Estudiantes kazajos aprenden comercio electrónico en Xinjiang

Togzhan Kanatkyzy, de Kazajistán, recibe lecciones sobre presentación y promoción de productos vía transmisiones en directo en plataformas de redes sociales en Horgos, región autónoma uigur de Xinjiang. La joven afirma que le fascina ver cómo la gente se interesa por las ofertas.

«Dado que el comercio electrónico desempeñará un rol cada vez más esencial en las relaciones económicas entre China y Kazajistán, es fundamental saber de qué se trata», dijo.

La estudiante de 18 años forma parte del primer grupo de 30 que visita Xinjiang procedente del Colegio Internacional de Lengua Kazaja-China de Almaty, Kazajistán. Ellos participan en un programa de 3 meses sobre comercio electrónico y chino en el Centro de Cooperación Fronteriza Internacional China-Kazajistán Horgos, en la prefectura autónoma kazaja de Ili.

Con una superficie de 5,6 kilómetros cuadrados —3,43 en la sección china y 2,17 en la kazaja—, el instituto abrió sus puertas en abril de 2012 y es la primera zona de cooperación transfronteriza entre China y otros países.

Desde su apertura el 8 de abril, Kanatkyzy ha aprendido a impulsar la venta de bienes en un portal de comercio electrónico establecido por la firma Comercio Internacional Tongjianggongchuang Xinjiang, dirigida principalmente a los mercados de Asia Central en kazajo y ruso.

«He observado que las personas que me siguen prestan mayor atención a la línea de belleza y utensilios de cocina. De hecho, todo tipo de artículos chinos son muy populares en Kazajistán», indicó Kanatkyzy. «Además, fuera de aprender sobre mercadería china, redes sociales y plataformas comerciales, he visto que estas han devenido nuevas formas para que los kazajos, especialmente los jóvenes, sepan más sobre China, nuestro buen vecino».

El comercio electrónico en Kazajistán ha registrado un rápido crecimiento en los últimos años. Según el Ministerio de Comercio e Integración del país, las transacciones entre enero y noviembre de 2024 sumaron más de 6000 millones de dólares, esto es el 14,5 % del negocio minorista total.

Guo Zhigui, director de la empresa, sostuvo que el desarrollo del rubro en Kazajistán acaba de empezar a repuntar y seguirá expandiéndose, por lo que las firmas chinas necesitan jóvenes talentos como Kanatkyzy, que entienden la cultura de ambos países.

«Además de ofrecer cursos sobre comercio electrónico y chino, la compañía también ha diseñado asignaturas para conocer las tradiciones y la cultura chinas. Y, al mismo tiempo, nosotros también podemos aprender de ellos sobre la cultura kazaja», acotó Guo, y añadió que tienen previsto establecer un almacén y crear un equipo de streamers en Almaty.

«Por supuesto, los aprendices como Kanatkyzy serán entonces nuestras primeras opciones de contratación», constató.

Mientras tanto, Zhenis Zheksembaev ha estado recibiendo instrucción en el centro de cooperación del centro comercial internacional de Yiwu. Una tarea reciente consistía en crear videos cortos para publicitar productos de ferretería de un mayorista chino.

«Hay muchos kazajos que hacen negocios en China y esto ofrece muchas oportunidades», anotó el joven de 18 años. «Por otro lado, en los últimos años he observado un aumento en el número de chinos y empresas chinas en Kazajistán. Tengo muchas ganas trabajar en una de ellas en el futuro».

Sulubay Nuryahep, de Ili, Xinjiang, responsable de la plataforma de comercio electrónico del centro de capacitación, se muestra impresionado por la creatividad de los jóvenes.

«Sus trabajos son novedosos y han superado nuestras expectativas. Además, hemos podido conocer más sobre la mentalidad de los kazajos, las leyes y políticas del país, ha sido muy enriquecedor», destacó Sulubay, de la etnia kazaja, y agregó que dado que el programa se ha regularizado, la escuela recibirá cada año a practicantes universitarios, y que ya está deseando que llegue el momento.

«Creo que los jóvenes kazajos pueden acercar a las compañías y a los pueblos de ambos países. Y, si pudiera, les ofrecería empleo a todos», apuntó.