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spanish.china.org.cn | 27. 10. 2025 | Editor:Teresa Zheng [A A A]

El aporte mundial del XV Plan Quinquenal de China

Palabras clave: XV Plan Quinquenal, desarrollo
Spanish.china.org.cn | 27. 10. 2025

La cuarta sesión plenaria del XX Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) en Beijing aprobó las recomendaciones para la formulación del XV Plan Quinquenal de desarrollo económico y social nacional, en las que se esboza la hoja de ruta en los próximos 5 años. La misma refleja la iniciativa histórica y la firme determinación del PCCh de favorecer la modernización de China, en línea con las expectativas mundiales de recuperación económica, transformación ecológica y gobernanza global. En un entorno internacional complejo, marcado por tensiones geopolíticas, riesgos recurrentes y un débil impulso de crecimiento, la reunión no solo marca el rumbo del desarrollo nacional, sino que también envía una clara señal de estabilidad, fiabilidad y previsibilidad al mundo.

Según el comunicado, el XV Plan Quinquenal (2026-2030) girará en torno a la modernización china, con énfasis en la reforma integral, el avance de alta calidad y la apertura institucional. No solo define el proyecto para el siguiente lustro, sino que también aborda los principales retos globales de nuestro tiempo. Cuando convergen las fricciones geopolíticas, los déficits de gobernanza y el crecimiento lento, una China con un vasto mercado, un sistema industrial completo y una capacidad de reforma sostenida seguirá ofreciendo un incentivo duradero a la economía mundial, con estabilidad en la paz y el desarrollo globales, y contribuyendo a la gobernanza y progreso de la civilización humana.

El próximo plan encarna la postura estratégica y la coherencia política de China como gran potencia mundial. Como segunda economía más grande del mundo, estos dos aspectos sirven de «impulso» frente a la ansiedad por el desarrollo económico mundial. La ventaja institucional de la planificación quinquenal no solo le ha permitido pasar de una economía en fase inicial de industrialización a una potencia tecnológica y de un crecimiento vertiginoso a un desarrollo de alta calidad, sino que también brinda una nueva opción para conceptos y enfoques de desarrollo de otras economías del mundo.

Durante el XIV Plan Quinquenal (2021-2025), el aporte de China al crecimiento económico mundial fue elevado, gracias a la enorme resiliencia de su mercado y la mejora industrial sostenida. De aquí a 5 años, el consumo continuará ganando terreno y la integración de la fabricación avanzada, los servicios modernos y la economía digital generará una demanda constante y una oferta de alta calidad de bienes y servicios globales. Y lo que es más, China fomentará la mejora de la demanda y la innovación por el lado de la oferta de forma conjunta, reforzará la estabilidad de las cadenas de suministro mundiales y mitigará el impacto de las dudas externas sobre el comercio y la inversión. Los observadores internacionales creen que, mediante la optimización de su estructura de importaciones, la mayor cooperación industrial y la mejora de la inversión transfronteriza, el país consolidará su rol como fuerza estabilizadora y pilar del repunte económico mundial. El énfasis de la sesión plenaria en lograr un alto nivel de autosuficiencia y fortaleza en ciencia y tecnología extenderá aún más el ecosistema de innovación a través de la apertura y la cooperación. China, durante el XV Plan Quinquenal, seguirá siendo un «estabilizador» y un «motor» del crecimiento global.

Mientras algunos países siguen atrapados en una mentalidad de suma cero, China ha definido una visión de progreso compartido para el mundo. En los próximos 5 años, la apertura y la cooperación alcanzarán nuevos estadios en alcance y profundidad. A pesar de la presión externa y el aumento del proteccionismo, el país sigue comprometido con una mayor apertura de alto nivel y el avance de la apertura institucional, mediante la alineación con normas internacionales y la conectividad del mercado.

En el marco de tal proyecto, China favorecerá la apertura independiente, la innovación comercial, la cooperación bilateral en inversiones y una colaboración de primer orden en el marco de la iniciativa «La Franja y la Ruta». Estos esfuerzos integrarán su capacidad de producción, capital y tecnología con los recursos, la mano de obra y los mercados de las economías emergentes, llevando la globalización hacia un avance más equilibrado, sostenible e inclusivo.

Además, en un contexto de creciente unilateralismo y confrontación entre bloques, el plan chino tiende un puente entre sus objetivos internos a largo plazo y sus aportes institucionales externos. Al extender el «largo plazo» de la gobernanza interna a la cooperación internacional, fortalece los cimientos de la confianza mundial más allá de la volatilidad de los ciclos políticos a corto plazo, lo que ofrece continuidad y previsibilidad a la política mundial. Durante el XV Plan Quinquenal, China colaborará con otros países para defender un multilateralismo genuino, promocionar un sistema de gobernanza global que represente mejor los intereses de la mayoría y encarne la equidad y la justicia, y brindar un modelo de gobernanza que equilibre la eficiencia y la equidad con una perspectiva de larga data, haciendo que la gobernanza global sea más transparente, eficiente, estable y duradera.

«El impulso estratégico del próximo plan quinquenal es algo que, de una forma u otra, sentirán prácticamente todos los países del mundo», anotó un observador extranjero. De hecho, hay motivos para creer que, a medida que la economía, la tecnología, la defensa y la fuerza nacional de China sigan en auge, así como su influencia internacional, el país seguirá aportando confianza, y con su fortaleza, creando oportunidades para el mundo en el siguiente lustro.