Las restricciones de chips en EE.UU. estimularán avances tecnológicos en China: expertos

Compañías hacen un llamamiento a la estabilidad y la confianza para evitar irrupciones en la industria mundial

Al parecer, Estados Unidos (EE. UU. ) ha llegado a un acuerdo con los Países Bajos y Japón sobre el control de las exportaciones de chips a China, y esto le permite ejercer una mayor presión sobre sus aliados. No obstante, expertos afirman que la última medida de EE.UU. y otras posibles medidas de contención no doblegarán a China, porque las empresas chinas de semiconductores están haciendo todo lo posible para lograr avances en tecnologías básicas con las que puedan ser autosuficientes.

EE.UU. ha llegado a un acuerdo con los Países Bajos y Japón con el cual se restringen las exportaciones a China de maquinaria avanzada para la fabricación de chips, incluidas herramientas avanzadas de litografía, según informó Bloomberg el sábado, quien citó a su vez a otras fuentes.

El acuerdo ampliaría algunos controles de exportación que EE. UU. adoptó en octubre de 2022 a empresas de los dos países, incluidas ASML Holding NV, Nikon Corp y Tokyo Electron Ltd, según el informe. La aplicación real de esas restricciones podría llevar meses, ya que los dos países están ultimando los acuerdos legales, según el informe.

A pesar de la creciente presión de EE.UU. sobre las restricciones a la exportación, ASML, la principal empresa de litografía de los Países Bajos, afirmó que esas medidas no tendrían un efecto material en las expectativas anunciadas por la compañía para 2023.

"Nuestros negocios en China se dirigen predominantemente a nodos maduros", declaró ASML en un comunicado enviado el sábado al rotativo Global Times. "Mientras tanto, las actividades comerciales de ASML a nivel mundial continuarán. Lo que necesitamos ahora es estabilidad y fiabilidad en nuestro sector para evitar nuevas trastornos en la industria mundial de semiconductores", añadió.

ASML seguirá colaborando con las autoridades para informarles sobre las posibles repercusiones de cualquier norma propuesta, con el fin de evaluar el impacto en la cadena mundial de suministro de semiconductores, señaló la empresa.

Nikon y Tokyo Electron no respondieron el sábado a preguntas de la prensa.

La administración Biden repitió el año pasado en varias ocasiones que se tomaran medidas para fortalecer su denominada alianza de chips, aunque el llamamiento apenas sí tuvo avances. En cuanto al acuerdo con los Países Bajos y Japón, aún no se ha informado a la prensa los detalles.

Es improbable que las últimas medidas de EE.UU. tengan un impacto adicional significativo a largo plazo en la industria china de semiconductores, la cual ya ha resistido las medidas unilaterales de EE.UU. durante varios años, aseguró el sábado Ma Jihua, un veterano analista de telecomunicaciones, al Global Times.

Dados los onerosos ingresos procedentes del mercado chino, es improbable que los Países Bajos y Japón, así como sus empresas como ASML, acaten la orden de EE.UU. orientada a frenar las ventas de maquinaria de chips a China, afirmó Ma.

La cadena industrial mundial de semiconductores se caracteriza por una amplia colaboración y una división global del trabajo, y China es ya el mayor mercado de consumo de semiconductores del mundo. Según datos del organismo industrial SEMI, las ventas de equipos semiconductores en la parte continental de China alcanzaron los 29. 620 millones de dólares en 2021, lo que representa casi el 29% del mercado mundial. En el segundo trimestre de 2022, las ventas en China continental registraron 6.560 millones de dólares y las del mercado mundial sumaron 26.430 millones de dólares, según datos de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China (CNDR).

Sin embargo, Estados Unidos está impulsando el "desacoplamiento tecnológico" con China a una velocidad más rápida de lo que muchos proyectaban, y su objetivo es atraer a todos los aliados para que se unan a su guerra tecnológica contra China. En este sentido, los expertos afirman que China debería seguir mejorando sus propias capacidades tecnológicas para hacer frente al posible deterioro derivado de la contención estadounidense.

"Los continuos movimientos de EE.UU. envían una sobria advertencia a los fabricantes chinos de semiconductores de que EE.UU. no detendrá su guerra de chips contra China. Es hora de que las empresas nacionales concentren sus recursos y esfuerzos en la búsqueda de avances tecnológicos", declaró el sábado al Global Times Xiang Ligang, director general de la Alianza para el Consumo de Información, con sede en Beijing.

"Las herramientas litográficas no tienen ningún misterio. Shanghai Micro Electronics Equipment (Group) Co ha desarrollado una máquina con una inversión de capital limitada y ya tiene demanda en el mercado. Creo que sin duda lograremos avances tecnológicos con los recursos de todo el país", afirmó Xiang.

"China no tardará años en desarrollar herramientas litográficas de forma independiente", añadió. El impulso estadounidense a la desvinculación tecnológica ha estimulado enormemente a fabricantes chinos de dispositivos inteligentes a usar chips de fabricación nacional, y ello, en consecuencia, ha incentivado a empresas locales de chips a realizar mejoras tecnológicas. Mientras tanto, China ha redoblado sus esfuerzos para fomentar el talento en el sector de los chips.

El sector chino de los semiconductores se ha desarrollado rápidamente a pesar de la presión estadounidense, especialmente en lo que respecta a la producción en masa de chips de 28 nanómetros. Ma afirmó que las empresas nacionales de semiconductores han sido capaces de producir de forma independiente los chips de 28 nanómetros, de uso generalizado, y están intensificando sus esfuerzos para lograr avances en los chips avanzados de 14 nanómetros.

Los gigantes tecnológicos chinos no dejan de hacer avances en la tecnología de chips. 

Tomemos el ejemplo de Huawei. Su objetivo es muy claro: resolver los problemas de suministro de chips aumentando la inversión en investigación y desarrollo en función de las condiciones reales del sector nacional de chips.