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spanish.china.org.cn | 19. 05. 2023 | Editor:Elena Yang [A A A]

La Cumbre China-Asia Central se constituye en un baluarte para defender el bien común y promover el desarrollo regional

Palabras clave: Cumbre China-Asia Central


Por Jorge Fernández

A diferencia de Occidente, centrado en cruzadas democratizadoras por medio de la fuerza, las vinculaciones de China con Asia Central parten en la actualidad de intereses comunes que requieren como condición sine qua non la paz y la estabilidad. Hoy, de cara a un entorno internacional convulso, los países de Asia Central adquieren un valor geoestratégico inédito y, frente a la mirada avariciosa de Occidente, requieren la salvaguarda de sus propios intereses y de su derecho libre al desarrollo.

En el discurso de apertura de la Cumbre China-Asia Central, el presidente de China, Xi Jinping, resaltó la importancia de contar con el apoyo mutuo y de profundizar la confianza, puesto que ellos sirven como plataformas para trabajar codo con codo por la materialización de intereses fundamentales. En medio de un sistema internacional que tolera el acoso y maltrato a la soberanía, a la independencia, a la dignidad nacional y al derecho al desarrollo, los jefes de Estado de estos seis países abordan en Shaanxi fórmulas a través de las cuales pueden juntos repeler el terrorismo, el separatismo y el extremismo, por un lado, y la interferencia e instigación del exterior, por el otro lado.

La antigua ciudad de Xi’an hoy es sede de esta significativa Cumbre, que apunta a construir un centro en donde la paz y el desarrollo económico se materialicen a través del diálogo y la consulta mutua. Al igual que en el pasado, cuando la antigua Ruta de la Seda unió a los pueblos del mundo en torno a un interés común,hoy esta histórica ciudad escucha atenta la conversación entre seis líderes regionales que del 18 al 19 de mayo ofrecerán fórmulas para construir una comunidad de destino común regional y mundial. Es en ese sentido que el presidente Xi Jinping hizo hincapié en el discurso de apertura, pronunciado este viernes, de la importancia de cooperar para liberar a plenitud el potencial regional en diferentes áreas.

El diseño conjunto de una hoja de ruta para llevar a nuevos niveles la cooperación evidencia que, pese a las turbulencias mundiales, Asia Central entiende que la comunicación y el bien común están por encima de todo. China, en voz de su presidente Xi Jinping, ha hecho explícito el potencial que yace en una vinculación racional, concertada y más estrecha entre China y los países de Asia Central. Aquí las relaciones económicas y culturales han dejado una infraestructura material e inmaterial digna de emulación en otras partes del mundo.

Es por ello que el presidente chino, frente a los líderes de Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán, enfatizó en la cooperación estrecha en el comercio, la industria, la energía y el transporte, al tiempo que aclaró que al fomentar nuevos motores de crecimiento, entre ellos el de las finanzas y la agricultura, los países que integran esta región están en mejores condiciones para llevar a cabo tareas en común, a saber, la reducción de la pobreza, la reducción de la emisión de carbono y la mejora de las condiciones de salud de los habitantes.

En las últimas tres décadas, periodo en el que China y los países de Asia Central han profundizado sus relaciones oficiales, el volumen comercial ha alcanzado dígitos inéditos. El año pasado el volumen comercial llegó a los 70 mil millones de dólares estadounidenses, y esta cifra, a su vez, representa un aumento interanual del 40%. Además, las inversiones directas de China, que hoy por hoy es el mayor socio comercial de la región en su conjunto, casi llegaron a los 15 mil millones de dólares estadounidenses en los cinco países centroasiáticos.

La Cumbre China-Asia Central reviste un enorme significado puesto que no solo hace patente la cooperación, el respeto y el beneficio mutuo como fórmula para materializar intereses propios y colectivos, sino que también es una plataforma regional para acelerar la construcción conjunta de la iniciativa de la Franja y la Ruta. Y es aquí en donde una interconexión estable, próspera y pacífica de esta región redunda en otras regiones y continentes. En este mundo globalizado, las decisiones tomadas por los seis líderes tendrán un impacto positivo en varios rincones del planeta.

En cuanto a la construcción de la Franja y la Ruta, el presidente de China hizo un llamamiento a los seis países a constituirse en líderes de la cooperación y construcción de esta iniciativa, que permite tanto a los países de Asia Central como de otras partes del mundo a encontrar nichos de oportunidad desde los cuales se promueva la modernización conjunta, el conocimiento mutuo, el intercambio cultural y la hermandad entre los pueblos. El anuncio hecho por el mandatario chino en cuanto al interés de China de lanzar un servicio especial de trenes para promover el turismo cultural, hace patente el interés de una vinculación desde distintos ámbitos para facilitar una integración acelerada de esta prometedora región.

La región cuenta con un potencial estratégico para fortalecer y ser ejemplo del mulitilateralismo. A ojos del presidente Xi Jinping, China y la región de Asia Central conforman un fortín que lucha por el multilateralismo y que ha demostrado ser una región unificada al momento de extenderse respaldo en situaciones críticas. La Cumbre de China-Asia Central, en consecuencia, se constituye como un baluarte desde el cual se defenderán los derechos legítimos y los intereses estratégicos, y desde el cual se promoverá la democracia de las relaciones internacionales y se construirá un orden mundial más justo, equitativo y humano para todos.

El mundo observa cómo los cinco líderes de Asia Central y Xi Jinping definen la construcción de una región autónoma que busca orientar al mundo por un camino en donde el bien común sea la marca de todos. Y para ello, como bien dijo el presidente chino, es necesario llevar adelante la amistad, promover los intercambios, intercambiar experiencias, fomentar el aprendizaje e impulsar el entendimiento mutuo entre los pueblos. La Cumbre de China-Asia Central incorpora esas y otras aspiraciones más.