiente; la estructura económica sigue destacando por su irracionalidad; la presión del empleo va en aumento; y disminuye el crecimiento de los ingresos de los campesinos.