los
Jingpo
La etnia de los Jingpo,
cuyo origen se remonta a la dinastía Tang( 608-907), mora
principalmente en dos prefecturas autónomas del oeste de
la provincia de Yunnan y su población es de más de
93 mil habitantes. Antaño los Jingpo carecían de escritura
hasta que en 1957, crearon sus propios caracteres con el apoyo del
gobierno.
Como los Jingpo
viven en zonas subtropicales, donde abunda la lluvia y la tierra
es fértil, la vida de esta etnia depende principalmente de
la agricultura.
En cuanto a
la vestimenta de los Jingpo,los hombres suelen llevar chaquetas
y pantalones negros. Los jóvenes se envuelven el pelo con
un pañuelo blanco, y los de mayor edad, con pañuelo
negro. Cuando salen de casa suelen llevar un morral y una cuchilla.
Las mujeres usan chaquetas negras y faldas largas y ceñidas
de distintos colores. Aquí cabe mencionar las polainas de
lana que usan necesariamente las Jingpo. Además, les gustan
las joyas de plata. Cuando más joyas lucen, más habilidad
tienen.
Los Jingpo
tienen la buena tradición de ser unidos y ayudarse mutuamente.
Si a una familia le ocurre algo desagradable, todo el pueblo le
ayuda. También son muy hospitalarios. A los visitantes les
agasajan efusivamente regalándoles Shazhi para masticar,
un tipo de mascadijo preparado con tabaco, carrizo y cal procesada.
Los Jingpo
tienen profusión de obras literarias orales, las narran siempre
con acompañamiento de música. Ellos son hábiles
en la danza. A veces bailan juntas más de mil personas hasta
el amanecer. En cuanto a sus instrumentos musicales típicos
cabe mencionar el Tuliang. Los jóvenes cortan un trozo de
bambú con una cuchilla, abren un agujero en ambos extremos
y uno en el centro de la cana. De esta manera hacen un Tuliang.
Cuando dos jóvenes se citan, el galán suele tocar
este instrumento para conmover a la novia.
Para la mayoría
de los pobladores el arroz es el cereal principal; pocos comen maíz.
Sus bebidas más conocidas son el agua de manantial y el licor.
Como los Jingpo son una etnia valiente, los niños aprenden
a disparar a los 7 u 8 años. Los hombres van al bosque con
una cuchilla larga que les sirve también de ornamento. Después
de la cacería, se distribuye el botín entre todos
los habitantes del pueblo.
Los Jingpo
viven en chozas hechas de bambú y madera, que reconstruyen
después de 7 u 8 años, con ayuda de todo el pueblo.
Igual que otras etnias, los Jingpo también realizan actividades
religiosas. La mayor es la fiesta de Munao, día en que la
gente ofrece sacrificios a su Díos.
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