Lluvias arrasan el sur de Brasil

Las intensas lluvias en el estado de Rio Grande do Sul en Brasil han dejado hasta el momento un saldo de al menos 78 muertos y más 115 000 desplazados, reportaron el domingo las autoridades locales.

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, llegó al lugar el domingo por la mañana junto a gran parte de su gabinete para organizar las tareas de socorro y reconstrucción.

Defensa Civil advirtió que la cifra de fallecidos podría dispararse si se toman en cuenta los 105 desaparecidos del domingo y los 70 del día anterior.

Las tormentas provocaron inundaciones en más de dos tercios de los casi 500 pueblos y ciudades del estado, limítrofe con Uruguay y Argentina, destruyendo pistas y puentes en varias áreas, y causando deslizamientos de tierra y el derrumbe parcial de una presa en una pequeña central hidroeléctrica.

Más de 400 000 residentes quedaron sin suministro eléctrico la noche del domingo y casi un tercio de la población local no tenía agua potable, indicaron las autoridades.

En la capital estatal, Porto Alegre, el lago Guaiba se desbordó con un nivel de agua récord, señaló el servicio geológico, en tanto el aeropuerto internacional suspendió todos sus vuelos el viernes.

En su discurso semanal en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Papa Francisco apuntó el domingo que sus oraciones van para los damnificados. "Que el Señor reciba a los muertos, consuele a sus familias y a todos aquellos que tuvieron que dejar sus hogares", dijo.