Crece popularidad de las artes marciales entre la juventud china

Li Jinqi (delante) practica Daoshu, espadas, con miembros del club de artes marciales de la Universidad de Beihang en Beijing, capital de China, 11 de marzo de 2023.

Levantando una lanza, Li Jinqi tiró de ella sobre sus hombros y la hizo girar rápidamente. Con ella, 10 compañeros en dos filas con el mismo traje estilo Kungfu copiaban los movimientos.

Li es una estudiante de doctorado de 24 años de la Universidad de Beihang en Beijing, pero es famosa en el campus como maestra de artes marciales.

Aunque está muy ocupada con la investigación y los cursos, la joven asegura que practicarlas se ha convertido en una rutina diaria para ella en los últimos cinco años.

Estudió varios estilos, tales como boxeo, esgrima y garrote, y ha ganado varias competiciones universitarias en la capital.

Además, dirige el club de artes marciales de la escuela que pasó de 2 a más de 30 miembros activos.

Tras haber actuado en la ceremonia de graduación durante 3 años consecutivos, Li afirma que el club es ahora uno de los más solicitados del campus en términos de nuevos participantes.

"Las artes marciales han experimentado un aumento significativo en la universidad y he oído que tanto mi escuela intermedia como la secundaria han abierto cursos de ellas", dijo.

Gao Xiaoya, estudiante de tercer año de ingeniería electrónica de la información en Beihang, otra activa integrante del grupo, indicó que la disciplina brinda paz interior y fuerza.

Gao es solo una de la multitud de jóvenes que se sienten atraídos por las artes marciales para mantenerse en forma, pero que descubrieron que su entusiasmo crecía a medida que avanzaban en su práctica, porque se daban cuenta de los beneficios de los valores tradicionales y la cultura que transmite.

"Empiezas a apreciarlo más y caes en cuenta que la filosofía es parte de ellas, como la forma de enfrentar los retos y tener confianza en uno mismo sin dejar de ser humilde”, apuntó la joven de 21 años.

En la plataforma china de intercambio de vídeos Bilibili, los temas sobre cultura tradicional china como las artes marciales, el Hanfu, la Ópera de Beijing y la caligrafía, suelen recibir un cúmulo de “me gusta” y comentarios.

"El rápido desarrollo de Internet y las redes sociales también facilita la difusión de la cultura tradicional china y permite a la juventud acceder a formas de arte que antes eran nicho", sostuvo Song Yu, investigador adjunto del Instituto de Sociología de la Academia China de Ciencias Sociales.

La cultura tradicional no tiene fronteras nacionales o étnicas. En la provincia central de Henan, cuna de las artes marciales kung fu Shaolin, se celebran desde hace años actividades de intercambio con sus seguidores a nivel mundial.

Unos 2000 extranjeros visitan cada año este templo de 1500 años de antigüedad para aprender kung fu y disfrutar de la vida shaolin. Marta Neskovic, serbia de unos 30 años, dijo: "Me quedé dos años y medio, me gusta mucho el kung fu. Practicarlo es bueno para la salud mental y física".

Wang Hechen, diseñadora de Beijing, toma cursos de pintura tradicional china todos los fines de semana. "Es como una zona de confort para dejar de lado el ritmo acelerado de mi trabajo, además me ayuda a mejorar mi resistencia y capacidad de concentración", dijo.

Para Li, las artes marciales son más que un entrenamiento físico. "No creo que consistan en luchar", resaltó. "Las artes marciales tratan de encontrar la mejor versión de uno mismo".

A medida que las generaciones más jóvenes revisten de mayor importancia a la cultura tradicional, se espera que los sectores y servicios afines prosperen a la par, acotó Song.