spanish.china.org.cn | 18. 01. 2024 | Editor:Filo Fu | [A A A] |
El avance del 5,2 % de China alienta la recuperación económica mundial
Ilustración: Tang Tengfei/Global Times
La Oficina Nacional de Estadística de China publicó el miércoles una serie de datos clave sobre la economía nacional en 2023. Entre ellos, el que más llama la atención es el crecimiento del PIB del 5,2 %, superior al objetivo previsto fijado a principios del año pasado. Una vez más, la trayectoria real de la economía china se desmarca del pesimismo externo, críticas e incluso teorías de colapso, demostrando una amplia resistencia y potencial. Según estimaciones a partir de previsiones del Banco Mundial sobre el crecimiento de las principales economías en 2023, el incremento de China es casi 1,5 veces el de Estados Unidos y 16,5 veces el de la eurozona. Su aporte al avance económico mundial es mayor al combinado de estos dos más Japón, convirtiéndola en uno de sus principales motores.
De los informes y comentarios de diversos medios nacionales e internacionales se desprende que, en general, esta cifra coincide con las expectativas del mercado, o incluso las supera. Honestamente, la recuperación de la economía china en 2023 no fue del todo tranquila. El impacto del "efecto cicatriz" de la pandemia fue mayor de lo esperado, con una persistente atonía del sector inmobiliario. Simultáneamente, el débil avance de la economía mundial ejerció presión sobre el crecimiento del comercio, y no deben subestimarse los efectos indirectos de medidas como las subidas de tipos de interés de la Reserva Federal y la apreciación del dólar. El público, en diversos grados, sufrió el impacto de estos retos internos y externos en sus percepciones el año pasado.
Hubo incluso voces que apuntaron "deflación" en la opinión pública y oportunistas de fuera la aprovecharon para corear el "colapso de la economía china". Lograr estos resultados en este contexto tiene sin duda un significado positivo. No solo cumple un rol constructivo al permitir a los observadores nacionales e internacionales comprender oportuna y claramente el panorama general de la economía china, sino también sirve como la mejor refutación a diversas teorías y especulaciones infundadas sobre ella. Además, supone un fuerte estímulo en medio de las expectativas generalmente más bajas de recuperación económica mundial para este año.
De hecho, según diversos datos publicados por la Oficina Nacional de Estadística, es evidente que la economía china pasó por una transformación acelerada en 2023. En primer lugar, los tradicionales "tres motores" -exportaciones, consumo e inversión- sufrieron giros enormes en su contribución al crecimiento económico. En 2023, la tasa de aporte de la demanda interna, representada por el consumo y la inversión, fue del 111,4 %, esto es un aumento de 25,3 puntos porcentuales respecto a los 12 meses anteriores. Sin embargo, también existe el problema de su insuficiencia efectiva, por lo que cabe seguir reforzando el binomio de la reforma estructural por el lado de la oferta y la expansión de la demanda efectiva.
En segundo lugar, el ajuste estructural y la transformación y modernización del desarrollo económico se han acelerado. En 2023, se exportaron "tres nuevos artículos" por más de 1 billón de yuanes (140 000 millones de dólares): vehículos eléctricos, paneles solares y baterías de litio, y las inversiones en fabricación y servicios de alta tecnología subieron un 9,9 % y 11,4 %, respectivamente. No obstante, es visible que aún no se ha aprovechado plenamente el potencial de estos rubros en el avance de la economía nacional.
Es menester decir que es justamente en el complejo y diverso proceso de cambios económicos de China donde se han formado varias observaciones y sentimientos, pero para una economía a gran escala como la china, un gran barco, lo primordial es determinar si navega en la dirección correcta. En el desarrollo económico, ya hemos sido testigos del fuerte potencial de avanzar con altos estándares de calidad. Por eso, el 5,2 % representa la confianza en que la economía china podrá sortear los retos este año. Ahora, la clave es liberar ese potencial con paciencia y esfuerzos redoblados, y lograr sin problemas la transformación y actualización de la estructura económica.
Cabe prever que 2024 tampoco será un paseo, ya que la competencia entre diversas fuerzas será mayor, pero lo seguro es que en un escenario de ralentización del crecimiento económico mundial, el continuo aumento de los riesgos geopolíticos, el inicio de un superciclo de innovación y la aceleración del cambio ecológico mundial, la dirección macroeconómica y política general de China es la más clara y estable entre las grandes economías. Buscaremos nuevos incentivos en ese sentido a través de la innovación tecnológica, la transformación y la modernización, con más inversión en áreas como la economía digital, la inteligencia artificial y la tecnología verde, mientras se continúa con las políticas para un crecimiento estable. La resistente economía china brindará al mundo certidumbre y estabilidad.