China reduce la brecha con EE.UU. en investigación científica

China y Estados Unidos compitieron por el primer lugar en 11 campos científicos importantes, y este último solo obtuvo una ventaja marginal en el desempeño general, indicó un informe de reciente publicación.

El reporte anual de los Institutos de Ciencia y Desarrollo de la Academia China de Ciencias y su Biblioteca Nacional de Ciencias, junto con la empresa de análisis global Clarivate, utilizó datos de artículos de investigación muy citados de entre 2019 y 2024.

China lideró en 6 áreas científicas clave: ciencias agrícolas, vegetales y animales; ecología y ciencias ambientales; química y ciencia de los materiales; física; ciencias de la información; y economía, psicología y otras ciencias sociales; y, en ámbitos en los que es relativamente más débil, como la medicina clínica y la astronomía y la astrofísica, ocupó el cuarto y quinto peldaño, respectivamente, pero mostró una mejora significativa en comparación con el pasado.

Estados Unidos encabezó 5 esferas principales: geociencias, medicina clínica, ciencias biológicas, astronomía y astrofísica, y matemáticas. Asimismo, obtuvo la segunda casilla en las 6 restantes, lo que lo convirtió en el país con mayor actividad de investigación fundamental a nivel mundial, pero la brecha con China es bastante menor.

«Si se observan losestudios anteriores, la tendencia a avanzar al igual es cada vez más evidente», indicó el reporte, que destaca que el Reino Unido y Alemania forman el segundo grupo en logros en los principales campos.

Pan Jiaofeng, presidente de los Institutos de Ciencia y Desarrollo, sostuvo que el informe plantea nuevas preguntas y retos para el desarrollo integrado de la ciencia y la tecnología, la economía y otros aspectos.

«Existe una nueva ronda de revolución científica y tecnológica y las fronteras de la investigación científica están en constante evolución. Temas de vanguardia como las tecnologías de alto rendimiento de células individuales, la detección de materia oscura y la profunda integración de la inteligencia artificial en el estudio científico y las prácticas de ingeniería han atraído una gran atención», dijo.

Emmanuel Thiveaud, vicepresidente de Clarivate, elogió los avances de China en la investigación científica de vanguardia.

«En las últimas décadas, hemos sido testigos de sus saltos y de lo que sigue logrando en investigación y desarrollo», afirmó. «No es de extrañar que se encuentre ya a la delantera en muchos frentes ».

Thiveaud resaltó la creciente influencia del estudio científico chino, citando otro informe publicado por Clarivate hace unas semanas. Según el mismo, la parte continental de China continua en la segunda posición en cuanto al número de académicos altamente citados entre más o menos 7000 seleccionados en función de sus artículos muy citados en los últimos 11 años.

Agregó lo relevante de dar a conocer los informes anuales, ya que pueden orientar el curso de la investigación científica y mantener al tanto a los responsables políticos.

«Este tipo de estudios conlleva un proceso más amplio para imaginar el futuro de las ciencias naturales y sociales mediante la identificación de áreas candentes y emergentes», apuntó, y añadió que la IA ha devenido un elemento esencial para potenciar los campos emergentes.

Yang Fan, subdirector de los Institutos de Ciencia y Desarrollo, puntualizó la profunda integración multidisciplinaria de la investigación científica.

En los 11 ámbitos principales, el informe conjunto definió 110 frentes de investigación activos y 18 emergentes, y más de la mitad de estos últimos están relacionados con la IA, especialmente en medicina clínica y ciencias de la vida.

Li Shao, profesor titular de la Universidad de Tsinghua y director del Instituto de Medicina Tradicional China-X de la universidad, manifestó que 4 de los 7 frentes emergentes en medicina clínica están vinculados con el uso de grandes modelos lingüísticos en la atención sanitaria.

Li subrayó el rol preponderante de la IA en el tratamiento de enfermedades ligadas al estilo de vida y en la prevención de afecciones graves, especialmente en el sector de la medicina tradicional china.

Se necesitan algoritmos exactos que respalden la investigación sobre los mecanismos de las enfermedades, su detección temprana y el tratamiento preciso, lo que puede acelerar la aplicación de los resultados de los estudios y beneficiar al público, concluyó.