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spanish.china.org.cn | 05. 06. 2023 | Editor:Lety Du [A A A]

Latinoamérica opta por el beneficio mutuo chino frente a la hegemonía de EE.UU.

Palabras clave: Latinoamérica, China, EE.UU.

La cooperación entre China y América Latina aumenta de manera constante. Durante la visita del ministro de Economía argentino, Sergio Massa, a China la semana pasada, ambos países dieron una serie de pasos para ampliar sus lazos bilaterales. El viernes, firmaron un plan para promover la construcción de la iniciativa de la Franja y la Ruta, y un acuerdo para renovar y extender el programa de intercambio de divisas. Además, China ha expresado su apoyo a la adhesión de Argentina al mecanismo de los BRICS.

Si bien estos actos positivos para incrementar la cooperación de mutuo beneficio deberían ser normales y aplaudidos, algunos en Estados Unidos son incapaces de ocultar su amargura por el creciente acercamiento entre China y América Latina. El viernes, Bloomberg informó de que este buscaba "nuevas herramientas para competir con China en Latinoamérica". Citando a Juan González, director principal para el hemisferio occidental del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, el medio reportó que Washington pretende alisar la posición del país en la zona con cambios en la Corporación Financiera de Desarrollo, una agencia para naciones de ingresos bajos y medios.

Estas medidas destacan el enfoque hegemónico y de pérdida compartida de Estados Unidos en sus relaciones con otros países y regiones. Por mucho tiempo, ha tratado a América Latina como su "patio trasero" y ha intentado sabotear activamente una cooperación normal y beneficiosa entre China y la región. Sin embargo, en medio de las dificultades económicas locales en gran parte debido a sus políticas tóxicas, muchos en América Latina se inclinan cada vez más hacia China.

Durante años, Estados Unidos ha intentado aumentar su influencia en países como Argentina. No obstante, las naciones latinoamericanas no han sido capaces de lograr la estabilidad política y el desarrollo económico por largo tiempo deseado. Ahora que su vecino del norte adopta una postura proteccionista, sus oportunidades de avance comercial se han visto aún más mermadas, y algunos incluso encaran múltiples crisis dada la irresponsable política monetaria de la Reserva Federal estadounidense.

Por ejemplo, la tasa de inflación de Argentina alcanzó un sorprendente 8,4 % en abril. En los últimos 12 meses, la tasa ascendió al 108,8 % con una subida de precios del 32 % en los cuatro primeros meses del año. Mientras tanto, sus reservas de divisas se desploman. Algunos economistas han indicado que tanto factores internos como externos, llámese la política monetaria de Estados Unidos, son responsables de ello.

Otros países de la región enfrentan situaciones similares. Y ahora son más conscientes que nunca de que el Consenso de Washington, basado y dirigido a preservar el dominio de Estados Unidos, está muerto. En este contexto, crece la percepción de China como socio fiable. El Mercado Común del Sur (Mercosur) ha mostrado gran interés en ampliar la cooperación con China basado en el beneficio mutuo y el vasto potencial de colaboración.

En el caso de Argentina, China es su segundo socio comercial y el acuerdo de intercambio de divisas ha contribuido a aliviar su escasez de divisas. Además, ambos países son altamente complementarios en lo económico, razón fundamental para una colaboración más estrecha.

La inversión en infraestructura en el marco de la Franja y la Ruta no sólo beneficiará al desarrollo argentino, sino también impulsará sus exportaciones a China y la cooperación en turismo y otras áreas. Cabe recalcar que el avance conjunto de proyectos en su marco se centra exclusivamente en el beneficio mutuo y en las necesidades comunes, y no está dirigido a terceros.

Además, China y Argentina trabajan arduamente en planes conjuntos de extracción de litio para impulsar el sector de vehículos eléctricos y la transición a la energía verde. Argentina alberga grandes reservas del mineral, mientras que las empresas chinas producen anualmente más de dos tercios del litio mundial. Por tanto, su cooperación favorece tanto la transición a la energía verde como a las exportaciones argentinas.

En un sentido amplio, la ejecución de proyectos de la Franja y la Ruta fomentará a su vez la conectividad y la cooperación dentro del Mercosur. De hecho, Argentina no es el único miembro que busca fortalecer los lazos con China. Brasil, la mayor economía de la región, también se muestra dispuesto a estrecharla. En ese sentido, ambos han empezado a utilizar el yuan chino en determinados acuerdos comerciales.

Para el Mercosur, dado que el comercio entre sus integrantes es limitado y existe una acumulación de presiones competitivas, es vital ser parte de la gran cadena industrial internacional para obtener un mayor desarrollo social y económico. En este proceso, China, con su enfoque de ganancia compartida es uno de los socios más adecuados, mientras que el esquema proteccionista y hegemónico de Estados Unidos pierde cada vez más adeptos.