90 de 122 zonas en Hunan son asoladas por una sequía extrema que continuará esta semana

Foto captada el 21 de agosto de 2022 que muestra el Embalse Daxin, en el poblado Shizishan, distrito Suxian, en la ciudad de Chenzhou, ubicada en la provincia de Hunan, en donde la sequía ha hecho visible el lecho lacustre.

La provincia central china de Hunan es una de las zonas más afectadas por la sequía que ha asolado continuamente a la cuenca del Río Yangtsé. Según estadísticas oficiales, hasta el domingo 25 de septiembre, 122 urbes y distritos en la provincia habían alcanzado un nivel medio o alto de sequía, y 90 distritos y zonas urbanas padecían los estragos de esta sequía extrema. 

Según el Centro Meteorológico de la Provincia de Hunan, el promedio de precipitaciones que Hunan registró desde el 8 de julio ha sido de 66,3 mililitros, el cual ha sido el más bajo para este periodo desde 1961. Además, la temperatura promedio ha sido de igual forma la más alta para esta misma estación. El promedio de temperatura en la provincia ha sido de 29,4 grados centígrados. Estas condiciones han elevado en consecuencia el mercurio de los termómetros 2,5 grados más con relación al mismo periodo del año anterior, y han batido también toda marca desde 1961. 

Según el informe meteorológico, las precipitaciones en Hunan permanecerán en un mínimo durante la próxima semana, y la sequía continuará desarrollándose hasta el 2 de octubre. 

Los meteorólogos afirman que la mayoría de las áreas provinciales carecerán de precipitaciones en el futuro, y que por ello, se deberá emprender un trabajo de mitigación para conservar el agua y para usarla en atención a criterios científicos. Además, algunas zonas del centro y sur de Hunan tienen un riesgo alto de sufrir incendios forestales, y debido a esto, fortalecer los sistemas de supervisión de fuego y control de incendios en exteriores es de gran importancia. 

Al otro lado de las demarcaciones de Hunan, la sequía en numerosas partes del curso medio y bajo del Río Yangtsé ha durado más de 70 días. Desde julio, las precipitaciones acumuladas en la cuenca de este río de China están 50 por ciento más abajo del promedio y cuentan ahora con una cifra récord para este periodo que no había sido superada desde 1961. En retrospectiva histórica, junio y agosto marcan en el calendario la temporada de inundaciones en China, y en estas fechas la cuenca del Río Yangtsé atestigua el inicio de la temporada de lluvias. 

Numerosos ríos y lagos alimentados adyacentes a la cuenca del Río Yangtsé, asolados por las altas temperaturas y por las escasas precipitaciones, atestiguan mínimos históricos. El 6 de septiembre, el nivel del agua del Lago Poyang cayó 8 milímetros y el nivel del agua del Lago Dongting, otro centro lacustre importante, está ahora en un mínimo histórico para este mismo periodo. 

La causa directa del bajo registro de precipitaciones en la cuenca del Río Yangtsé es la persistencia de una circulación atmosférica anómala en el Este de Asia, especialmente una significativa y firme extensión hacia el oeste de las altas presiones subtropicales en la parte occidental del Océano Pacífico. Además, la presión meridional sobre la Meseta Qinghai-Tíbet registra inusualmente una fortaleza y un avance hacia el este, lo que causa elevadas temperaturas a nivel de piso. La falta de nubes facilita que la radiación solar alcance el piso, y por ello, las elevadas temperaturas son frecuentes y poderosas, según afirmó Chen Lijuan, meteorólogo en jefe del Centro Nacional Atmosférico, en una entrevista reciente ofrecida al servicio de noticias China News. 

Según la proyección de la administración meteorológica, las precipitaciones en la cuenca del Río Yangtsé continuarán en niveles bajos en los meses de septiembre y octubre, y los ríos, en consecuencia, recibirán menos agua durante este periodo. También , los niveles de agua en ríos y lagos serán limitado y las sequías de verano y otoño se proyectarán en las provincias de Jiangxi, Hunan, Hubei y Anhui.

No obstante, Yan Wenguang, director del Departamento para la Gestión del Agua y la Prevención de Desastres por Sequías, adscrito al Ministerio de Recursos Hídricos, declaró el sábado que el suministro de agua actual está bajo control y que el Departamento continuará haciendo un uso óptimo de los embalses en la cuenca del Río Yangtsé para garantizar la seguridad del suministro hídrico tanto en zonas rurales como en urbanas.