El Foro de Boao 2024 despliega su papel como promotor de la colaboración, el desarrollo y la paz mundial

Por Jorge Fernández

El Foro de Boao de este año toma la colaboración global, la unidad y la paz como pilares fundamentales para el desarrollo y la prosperidad de todas las regiones del mundo.

Sin paz, no puede haber desarrollo. Así como en una comunidad residencial, donde la seguridad de la casa vecina repercute en las demás, la estabilidad interregional es fundamental para el progreso. Esta semana, durante cuatro días, la provincia insular china de Hainan alberga el Foro de Boao para Asia 2024, un evento en donde figuras influyentes en la toma de decisión, incluidos estrategas y jefes de Estado, comparten públicamente sus planes y estrategias de desarrollo para el futuro. Entre los temas para este calendario figura, no fortuitamente, el tema de la seguridad global.

El martes, fecha en la que comenzó esta cita regional, los organizadores sacaron a la luz el informe anual sobre las proyecciones económicas en Asia para este año. Los datos revelan perspectivas de crecimiento prometedoras, con una proyección de hasta 4,5 % para los dos próximos semestres. Según afirman los expertos, el crecimiento descansará sobre la base del consumo interno. Y si bien la modesta cifra no es nada despreciable, lo cierto es que podría estar arriba del 5, de no ser porque la demanda externa y las conflagraciones bélicas, aunados a los ataques sistemáticos contra la globalización, están entorpeciendo el potencial del crecimiento en Asia.

El mundo es un lugar complejo en donde distintos fenómenos influyen en el crecimiento. Variables como la pandemia escapan al control de gobiernos y estrategas. Sin embargo, otros más, como la seguridad global, que en teoría deberían estar bajo nuestro control, a menudo se escapan de nuestras manos y terminan afectando negativamente el desempeño económico regional. Los debates sobre la seguridad global, en consecuencia, son un tema apropiado en un foro orientado a mejorar el desarrollo económico y la cooperación internacional, junto con otros temas más de interés regional, entre ellos la innovación científica, la economía global, la tecnología y la inteligencia artificial.

Con una asistencia de 5. 000 personas, el Foro de Boao para Asia se constituye como un importante cónclave para la discusión y el diálogo de trascendencia internacional en momentos de ralentización económica mundial. Su celebración coincide con el segundo aniversario de la Iniciativa de Seguridad Global, propuesta por el presidente de China, que convoca a la unidad y a la cooperación entre Estados para salvaguardar la paz en el mundo. El desarrollo económico de las regiones está estrechamente vinculado a los desafíos globales a la seguridad. Por lo tanto, es crucial que propuestas como la china, que refuerzan el valor de la unidad y la cooperación, se implementen conjuntamente con tareas para estimular el sano crecimiento económico.

Asia es un continente rico en recursos, pero a la vez se enfrenta desafíos cotidianos. Es una de las regiones más densamente pobladas, con países como China e India que suman más de un tercio de la población mundial. Bajo estas condiciones, es comprensible que la región sienta el peso del alto consumo de energía y que se observe, como en el caso de China, la ejecución de acciones que conduzcan a una rápido proceso de descarbonización. Los bienes y servicios que Asia ofrece son fundamentales tanto para el mundo como para los países de la región. En 2022, por ejemplo, la dependencia global en el comercio asiático de bienes se mantuvo en el 38, 8%. De igual forma, la dependencia de las economías asiáticas sobre el comercio asiático de bienes se mantuvo en aun 57,4%. La ASEAN integra a la mayoría de los países de la región y está impulsando el comercio interregional con los bienes que aquí se producen.

Asia no puede ni debe prosperar ignorando los retos y las dificultades a las que se enfrentan otras regiones del planeta. Vivimos en una aldea global y tal y como los éxitos que aquí se alcanzan tienen un impacto más allá de las fronteras, las crisis y tragedias que ocurren en otras partes del mundo son lastres que ralentizan el dinamismo de los que viven en este continente. La construcción de una comunidad de destino común para la humanidad parte de la compartición y el beneficio común mediante esquemas de trabajo conjunto en un mundo de paz. Este año el Foro de Boao para Asia lleva como lema “Desafíos comunes, responsabilidades compartidas”. El lema es una invitación a otros países y regiones para reunir a tantas figuras como sea posible para abordar mediante esquemas multidisciplinarios soluciones a problemas comunes. Plataformas como la de Hainan cobran un valor inestimable por su papel en la promoción de estrategias para el desarrollo y la construcción de un mundo de paz duradera.

Si bien el Foro de este año tiene una agenda con varios puntos, entre los que se destaca la ciencia y la tecnología o la aplicación de la inteligencia artificial, lo cierto es que todo aquello abordado en este cónclave tiene como fin el aprendizaje conjunto. Solo aprendiendo de las experiencias ajenas y compartiendo los escollos superados en el camino, la humanidad tiene mayores posibilidades de emprender tareas que beneficien a todos por igual. Es fundamental recordar que los esfuerzos, al igual que los emprendidos para materializar el beneficio material, también deben orientarse hacia la preservación de la paz entre las regiones. Es una feliz coincidencia que el Foro de este año se celebre en estas fechas, cuando la Iniciativa de Seguridad Global cumple dos años de existencia, puesto que sirve como recordatorio de la importancia de construir una arquitectura de seguridad global para todos.

Hoy vemos con horror cómo la guerra, generada por la imposibilidad de garantizar una seguridad colectiva, desmembra la unidad nacional. Para vivir en paz en un mismo planeta, es necesario emprender prácticas humanísticas orientadas al bien común. El mundo de hoy necesita más que nunca plataformas donde se fomente la diversidad de pensamientos. Estas plataformas deben estar basadas en el respeto mutuo y en filosofías de colaboración y ayuda. El desarrollo y la prosperidad requieren esfuerzo y colaboración, no son fácilmente alcanzables. Y lo mismo ocurre con la paz, que debe protegerse, mantenerse y crear condiciones para su permanencia. Tanto el Foro de Boao como la Iniciativa de Seguridad Global son ejemplos de esfuerzos altruistas que pueden contribuir a este objetivo.