Nvidia evalúa cómo abordar China tras bloqueo de sus chips H20

Nvidia evalúa cómo abordar el mercado chino después de que Washington dispusiera de límites a las ventas de su chip Hopper H20, pero no sacará otra versión, dijo el sábado su director ejecutivo, Jensen Huang, informó Reuters.

A la pregunta de cuál sería el próximo chip de la compañía para China después del H20, Huang respondió: «No es el Hopper porque ya no es posible modificarlo, según un directo publicado por la red de noticias Formosa TV de la isla de Taiwán, continuó el reporte.

El H20, el chip de IA más potente de Nvidia autorizado en China, quedó fuera del mercado luego de que las autoridades estadounidenses indicaran a la firma el mes pasado la necesitad de una licencia de exportación. El H20 salió después de los mayores controles en octubre de 2023.

Hubo peticiones a Nvidia para aclarar la situación y si todavía puede vender el H20 en China, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.

Reuters señaló a principios de mes que Nvidia planeaba presentar una versión de menor categoría para China en los próximos 2 meses en un intento por apuntalar sus ventas.

En los últimos días, varios medios extranjeros, entre ellos Reuters, citando fuentes anónimas, reportaron que la marca buscaba un emplazamiento en Shanghai para un centro de I+D. Esto refleja «la importancia estratégica de China, donde las restricciones estadounidenses a los chips avanzados han dejado estragos», anotó Reuters el viernes.

El jefe de Nvidia ha afirmado en repetidas ocasiones que China es fundamental para el crecimiento de la compañía. El país generó 17 000 millones de dólares de sus ingresos en el ejercicio fiscal que finalizó el 26 de enero, lo que representa el 13 % de sus ventas totales, detalló Reuters.

Sin embargo, Washington ha tomado diversas medidas para endurecer las trabas a las exportaciones de chips a China. Por ejemplo, el Marco estadounidense para la difusión de la inteligencia artificial (IA), publicado en enero, justo una semana antes del fin del gobierno de Joe Biden, pretendía limitar las ventas de chips de IA a la mayoría de los países.

La semana pasada, la Oficina de Industria y Seguridad del Departamento de Comercio dijo que había iniciado la rescisión de la ley de Biden y anunció medidas adicionales para reforzar el control de la venta al exterior de semiconductores. Según una nota de prensa, la referida oficina dijo que emitiría una guía para dejar en claro que el uso de los chips Ascend de la empresa china Huawei «en cualquier parte del mundo» viola los controles de exportación de Estados Unidos y advirtió sobre las «consecuencias potenciales» de permitir que sus chips de IA sean utilizados en el entrenamiento e inferencia de modelos de IA chinos.

En una rueda de prensa el viernes, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Lin Jian, afirmó que Estados Unidos exagera el concepto de seguridad nacional, abusa de la supervisión de la exportación y de la jurisdicción amplia, y obstaculiza y reprime de forma infundada y maliciosa los chips y el sector de la IA en China, lo que vulnera las normas del mercado, desestabiliza las cadenas industriales y de suministro mundiales y socava los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas.

«China rechaza esto y no lo acepta en absoluto. Instamos a Estados Unidos a abandonar su proteccionismo e intimidación unilateral, y a poner fin a su abuso sobre las firmas tecnológicas y el rubro de la IA de China. El país tomará acciones firmes para defender su derecho al desarrollo y los derechos e intereses legítimos de las compañías chinas», declaró Lin.

Xiang Ligang, experto en telecomunicaciones, declaró el domingo que el continuo endurecimiento de las políticas de exportación de chips de alto rendimiento a China por la Casa Blanca so pretexto de la «seguridad nacional» es un ejemplo flagrante de extralimitación administrativa en el mercado.

Las trabas perjudicarán los intereses de las firmas estadounidenses. Este planteamiento de sustituir la competencia del mercado por la intervención administrativa acabará minando la competitividad global de sus empresas y no conseguirá frenar el progreso tecnológico de China a largo plazo, como es su misión, afirmó Xiang.

«La implacable presión de Washington sobre las empresas para que restrinjan sus ventas de chips a China a fin de ahogar su desarrollo en IA y preservar su dominio es puro pensamiento de suma cero. No solo daña a sus propias compañías, sino también al desarrollo global de la IA, estancando el progreso y la prosperidad mundial», sostuvo el domingo Ma Jihua, especialista en telecomunicaciones.