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spanish.china.org.cn | 17. 02. 2025 | Editor:Filo Fu [A A A]

Jingdezhen y otros sitios apuntan a la lista de la Unesco

Palabras clave: UNESCO, Patrimonio
Spanish.china.org.cn | 17. 02. 2025

Nuevo capítulo en la protección del patrimonio

Jingdezhen, en la provincia de Jiangxi, al este de China, considerada la «capital mundial de la porcelana», ha dado un paso importante para conformar la familia del Patrimonio Mundial de la Unesco. Su solicitud de inscripción llegó al centro de la agencia, así lo confirmó la oficina local encargada del trámite. De tener éxito, la porcelana de Jingdezhen sería la inclusión china en 2026, lo que marcaría otro hito en los esfuerzos del país por preservar y promover su rico legado cultural.  

Aunque Jingdezhen acelera su camino hacia el estatus de Patrimonio Cultural de la Humanidad, no es la única que busca el mismo honor. Desde los mausoleos de Xia del Oeste, en la región autónoma hui de Ningxia, en el noroeste, hasta el Eje Central de Beijing y el el Sanfang Qixiang (lit: Tres carriles y siete callejones), en la provincia oriental de Fujian, otros patrimonios preparan su candidatura o consolidan sus logros en materia de Patrimonio Mundial.

Zhang Yiwu, catedrático de Estudios Culturales de la Universidad de Beijing, se refirió al entusiasmo de los chinos por la inscripción en la Unesco y acotó que el cumplimiento de las normas puede mejorar la conservación del patrimonio chino. Más allá de ello, Lü Zhou, director del Centro del Patrimonio Nacional de la Universidad de Tsinghua, declaró que solicitar la inclusión puede reflejar los valores históricos y culturales de China, así como fomentar la comprensión global de su civilización.

Vitalidad al máximo

Jingdezhen, con una historia de 2000 años de fundición de cerámica y 1000 de hornos imperiales por su abundancia de materia prima de calidad, alberga las piezas más gloriosas de la industria china de la porcelana. Desde la década de 1950, en su zona urbana se han descubierto más de 150 hornos en más de 50 emplazamientos, desde las Cinco Dinastías (907-960) hasta las dinastías Ming y Qing (1368-1911). Su exclusivo yacimiento de hornos posee un elevado rango histórico y valor académico en términos de escala, alcance, densidad, longevidad y objetos de porcelana antigua.

El sitio propuesto abarca una amplia gama de lugares clave que enfatizan la relevancia histórica y cultural de la ciudad. Hablamos de una zona central de producción propiamente dicha, áreas de materias primas y varios yacimientos arqueológicos importantes como el de los hornos imperial y de Guanyinge. En conjunto, reflejan la cadena industrial completa de la porcelana de Jingdezhen: extracción de materias primas, procesamiento, transporte, producción y comercio.  

Además de proteger por varios lugares de producción de porcelana, Jingdezhen ha aplicado métodos creativos para garantizar la continuidad de su legado.  

Uno de ellos fue la creación del primer banco genético de porcelana antigua del mundo en el Sitio Imperial del Horno de Jingdezhen en colaboración con algunas instituciones académicas. Este plan parte de más de 40 años de exploración arqueológica que ha sacado a la luz casi 20 millones de fragmentos de porcelana. A través de métodos científicos avanzados, los expertos han podido restaurar piezas rotas y descifrar los orígenes, la evolución y la transformación de las antiguas civilizaciones de porcelana, reportó el Diario del Pueblo.

La información sobre especímenes del banco genético no solo puede utilizarse en la exposición, la protección de objetos culturales y la creación de refinados modelos impresos en 3D, sino que también proporciona apoyo técnico para el desarrollo de productos culturales contemporáneos de porcelana y la creación de de museos digitales. Los datos compartidos pueden favorecer, de igual manera, el diálogo y los intercambios en la cultura de la porcelana en el mundo.

Una visión más amplia

«El impacto de la solicitud es evidente desde varias perspectivas. El proceso puede enriquecer la comprensión nacional de su historia y cultura, fomentar la innovación en la conservación del patrimonio e inspirar a las comunidades para que se sientan orgullosas de su identidad cultural», apuntó Zhang, al analizar las razones por las que más proyectos se han consagrado a dicha inscripción en los últimos años.

En el caso de Sanfang Qixiang, las autoridades de Fuzhou han adoptado el principio de preservar la arquitectura tradicional y el patrimonio cultural sin alterar el trazado, el estilo y el carácter originales de sus calles y callejones. Como parte de su labor de conservación, la ciudad ha emprendido una serie de iniciativas en los últimos 2 años, de restauración de lugares de importancia cultural como la antigua residencia de Shen Baozhen y más de 100 patios históricos, así como actividades culturales para ahondar en la historia y la cultura de la región, informó el Diario de Fujian.

«La designación de patrimonio mundial es un proceso de descubrimiento continuo del valor de los bienes culturales», reflexionó Lü. Tomando como ejemplo la isla de Gulangyu, en Fujian, famosa por su variada arquitectura y su toque multicultural, fue incluida en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco en 2017. Se ha explorado su valor, sobre todo en los amplios y profundos intercambios entre la cultura tradicional china, la cultura local y diversas culturas extranjeras en la vida social, el diseño de jardines y la construcción, el estilo artístico y la tecnología moderna.

Lü sostuvo que los sitios patrimonio mundial de China expresan claramente los valores humanos de igualdad, aprendizaje mutuo, diálogo e inclusión entre civilizaciones. Una mejor conservación de los mismos puede contribuir a la apreciación global de la diversidad cultural.