Juicio por muerte de estudiante chino en Chicago no genera confianza

Intervención del presidente de la Universidad de Chicago Paul Alivisatos durante el funeral de Zheng Shaoxiong en Chicago, Estados Unidos, el 18 de noviembre, 2021.

El juicio de Alton Spann, acusado de asesinar a un estudiante de posgrado chino en la Universidad de Chicago junto con otros cargos, tendrá lugar el martes o el miércoles, hora de Beijing. Como el proceso podría alargarse, la comunidad china local pidió justicia para la víctima, medidas efectivas de protección para los residentes y lucha contra la prevalencia de delitos armados.

La vista del miércoles dará con la cronología del homicidio, según reportó Chinaqw.com, un portal de noticias dirigido a la comunidad china en el extranjero. Zheng Shaoxiong, acababa de concluir su maestría cuando Spann de 18 años supuestamente le robó y disparó a plena luz del día el 9 de noviembre.

Los chinos residentes en el lugar expresaron su no confianza en el proceso. Un ingeniero de software chino en Chicago, llamado Zhang, declaró que Spann no recibirá un castigo proporcional porque no hay pena de muerte en Illinois.

"No importa su condena en última instancia, será un juicio largo y devastador para la madre de Zheng. Y seguramente el resultado será frustrante”, acotó.

Su muerte es solo la punta del iceberg para Chicago, plagado por mucho tiempo por la violencia. Zheng es la tercera víctima de estos ataques mortales entre alumnos de la universidad en el último año, informaron los medios.

Previo a la audiencia del miércoles, hubo un tiroteo en un campus en Detroit, Michigan. Un adolescente de 15 años mató el martes a 3 de sus compañeros de escuela e hirió a otros 8.

El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, dijo el miércoles que varios connacionales han devenido víctimas de la violencia armada en Estados Unidos este año.

"La tasa de criminalidad es la más alta del mundo y sus afectados sigue en aumento, lo cual convierte el problema en uno de los más graves de derechos humanos. Instamos a Washington a enfrentar el problema, tomar medidas responsables para proteger la vida, incluida la de ciudadanos chinos en su territorio”, sostuvo.

Chicago es una de las ciudades estadounidenses más peligrosas y por mucho tiempo sumida en el caos. Pese a que la comunidad china local trata de mantenerse segura, la desgracia puede llegar en cualquier momento.

"Zheng estuvo en el lugar y momento correcto. Por eso, he intentado obtener una licencia para portar arma y tener una desde que llegué a Chicago para trabajar", dijo Zhang.

El ingeniero admitió que es un ciclo vicioso, ya que el contar con un arma no frena el peligro solo agrava el crimen, pero tuve que "elegir la forma más efectiva de protegerme", dijo.

La Asociación de Estudiantes y Académicos Chinos de la Universidad de Chicago ha formado un grupo de seguridad para negociar con el centro educativo a fin de mejorar la protección del alumnado. La escuela ha extendido las horas del Lyft ride, un servicio de viaje gratuito para estudiantes fuera del campus, a los siete días de la semana, excepto los festivos, hasta fin de año.

Shi Haotong, miembro de la referida organización, dijo que la escuela lo está considerando como un programa a largo plazo, pero él piensa que no es suficiente.

Los estudiantes protestaron contra la inactividad de la universidad, gritando: "Estamos aquí para aprender y no para morir".

Los crímenes en Chicago son el epítome de una serie de males crónicos en la sociedad estadounidense. La propiedad ilegal de armas nunca ha sido tratada como un problema serio. La mayor brecha de ingresos, la pobreza y la violencia de pandillas forman un ciclo de crimen estructural, dijeron los observadores.

Los gobiernos federales y estatales no son lo suficientemente fuertes como para resolver estos temas porque la seguridad y la vida de la población no son la prioridad del sistema político y la gobernanza de Estados Unidos, recalcaron.