La nieve y la hospitalidad impulsan el turismo en Harbin

Xinhua/Wang Jianwei

Conocida por su turismo de invierno, Harbin, capital de la provincia nororiental china de Heilongjiang, ha experimentado un auge que la ha convertido en tendencia en las redes sociales.

El número de viajeros que disfrutan de sus actividades de hielo y nieve empezó a crecer a medida que el 2023 llegaba a su fin. Para el 20 de diciembre, el tráfico anual de pasajeros del aeropuerto local había superado los 20 millones, convirtiéndose en el primero de la región noreste en lograr este hito.

Con la llegada de las vacaciones de Año Nuevo, su popularidad alcanzó nuevas alturas. Según la Oficina de Cultura, Radiodifusión, Televisión y Turismo de Harbin, en los 3 días festivos, Harbin recibió a 3,05 millones de turistas y obtuvo ingresos por 5910 millones de yuanes (830 millones de dólares), ambos máximos históricos.

Harbin no escatimó esfuerzos para mostrar su calidez. La ciudad cuidó cada detalle para ofrecer a sus invitados la mejor experiencia y recuerdos posibles. En el Mundo de Hielo y Nieve, un famoso parque temático, hubo muchas novedades, como aerodeslizadores y bicicletas, norias y globos aerostáticos. Los turistas fueron acogidos con actuaciones en el aeropuerto y vestimentas de abrigo.

Sus residentes también desempeñaron un rol clave de ayuda. Viajaron voluntariamente fuera de las horas punta para aliviar el tráfico y muchos ofrecieron viajes gratuitos en sus vehículos. Ante la gran acogida durante la Nochevieja, algunos no pudieron reservar hoteles por lo que el Gobierno local implementó el Centro de Servicios de la Asamblea Popular Provincial como alojamiento a bajo precio.

En redes sociales, los efusivos elogios de turistas e internautas que deseaban visitar la ciudad llevaron a las autoridades a enviar una carta abierta para expresar su gratitud.

"Sus palabras gentiles nos conmueven, a nosotros, el pueblo de Heilongjiang, hasta el punto que nos hemos quedado sin palabras... Les agradecemos su sincero entusiasmo por visitar Heilongjiang... Este invierno, han traído alegría y vida a esta tierra. Es un placer acogerlos".

Varios temas relacionados con Harbin dominaron la lista de tendencias en diferentes plataformas sociales. Muchos turistas proceden del sur del país, donde rara vez nieva, y son por lo general más pequeños que los nativos de Heilongjiang por lo que los locales los llamaron con cariño "papas pequeñas del sur", frase que rápidamente ganó adeptos en la red.

Como resultado muchos recorrían la ciudad preguntando a los turistas que esperaban taxi en medio del frío: "¿Eres una papa pequeña del sur? Te llevo gratis". Organizaciones locales y residentes se ofrecieron de voluntarios para repartir té de jengibre o compresas calientes en puntos turísticos para protegerlos del frío.

"Todo es gratis. Toma uno. Bienvenido a nuestra ciudad".

Los visitantes aplaudieron el gesto en las redes sociales y compartieron su cálido recuerdo de la ciudad. Un huésped dejó una nota en el hotel: "Esta papa pequeña del sur ya se va. Harbin es tan divertida y hermosa. La gente es muy hospitalaria. Espero volver a verlos en el próximo viaje. Atentamente, papa pequeña del sur". La nota devino una etiqueta muy popular en las publicaciones de otros viajeros.

Varios factores contribuyeron al florecimiento del turismo invernal en Harbin. Tal y como señalan los análisis, aunque el mercado nacional del sector ha resurgido, la estación suele ser la temporada alta en el noreste. El impulso del turismo de hielo y nieve, alimentado por los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing, ha servido en tal sentido.

Sin embargo, esto no explica por sí solo el despegue de Harbin. Los diferentes departamentos y ramos han realizado denotados esfuerzos para incentivar el turismo. Como atracción emblemática, el Mundo de Hielo y Nieve es el más grande de su historia y se construyó e inauguró antes de lo previsto para adaptarse mejor a la demanda. En cuanto a la creación de un entorno sólido para el rubro, la acción local ha sido más proactiva. Según los medios, las autoridades celebraron una reunión de "100 días" para el turismo invernal y capacitaron a profesionales del sector.

Pingüinos con mochilas pasean por las calles con nieve y esculturas de hielo de fondo. Turistas ataviados con diferentes estilos posan en la catedral de Santa Sofía en medio de la nieve y bajo el cielo nocturno. En un restaurante, los visitantes prueban por primera vez la "pera helada". Mientras que los locales la suelen comer entera, el establecimiento las cortó en rodajas y las colocó en un bonito plato. Todos estos momentos fueron compartidos y reenviados en las redes sociales.

En la era del internet, detalles y momentos conmovedores como estos se propagaron por doquier

El auge del turismo en Harbin bien podría ser lo que el mercado nacional necesita de cara al Año Nuevo. Esperemos que esta sinceridad, hospitalidad y atención al detalle puedan replicarse en otras ciudades.