ENTREVISTA: A EE. UU. solo le importa mantener su hegemonía, no los residentes de Taiwan

BUENOS AIRES, 30 mar (Xinhua) -- La estrategia de Estados Unidos con la "carta de Taiwan" está condenada al fracaso, porque contraviene la tendencia histórica y sólo busca mantener la hegemonía global, que ya está en retroceso, de Washington, a quien no le preocupa realmente la situación de los residentes en la isla, afirmó hoy el académico argentino Sebastián Schulz.

El investigador e integrante del Centro de Estudios Chinos (Cechino) de la Universidad Nacional de La Plata dialogó con Xinhua sobre el llamado "tránsito" de la líder de Taiwan, Tsai Ing-wen, en Estados Unidos y el reciente quiebre de las relaciones de Honduras con Taiwan.

"La decisión del Gobierno de Honduras está en sintonía con los tiempos que corren. Vemos una incapacidad de Estados Unidos de disciplinar a lo que considera su 'patio trasero'", dijo el experto.

Schulz sostuvo que "Estados Unidos ha definido a Taiwan como uno de los focos estratégicos desde donde generar inestabilidad en esa región, pero como contrapartida, Washington tiene cada vez menor capacidad de forzar alineamientos de los países de nuestra región con Taiwan".

"Las relaciones de países como Honduras con Taiwan se sostenían por las presiones de Estados Unidos, y esa presión viene mermando, producto de la propia crisis de hegemonía de Washington, pero también por el aumento de las cuotas relativas de poder de los países emergentes y en desarrollo", enfatizó el experto.

El investigador en el Centro de Investigaciones en Política y Economía (CIEPE) de la Red Clacso subrayó que "la región de América Latina y el Caribe tiene cada vez mayor autonomía y soberanía sobre sus políticas en materia internacional. Por eso la decisión de Honduras está en clara sintonía con estos tiempos".

"Es una expresión también de la voluntad de un Estado y de un pueblo, el hondureño, de ser parte de estas transformaciones, de reconocer una reivindicación histórica de la República Popular China, como lo es la política de una sola China", señaló.

Schulz explicó que, además de la pérdida de hegemonía de Estados Unidos en la región, se observa una presencia cada vez mayor de China en el escenario internacional.

"El Gobierno de Beijing es el legítimo portador de la soberanía de China, Taiwan es parte inalienable de China, y los países del sur global ven en China a una potencia responsable, portavoz de una arquitectura económica, política, social a nivel global beneficiosa para los pueblos", afirmó.

En ese marco es que ocurre la decisión de Honduras de reconocer el principio de una sola China y de acercar posiciones, fomentando acuerdos de cooperación entre Beijing y Tegucigalpa en distintos planos, añadió.

El entrevistado recordó que Estados Unidos tiene un doble rasero en reconocer el principio de una sola China, alentando constantemente las posiciones separatistas en la isla, proveyendo de armas a Taiwan y realizando visitas intempestivas, como la del año pasado por parte de Nancy Pelosi, sin ningún tipo de coordinación con la parte continental de China.

"Claramente, a Estados Unidos lo que menos interesa es la población residente en Taiwan. Lo que busca Washington con sus maniobras es mantener su primacía en el orden internacional, sostener su hegemonía a través de situaciones de tensión y de desestabilización", consideró el analista.

En visión del experto, Estados Unidos ya ha utilizado esta estrategia "en otros lados, hemos visto su actuación en Siria, en Ucrania, en Afganistán, o en Hong Kong de China".

"Estados Unidos pone toda su capacidad para impedir la reunificación de China, ya que ello implicaría la posibilidad de la existencia de un orden internacional mucho más multilateral y mucho más multipolar", consideró.

En ese marco, Schulz dijo que "la decisión de Honduras de adoptar el principio de una sola China sin dudas es una decisión trascendental en lo que va de 2023 y está en sintonía con una política regional de acercamiento cada vez mayor a China, en particular, y a los países emergentes y en desarrollo, en general".

"Expresa además una tendencia histórica. Es la continuidad de la decisión de otros países vecinos de la región" que también han tomado la misma determinación, repasó, citando como ejemplos a Panamá, Nicaragua y Costa Rica, entre otros.

Schulz estimó que la decisión de Tegucigalpa seguramente traerá beneficios, no sólo para el Honduras, sino también para el sistema internacional, ya que así gran parte del sur global generará cada vez mayor estabilidad a nivel mundial.

"Hay un proceso que busca un orden internacional más multilateral, más multipolar, donde se respeten principios como la no injerencia en los asuntos internos de los Estados, la soberanía y la integridad territorial. Eso seguramente va a ser mucho mejor para el sistema internacional, es un mensaje contra las injerencias de potencias extranjeras en los países emergentes y en desarrollo", concluyó. Fin