Arte de magia entre pinceladas

El muralista Liu Zhicheng (derecha) trabaja en un mural de dos grullas cogiendo un pez en el distrito de Yongsheng, Lijiang, provincia de Yunnan.

Sentado en andamios, Liu Zhicheng da el último toque a un mural de lotos y grullas. Entre pinceles y pinturas, ha creado un par de ellas de brillantes colores, agitando sus alas y dispuestas a coger un pez en  el muro de un edificio en el distrito de Yongsheng en Lijiang, provincia de Yunnan, en el suroeste de China.

Además de lotos, grullas y pinos, elementos visuales comunes entre los locales, Liu, muralista de 27 años, también se inspira en el guochao, un estilo chino caracterizado por diseños de moda con elementos de la cultura tradicional. Así, recrea a Ne Zha a partir del dibujo animado homónimo, pandas gigantes y hadas en vestimenta de época.

“Siento un gran interés por la China rural y espero poner de mi parte para reflejar más decoraciones modernas en las aldeas”, apuntó Liu.

El año pasado, empezó un proyecto de dos años que consiste en pintar 100 paredes en Yongsheng, su pueblo natal. Hasta el momento, ha completado más de 30 de ellas.

Sus creaciones también han atraído a curiosos niños que alargan el cuello para verlo de cerca realizar su magia con el pincel.

“A la gente le gustan colores vibrantes y caricaturas divertidas,” afirmó Liu, y añadió que algunos niños incluso pintan por su cuenta para mostrarlos.

“Sería genial si nuestra labor pudiera sembrar semillas de profundo interés en los pequeños y así abrir nuevos horizontes para sus carreras en el futuro”, acotó.

Liu ha grabado su proceso creativo y ha subido videos cortos en la plataforma de Douyin. Con el apodo Liu Xiaobei, su cuenta congrega a más de 560.000 seguidores y cosecha más de 5 millones de me gusta.

Sus obras han impregnado de color el campo y han captado la atención de muchos turistas gracias a sus populares videos.

En 2020, Liu y sus socios empezaron a decorar los muros de manera gratuita.

Su primera comisión fueron las paredes de un antiguo poblado en Chongqing. En unos tres meses, llenaron de color 7 de ellas. 

Liu toma normalmente dos o tres días para finalizar un mural simple y más de una semana para uno de diseño sofisticado.

“Me enfocaré más en elementos culturales chinos y pintaré los muros de más aldeas para llamar la atención del viajero y ayudar a la población local a aumentar sus ingresos”, precisó Liu, “Ha sido un honor y un placer tener la oportunidad de embellecer los alrededores con mi arte”.