Diversión asegurada en el invernal Altay

Conocer la cultura del lobo, aprender a fabricar esquís tradicionales, disfrutar de la puesta de sol y la música en una estación de esquí en la cima de una montaña... Son solo algunos ejemplos de cómo Altay, un popular destino de esquí en la Región Autónoma uigur de Xinjiang, en el noroeste de China, combina el hielo y la nieve con nuevos escenarios, ofreciendo diversas experiencias para dinamizar el turismo de invierno.

Desde el inicio de la temporada de este año, la localidad ha recibido a más de 6 millones de turistas, con un gasto total de casi 4800 millones de yuanes (685 millones de dólares), informó Guo, un funcionario local de cultura y turismo.

El distrito de Qinghe ha integrado la cultura del lobo de la etnia kazaja con el turismo de hielo y nieve. Con 200 lobos de diversas razas, un parque dedicado a la especie presenta 4 zonas funcionales —un centro de cría, un área de libre pastoreo, una estación de rescate y una sala de exposiciones— con servicios turísticos afines. Los turistas pueden observar de cerca a los animales y aprender sus costumbres.

Gao, un turista de la provincia de Heilongjiang, en el noreste de China, indicó que visitó el lugar después de esquiar y lo describió como «una experiencia particularmente novedosa e inolvidable». Agregó que el encuentro cercano con los lobos le ayudó a comprender mejor la cultura del grupo kazajo. «Después de escuchar la presentación del guía, supe que los lobos, con su sabiduría, valentía, unidad y audacia únicas, son considerados "héroes" en la etnia».

Durante un recorrido, se observó que muchos miembros del personal eran residentes locales de diferentes minorías. Bujinit Turdieli apuntó que su salario mensual actual es de 3500 yuanes más comisiones, mientras que sus ingresos previos procedentes del agro eran de solo unos cientos de yuanes al mes; el turismo invernal ha mejorado considerablemente su nivel de vida.

Hasta la semana pasada, Qinghe había acogido a unos 48 405 turistas esta temporada, esto es una subida de casi el 4 % en comparación con la anterior, anotó el domingo un funcionario del Gobierno local.

El municipio de Lasite atrae a viajeros con la oportunidad de fabricar esquís tradicionales de piel, un patrimonio cultural inmaterial del lugar. Con el apoyo de los Gobiernos locales, Selambek, representante heredero de este arte en la región autónoma, ha transformado una parte de su patio en una sala de muestra de esquís de piel de caballo.

Este rincón combina el procesamiento y la producción, las exposiciones culturales y la venta de productos. Los amantes del deporte y turistas de todo el país pueden visitar el taller y, bajo supervisión, cortar la tabla y colocar la piel de caballo; además pueden adquirir los esquís, así como miniaturas artesanales de esquís.

Un par de los primeros cuestan alrededor de 1000 yuanes, y la familia de Selambek puede producir unos 50 pares al año para rentas de entre 50 000 y 80 000 yuanes anuales.

«Este año hay más turistas que antes. Hasta ahora se han vendido más de 300 pares de esquís pequeños, con ingresos de alrededor de 130 000 yuanes», dijo.

Además, la estación internacional de la montaña Jiangjunshan ha incluido nuevas experiencias, como fiestas al atardecer y programas de entrenamiento de parapente, junto con el esquí.

Una viajera de la provincia oriental de Fujian, sostuvo que había venido específicamente para probar estas nuevas actividades. «Además de esquiar, también puedo disfrutar de la música mientras contemplo la puesta de sol en la cima de la montaña, lo que es muy creativo».

Hasta el viernes, la estación había recibido cerca de 400 000 visitas este año, un aumento del 52 % con respecto al anterior, resaltó Zhang Qi, su director de marketing.