El impulso de la unión entre China y África para avanzar en la modernización no tiene límites

El jueves 5 de septiembre se celebró la Cumbre 2024 del Foro de Cooperación China-África (FOCAC, por sus siglas en inglés). El presidente chino, Xi Jinping, asistió a la ceremonia de apertura y pronunció un discurso inaugural titulado "Trabajar juntos para fomentar la modernización y construir la comunidad de futuro compartido". El presidente Xi propuso que los relaciones bilaterales entre China y todos los países africanos que tienen lazos diplomáticos con China se eleven al nivel de relaciones estratégicas, y que la caracterización general de las relaciones China-África se eleve a una comunidad China-África con un futuro compartido para la nueva era. La Cumbre adoptó la Declaración de Beijing sobre la Construcción Conjunta de una Comunidad China-África para Todo Tiempo con un Futuro Compartido para la Nueva Era y el Plan de Acción de Beijing (2025-2027) del FOCAC. La cooperación entre China y África ha abierto un nuevo capítulo en la historia del avance conjunto de la modernización.

El presidente Xi enfatizó que China y África representan un tercio de la población mundial. Sin su modernización, no habrá modernización global. En los próximos tres años, China trabajará con África para llevar a cabo las siguientes 10 acciones de asociación para la modernización con el fin de profundizar la cooperación China-África y encabezar la modernización del Sur Global. Al conectar estrechamente el futuro de China y África a través del tema de la modernización, se generará un impulso de desarrollo. La visión global plasmada en este proyecto, y la vasta creatividad y potencial que contiene, sirven como modelo y fuente de inspiración para el Sur Global, así como para el mundo entero. El impulso no tiene límites.

En las 10 acciones de la asociación, Xi anunció que China ha decidido otorgar a todos los países menos adelantados (PMA) que tienen relaciones diplomáticas con China, incluidos 33 países de África, un trato arancelario cero para el 100 por ciento de las líneas arancelarias. Se trata de una medida proactiva y unilateral de China para ampliar su acceso a los mercados. China es el primer país en desarrollo y la principal economía mundial en implementar una iniciativa de este tipo, lo que demuestra que al promover el desarrollo con el mundo, China está creando oportunidades y logrando resultados de beneficio mutuo sin ninguna agenda oculta, ningún interés geopolítico propio ni ninguna condición adjunta. Si la cooperación entre China y África es como un espejo, lo que la gente ve en ella no son solo enormes oportunidades de desarrollo, sino también la genuina buena voluntad y la visión global de China.

Y esto es solo un epítome de la cooperación entre China y África. Las 10 acciones de la asociación cubren una amplia gama de áreas, desde el aprendizaje mutuo, la prosperidad comercial y el desarrollo de infraestructuras hasta la atención médica, la colaboración agrícola, los intercambios entre pueblos, el desarrollo verde y la seguridad común. Por ejemplo, destaca que China proporcionará 60.000 oportunidades de capacitación a África, principalmente para mujeres y jóvenes, con el objetivo de abordar las preocupaciones de desarrollo profesional de los jóvenes africanos y cultivar una nueva generación de talentos para África.

China también enviará 500 expertos agrícolas y establecerá una alianza de innovación tecnológica y científica agrícola China-África, que abordará cuestiones de seguridad alimentaria y autosuficiencia en África en el contexto del cambio climático global. Las 10 acciones de la asociación son concretas, orientadas a brindar soluciones viables a problemas específicos. China es seria y responsable en el cumplimiento de su compromiso con África. No es difícil ver en las 10 acciones de la asociación que China se ha comprometido a ayudar a los países africanos a lograr la estabilidad política y la estabilidad social. Sobre la base de la estabilidad, China ayuda a los países africanos a buscar el desarrollo sostenible a largo plazo, centrándose no solo en resolver los problemas de larga data que obstaculizan el desarrollo de África, sino también en nuevos caminos que promuevan el progreso futuro de África. Esto indica que la comunidad China-África con un futuro compartido no es de ninguna manera un plan temporal; más bien, trasciende momentos y acontecimientos concretos, centrándose genuinamente en el desarrollo general de África. Es por eso que posee una fuerza motriz vigorosa e inagotable y demuestra una gran resistencia.

La exploración de la construcción de una comunidad China-África de alto nivel con un futuro compartido tiene una importancia global y contemporánea significativa. Los países en desarrollo se enfrentan a una serie de desafíos reales y se ven fácilmente afectados por la compleja y cambiante situación internacional, que puede perturbar o incluso obstaculizar el logro de los objetivos establecidos. Si la cooperación entre China y África puede forjar un nuevo camino para la cooperación Sur-Sur, sería un tremendo estímulo para los países del Sur Global. Esto proporcionaría una nueva perspectiva para abordar los problemas del desarrollo mundial y tiene consecuencias positivas para la demostración y la promoción.

China tiene una población de más de 1.400 millones de habitantes, y África también tiene una población de más de 1.400 millones. Un proceso de modernización de esta magnitud no tiene precedentes en la historia de la civilización humana. China tiene la firme determinación de que "en el camino hacia la modernización, nadie ni ningún país debe quedarse atrás". Esta visión como un país importante escribirá un nuevo capítulo en la historia del desarrollo humano, haciendo que el futuro de la modernización en el Sur Global sea prometedor, y también promoverá una perspectiva brillante para el mundo hacia la paz, la seguridad, la prosperidad y el progreso.