Trabas a las exportaciones de modelos de IA son una muestra de "hegemonía"

Expertos chinos afirmaron el jueves que las posibles restricciones a la exportación de modelos de inteligencia artificial (IA) por Estados Unidos apuntan principalmente a China, y que la medida es básicamente un caso de autoaislamiento y una acción hegemónica que obstaculizará la rápida evolución del sector mundial de la IA y frenará los avances logrados en la globalización.

Los supuestos temores de seguridad sobre el uso de modelos avanzados de IA son una retórica política destinada a avivar la inquietud sobre el desarrollo chino, en medio de una represión estadounidense más intensa sobre los productos chinos, indicaron los observadores.

Reuters informó de que Washington estudia una nueva iniciativa reguladora para restringir la venta al exterior de modelos de IA patentados o de código cerrado, cuyo programa y datos de entrenamiento se mantienen en secreto.

Su razón de ser yace en la preocupación de que "los adversarios de Estados Unidos los puedan utilizar... para lanzar ciberataques agresivos o incluso crear potentes armas biológicas".

La medida se suma a las restricciones que Washington ha puesto en marcha para bloquear las exportaciones de sofisticadas tecnologías de IA a China.

Ante el auge de este rubro en China, el Gobierno estadounidense es consciente de la presión competitiva que ejerce su mayor rival. Con el avance de estos  modelos como un nuevo punto focal de competencia, Estados Unidos utiliza una y otra vez el discurso de "amenaza a la seguridad nacional" para agudizar los temores sobre los productos chinos, en un intento de dificultar la modernización industrial de China, declaró el jueves Ma Jihua, analista de telecomunicaciones.

Estados Unidos anunció en abril que iba a incluir a 4 empresas chinas en una lista prohibitiva de exportaciones por ayudar supuestamente a entidades chinas a adquirir chips de IA infringiendo la normativa estadounidense, reportaron los medios. Los analistas sostuvieron que la iniciativa formaba parte del aumento en la represión contra el sector chino de alta tecnología en los últimos años.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China apuntó en abril: "nos oponemos firmemente a las sanciones unilaterales ilegales de Estados Unidos" y prometió hacer "lo necesario para salvaguardar con convicción los derechos e intereses legítimos de las firmas chinas, al tiempo que instaba a su contraparte a dejar de politizar cuestiones comerciales y tecnológicas, y convertirlas en armas".

Independientemente de lo que finalmente adopte el país norteamericano, el impacto en el rubro chino de IA será mínimo, a decir de los especialistas. Pan Helin, miembro del Comité de Expertos para la Economía de la Información y la Comunicación del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información, dijo el jueves que, en lugar de ello, la medida impulsaría a los usuarios chinos hacia los modelos lingüísticos de gran tamaño locales, los cuales cobran notoriedad.

Este campo es muy competitivo en China, con un amplio abanico de opciones disponibles para su enorme mercado. Dadas las disparidades entre los contextos chino e inglés, los productos de IA nacionales se adaptan mejor a los consumidores chinos que sus pares estadounidenses, afirmó Pan, destacando el gran potencial de este ámbito en el país.

La embajada china en Estados Unidos respondió denunciando la acción como un "típico acto de coerción económica e intimidación unilateral, al que China se opone plenamente”, y añadió que tomaría las "medidas necesarias" para proteger sus intereses, informó Reuters.

China redobla sus esfuerzos para fomentar el avance de la IA y ha sido testigo de resultados fructíferos. Según su Administración del Ciberespacio, hasta abril se habían registrado en el país 117 compañías de servicios de IA generativa, lo que refleja la feroz competencia en este floreciente sector.

El Informe de Trabajo del Gobierno de este año reiteró el rol crucial de esta tecnología en la aceleración de nuevas fuerzas productivas de calidad, resaltando el continuo respaldo del país en el desarrollo de alta calidad de la economía digital mediante un incremento de la I+D, la aplicación de grandes datos e IA y el lanzamiento de la iniciativa AI Plus.