Castigo severo y decidido de los delitos relacionados
con las drogas
     
 


Dentro de los límites marcados por la ley, los órganos judiciales de China encargados del control de las drogas asestan duros golpes a la delincuencia relacionada con las drogas y castigan rigurosamente a los narcotraficantes.

Teniendo en cuenta que las drogas provienen en su mayoría de fuera del país, China ha redoblado los esfuerzos encaminados a detectar e impedir el tráfico de drogas entre uno y otro lado de sus fronteras. En los años 80, se invirtieron cuantiosos recursos humanos, materiales y financieros en la coordinación de las actuaciones de los órganos de seguridad pública, de las unidades de la policía armada, de las aduanas y de las masas populares, y se establecieron tres líneas de defensa. La primera consistió en la impermeabilización de las fronteras; la segunda, en la vigilancia pormenorizada en el interior del país; y la tercera, en el control de los principales caminos y cruces, los aeropuertos, las estaciones ferroviarias y los puertos. En los años 90, se intensificó aún más la vigilancia del narcotráfico fronterizo, se cierran las fuentes y interceptan los canales, se vedan las drogas sin reservas en las principales vías de comunicación, en los aeropuertos, en las estaciones ferroviarias y en los puertos tanto marítimos como fluviales, de manera que ha aparecido una nueva situación, en la cual, la defensa es organizada en forma unificada, y los sectores pertinentes asumen sus responsabilidades y cooperan estrechamente en los esfuerzos dirigidos a atacar las drogas ya introducidas en China. Los departamentos de seguridad pública, aduanas, ferrocarriles, transporte, aviación civil, silvicultura y telecomunicaciones de todo el país desempeñan estas mismas funciones, y han cosechado éxitos notables en la prohibición de las drogas. Desde 1982, sólo en la provincia de Yunnan se han descubierto más de 70.000 casos de narcotráfico fronterizo y se han confiscado más de 80 toneladas de heroína y de opio procedentes del "triángulo de oro". En mayo de 1994 se puso al descubierto un caso gravísimo de narcotráfico internacional por medio de una brillante operación que concluyó con la captura de un cabecilla del "triángulo de oro", al que los órganos judiciales, procediendo en conformidad con la ley, condenaron a la pena capital. Desde hace muchos años, los órganos judiciales de China vienen ejerciendo una gran presión sobre la delincuencia relacionada con las drogas y asestando duros golpes a los traficantes de dentro y de fuera del país.

Paralelamente a la estricta vigilancia del narcotráfico a través del territorio chino, el Gobierno chino libra una lucha especial contra las drogas y restablece el orden en las regiones seriamente perjudicadas por estas sustancias, combatiendo sin cuartel las actividades delictivas con ellas relacionadas. Entre 1983 y 1986, durante tres años consecutivos se desplegó, en todo el país, una "campaña contra la delincuencia" centrada en la lucha contra las actividades criminales vinculadas con las drogas. En agosto de 1992, el gobierno de la provincia de Yunnan emprendió una lucha armada contra las drogas, que se prolongó durante 83 días y que desarticuló una banda de traficantes de drogas y de armas, con características típicas de la sociedad secreta, establecida en Pinyuan, poblado de Wenshan, prefectura de la provincia de Yunnan. Entre 1993 y 1996, el Ministerio de Seguridad Pública llevó a cabo una intensa campaña de control de las drogas y las armas de fuego en las zonas fronterizas del sudoeste. En 1997, la Comisión Estatal para el Control de las Drogas puso en marcha una enérgica campaña nacional contra estas sustancias en la que se lograron importantes éxitos. Desde 1999, bajo la dirección unificada de la Comisión Estatal para el Control de las Drogas, viene desarrollándose en Yunnan, Guizhou, Sichuan, Guangdong, Guangxi, Gansu y otras provincias y regiones autónomas especialmente señaladas, una campaña de limpieza de las zonas seriamente afectadas por las drogas, campaña en la que se han descubierto una serie de graves casos de narcotráfico, se ha capturado a numerosos traficantes, se han desarticulado diversas bandas y se han suprimido centros y redes ilegales de comercio y distribución de drogas. Entre 1991 y 1999, los órganos administrativos encargados de la prohibición de las drogas descubrieron más de 800.000 delitos de narcotráfico y confiscaron 39,67 toneladas de heroína, 16,894 toneladas de opio, 15,079 toneladas de marihuana y 23,375 toneladas de metanfetamina.

Siendo la población de China tan numerosa, su consumo legal de narcóticos y de sustancias psicotrópicas es muy elevado. Al tiempo que garantiza la buena salud del pueblo y satisface sus necesidades terapéuticas, China ejerce un estricto control sobre 118 narcóticos y 119 sustancias psicotrópicas, limitando su producción, prescripción y administración, así como su importación y exportación, en prevención de que se desvíen hacia los canales ilegales. Los departamentos sanitarios y farmacéuticos de control e inspección, agricultura, administración comercial e industrial, comercio exterior, aduanas, ferrocarriles, comunicaciones, aviación civil y seguridad pública de distintos lugares, inspeccionan y subsanan todos los años las irregularidades detectadas en la producción, la administración, el transporte, la importación y la exportación de narcóticos y de sustancias psicotrópicas, y castigan debidamente tanto su producción, venta y suministro ilícitos, como su consumo abusivo. Heilongjiang, Mongolia Interior, Shanxi, Shaanxi y otras provincias y regiones autónomas del norte de China descubrieron y juzgaron una serie de casos de robo, compra, venta y abuso de demerol y de otros narcóticos.

El Gobierno chino se muestra consecuente al considerar que el punto clave de su lucha contra las drogas es la prohibición del cultivo de las plantas originales de las drogas, decretada hace ya mucho tiempo como medida preventiva. La Comisión Estatal para el Control de las Drogas coordina anualmente los trabajos relacionados con la prohibición del cultivo de estas plantas. Los gobiernos de las distintas localidades asumen la responsabilidad de velar por el cumplimiento de dicha prohibición que corresponde a su nivel y movilizan a las masas populares tanto para mejorar la información y la educación en este ámbito, como para intensificar la supervisión del cultivo de estas plantas. Se exigen responsabilidades ineludibles a quienes las cultivan y se destruyen sin vacilaciones los cultivos descubiertos. Los gobiernos locales que tienen bajo su jurisdicción zonas montañosas y zonas forestales clasificadas deben ordenar anualmente la investigación y el control de los cultivos ilegales de estas plantas en dichas zonas. Empleando modernos medios científicos y técnicos, desde 1992 la Comisión Estatal para el Control de las Drogas y los departamentos de silvicultura organizaron varias inspecciones de cultivos de las plantas originales de las drogas, sobrevolando las selvas vírgenes de la cordillera Hinggan Mayor del nordeste, las montañas Lianhua del noroeste y otros lugares del país. En la actualidad puede afirmarse que China ha culminado en lo fundamental la erradicación del cultivo ilegal de estas plantas perniciosas.