2023, un año clave para las relaciones económicas y comerciales entre China y España

Alfonso Noriega Gómez, consejero jefe de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en China, recibe la entrevista exclusiva de China.org

Por Álvaro Paños Cubillo

El pasado 9 de mayo, China.org entrevistó a don Alfonso Noriega Gómez, consejero jefe de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en China. Con una amplia y rica experiencia en el país asiático, el consejero ofreció un análisis exhaustivo acerca de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países, contemplando la trayectoria histórica, las oportunidades sectoriales y desafíos que se presentan para las empresas de ambos países en este año de reapertura, y las iniciativas que ya están en marcha para estimular la cooperación bilateral. 

Echar la vista a atrás para comprender el presente

Este año se celebra el 50.º aniversario de las relaciones diplomáticas entre China y España pero, obviamente, las relaciones entre España y China van más allá. Los últimos 50 años han sido muy importantes para los dos países, que han experimentado cambios muy profundos en su actividad económica, un proceso muy importante de apertura hacia el exterior, una transformación de la estructura económica y un progreso que se está viendo en el bienestar actual de los ciudadanos.

A nivel económico, un hito importante se produjo en 1984 con la firma del Acuerdo de Cooperación Económica e Industrial entre España y China, donde se sentaron las bases para el establecimiento de la Comisión Mixta para temas económicos, industriales y comerciales entre ambos Gobiernos, y que año tras año ha venido analizando las mejoras producidas en las relaciones entre ambos países y solucionando algunos de los problemas existentes.

Desde la entrada de China en la OMC en 2001 hasta la actualidad, los intercambios comerciales entre España y China se han multiplicado por más de siete, dando lugar a muchas oportunidades de progreso y desarrollo para las empresas y los ciudadanos de ambos países.

España cuenta una comunidad vibrante, dinámica y emprendedora de origen chino, ya con segundas y hasta terceras generaciones: más de 200.000 chinos. Junto a las personas están las empresas, que tanto en el caso de empresas chinas en España como de españolas en China han encontrado oportunidades -no sin dificultades- de desarrollar su actividad a lo largo de los últimos años.

Toda esta evolución a lo largo de las últimas décadas nos llevó a alcanzar el máximo nivel de relaciones comerciales y de inversión entre ambos países en 2022. A nivel comercial estamos hablando de 57.000 millones de euros si sumamos exportaciones e importaciones. El problema que ha surgido es que esta relación es muy desequilibrada: de esos 57.000 millones de euros, 8.000 millones son de exportaciones de España a China y 49.000 millones son importaciones procedentes de China. Ante esta realidad, hay voluntad por parte de ambos países para intentar mitigar esta situación de desequilibrio mediante la cooperación y la apertura, y no mediante la competencia hacia un entorno de mayor proteccionismo.

2023: año clave para las relaciones económicas y comerciales entre China y España

2023 está siendo un año clave para las relaciones bilaterales entre China en España. En primer lugar, porque este año se celebra el 50.º aniversario de las relaciones diplomáticas entre los dos países.

En segundo lugar, la reapertura internacional y la reactivación de las visitas de empresas españolas a China y viceversa, está siendo un factor clave para la recuperación de una confianza que se había visto mermada por la pandemia de COVID-19. Pensemos en los socios, clientes y proveedores que no han podido reunirse en persona durante estos tres años.

A este respecto, resulta fundamental la labor que desempeña como plataforma de contacto que la Oficina Económica y Comercial de España en Beijing y su trabajo de comunicación con el Gobierno chino para facilitar los intercambios entre las partes española y china. Desde la Oficina ya están siendo testigos de las visitas de muchas delegaciones de empresas españolas para asistir a ferias o eventos, y de empresas chinas que están viajando a España para recuperar el contacto directo.

En tercer lugar, otro indicador de la importancia que está teniendo este año para el estímulo de las relaciones entre ambos países ha sido la reciente visita oficial a China del presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez. La visita se ha producido en un momento muy oportuno y ha servido para reconstruir es confianza mermada que mencionábamos. El presidente Sánchez expresó un mensaje acerca de la importancia de evitar que haya tensiones proteccionistas o de que el resto del mundo se cierre a China.

Sánchez tuvo la oportunidad de conocer la actividad que están desarrollando en China empresas españolas muy diversas en el sector financiero, de automoción, de máquina herramienta y el sector médico, entre otros, adquiriendo una visión panorámica de las dificultades y de las oportunidades que están teniendo estas empresas en China. Tras la visita del presidente ha quedado clara la voluntad de ambos países de intentar lograr ese mayor equilibrio en las relaciones comerciales.

A nivel comercial lo más relevante de este viaje fue la firma de dos protocolos fitosanitarios que van a habilitar la exportación de caqui y de almendra de España a China. Cuando hablamos del sector de la almendra, nos estamos refiriendo a unas exportaciones que van a oscilar entre las 50.000 y las 90.000 toneladas el año que viene y probablemente en los años restantes hasta finales de esta década. En el sector del caqui se espera que también surjan oportunidades interesantes en el futuro.

En cuarto lugar, la presidencia española del Consejo de la Unión Europea en el segundo semestre de este año se presenta como una oportunidad para continuar impulsando y profundizando las relaciones económicas y comerciales España-China, para que verdaderamente podamos transitar hacia un entorno de cooperación y competencia, y no de confrontación.

En quinto lugar, este año se va a celebrar además la Comisión Mixta Bilateral en materia industrial y comercial, que servirá para hacer un balance sobre las relaciones económicas entre los dos países, y para intentar profundizar en el desarrollo de una cooperación que permita un acceso equilibrado al mercado chino y con unas mismas reglas de juego.

Oportunidades comerciales y de inversiones para ambos países

El consejero destacó que los sectores relacionados con la transición ecológica son claves en la actualidad, y resaltó los ejemplos de los sectores del vehículo eléctrico y de las energías renovables.

España es hoy en día el segundo mayor fabricante de vehículos a nivel europeo, de modo que el sector de automoción es muy importante para economía española, ya que representa algo más del 10% del PIB y casi un 20% de las exportaciones. España cuenta con 17 plantas productivas y con 38 modelos producidos. Actualmente el vehículo eléctrico es un sector estratégico para la economía española.

Por otro lado, China es líder a nivel global en producción, comercialización y exportación de vehículos eléctricos. El año pasado se registraron cifras récord y en este contexto las empresas españolas están desarrollando su actividad en China y cada vez en mayor medida las empresas chinas están desarrollando proyectos de inversión en España. Por ejemplo, el proyecto del grupo BYD junto a Castrosua para el ensamblaje de autobuses, o de Envision, que anunció un proyecto de construcción de una planta de fabricación de baterías para vehículo eléctrico en España con un compromiso de inversión de en torno a 2.500 millones de euros. O el caso de la empresa Sentury Tyre, de Qingdao, que anunció una inversión de cerca de 500 millones de euros en Galicia.

Hay otros sectores, como el de las energías renovables, donde igualmente hay una presencia mutua y creciente de empresas españolas en China, que están ayudando a desarrollar el sector de energía eólica y de energía eólica marina. Tenemos los casos de empresas que tienen desde sistemas para identificar las mejores ubicaciones para los parques eólicos, hasta empresas que desarrollan estructuras innovadoras de para las turbinas eólicas, y empresas que incluso desarrollan cadenas altamente sofisticadas para el anclaje de las turbinas de eólica marina a los fondos marinos y que además tienen presencia productiva en China.

El consejero comercial también destacó una importante actividad que se llevó a cabo hace un mes: un foro de cooperación entre España y China en materia de tecnología industrial avanzada. Se organizó junto con la feria de máquina herramienta internacional que tuvo lugar en Beijing, después de tres más de 3 años sin poder celebrarse, y fue un punto de encuentro en donde se promovió la cooperación, y se vio mucho interés por parte de empresas españolas de tecnología avanzada y de máquina herramienta, y de empresas chinas de distintos sectores como el aeronáutico, el eólico o el de automoción.

Finalmente, el consejero expresó su deseo de que podamos trabajar en un entorno equilibrado de reglas comunes a nivel multilateral, para que verdaderamente las empresas de los dos países compitan bajo unas mismas reglas y se puedan desarrollar de forma conjunta sectores muy relevantes para nuestro futuro, como es el de la automoción, las energías renovables, el aeronáutico, y la tecnología industrial entre otros muchos.