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spanish.china.org.cn | 11. 10. 2024 | Editor:Teresa Zheng [A A A]

La UE debe prestar atención al temor de la industria europea

Palabras clave: UE, industria, antidumping
Spanish.china.org.cn | 11. 10. 2024

China anunció el martes que adoptaría medidas antidumping temporales contra el brandy europeo, lo que desencadenó una fuerte respuesta del bloque. Las acciones de empresas como Hennessy y RémyCointreau cayeron como consecuencia. China es un mercado clave para las ventas y los beneficios de este producto. No es de extrañar que el sitio “Politico” señalara que la medida desató el «temor» de los sectores europeos pertinentes. En respuesta a los informes de una «queja contundente» ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), el portavoz del Ministerio de Comercio chino declaró el miércoles que la acción es un «remedio comercial legítimo y totalmente conforme con las normas de la OMC». Por tanto, si la UE presentauna acción, no ganará.

Hay quienes en Europa exageran y relacionan el caso con los aranceles a los vehículos eléctricos chinos, distorsionando deliberadamente la legitimidad del planteamiento chino. Tal actitud no favorece la resolución de las disputas comerciales entre China y la UE. Las autoridades chinas recibieron una solicitud de la Asociación de la Industria de Licores de China el 30 de noviembre de 2023, siguieron estrictamente los procedimientosde investigación antidumping y escucharon las opiniones y sugerencias de la delegación europea en China, los exportadores y sus asociaciones, etc. Se trata de una respuesta válida, de conformidad con la normativa antidumping china, al perjuicio causado a la industria nacional. El análisis del daño y la causalidad se basa en datos objetivos de los rubros pertinentes. Los procedimientos son lícitos, la resolución es justa y la aplicación de la ley es conforme, protege eficazmente a la industria nacional del brandy, amenazada por detrimentos sustanciales. Esto refleja la actitud de China de velar por los derechos e intereses de su industria y empresas.

Algunos medios de comunicación y políticos occidentales simplifican y cubren con el velo de seguridad complejos casos económicos y comerciales internacionales y la vinculación política detrás de ellos sin tener en cuenta la lógica comercial. Relacionanla acción antidumping del brandy y la compensatoria de los vehículos eléctricos (VE). En realidad, confunden dos tipos diferentes de demandas en política comercial. El primero parte principalmente de la investigación de mercado y evaluación del daño económico, y las medidas correctivas se aplican al comportamiento real de dumping y el impacto negativo en el mercado chino. El país siguió los procedimientos y reglas de la OMC y tomó la decisión basándose en una investigación legal y no en replica a las acciones políticas de la UE.

Las cuestiones comerciales deben venir de hechos y fundamentos jurídicos, no de motivaciones políticas. En cuanto al brandy, China, a petición de su industria, inició una investigación detallada y científica sobre el perjuicio causado por el dumping y recabó comentarios y opiniones de las partes interesadas. Sin embargo, en el caso de antisubvención de la UE sobre los VE, la Comisión Europea inició la pesquisa sin un pedido del sector, lo que va claramente en contra de la voluntad del mercado. Los objetivos fueron muy selectivos y excluyeron a los principales exportadores de automóviles de la UE, lo que plantea numerosos problemas de incumplimiento, falta de transparencia e injusticia. ¿Quién viola los principios del comercio justo? El tema es claro.

Para grandes economías como China y la UE, con volúmenes sustanciales de comercio bilateral, resolver los conflictos mediante consultas es un proceso normal. El 8 de octubre, en las acciones del brandy, Paolo Gentiloni, comisario europeo de Economía, se dedicó a justificar las medidas contra los VE chinos, lo que indica que es consciente de lo poco razonable de imponerles gravámenes y de la escasa base para tales decisiones. De hecho, la relevancia del mercado chino para el brandy europeo es innegable. Los consumidores chinos acogen con satisfacción productos de alta calidad europeos. No obstante, lo esencial es que la UE ha exagerado el concepto de «desmarcarse» de China en los últimos años y ha introducido restricciones al comercio y la inversión, vulnerando la confianza mutua y el entorno de cooperación en los lazos económicos y comerciales. Los nervios atacan a las industrias europeas, inquietas por fricciones comerciales a mayor escala o incluso una guerra  total. Lo que debe indagar el bloque es la razón de tal temor y de dónde provienen las políticas que lo han sensibilizado tanto.

La reacción de los ramos europeos demuestra que China y la UE no pueden, no deben «desvincularse», ni es factible hacerlo. En 2023, a pesar de la desaceleración del comercio mundial, el intercambio entre ambas alcanzó los 783 000 millones de dólares, con transacciones en promedio de casi 1,5 millones de dólares por minuto. La reserva de inversiones bidireccionales supera los 250 000 millones de dólares, y las firmas siguen viendo con buenos ojos los mercados de la otra. Según la Encuesta de Confianza Empresarial 2023 publicada por la Cámara de Comercio de la Unión Europea en China, más del 90% de las compañías europeas encuestadas planean hacer de China su destino de inversión. El Informe Anual 2023 de la Cámara de Comercio de China para la UE muestra que el 80 % de las chinas buscan potenciar sus negocios en Europa. Dada la compleja y volátil situación internacional actual, China y la UE deberían atender las necesidades reales de las empresas locales, resolver la crisis a través del diálogo y la negociación, y promover la cooperación internacional para encarar los desafíos, al tiempo que avanzan al unísono en el multilateralismo y la gobernanza global.

Las disputas deben evaluarse a través de datos de mercado objetivos y resultados de estudios científicos, y solucionarse mediante consultas y diálogo en pie de igualdad, en lugar de utilizar represalias políticas o medios diplomáticos como amenazas, que conducirán al deterioro y la escalada de la situación. Esperemos que la parte europea pueda hacer frente al dumping de sus propias compañías, eliminar las prácticas desleales de algunas de ellas,corregir comportamientos proteccionistas de motivación política, demostrar acciones prácticas para aplicar la voluntad de colaboración y volver al camino correcto de la ganancia compartida.