Lituania juega con fuego al coludir con otros en contra de China

Ilustración del juego de Estados Unidos

Lituania y secesionistas en Hong Kong y Taiwan pertenecen al mismo saco roto. Al enfrentar a China con una mente estrecha, buscan pequeñas ganancias a corto plazo. Al servir a los principales poderes occidentales, Lituania no solo provoca a China en lo relativo a Taiwan violando sus intereses, sino que incluso ofrece buen trato a un separatista fugitivo hongkonés.

Nathan Law Kwun Chung indicó en Facebook el lunes que estaba de visita en el país europeo. Conoció al ministro de Relaciones Exteriores, Gabrielius Landsbergis, y conversó con Marius Matijošaitis, jefe del grupo parlamentario para las relaciones con Hong Kong, así como con Dovilė Šakalienė, congresista sancionado por China por su postura en el asunto de Xinjiang. Law señaló además que el viceministro del Exterior, Mantas Adominas, le ofreció un recorrido por la capital Vilnius.

Algunos cibernautas chinos dijeron que estos funcionarios lituanos y Law estaban en relación. "Estas fuerzas secesionistas en Hong Kong y Taiwan tratan de reunirse en el extranjero. En el contexto actual, muy pocos países los aceptarían. Lituania, contrario a China, es uno de ellos. Este es un acto político muy falto de ingenio”, opinó Li Xiaobing, experto en asuntos de Hong Kong, Macao y Taiwan de la Universidad de Nankai.

Lo que estas personas tienen en común es que son herramientas políticas para el "trabajo sucio" de algunas potencias. Coluden y encuentran el coraje entre sí.

Nathan Law y otros separatistas de Hong Kong han contravenido la Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong. Pese a escapar al extranjero, sus días están contados. En cuanto a Taiwan, nunca será un "país" reconocido por la comunidad internacional. Aunque algunas naciones occidentales desafían su estatus con trucos, no se atreven a ir públicamente en contra del principio de una sola China adoptada universalmente. Solo Lituania está en contacto con estos secesionistas, destinados al fracaso. Esto solo rebaja su calidad.

El país ha sobreestimado de manera flagrante y errónea sus habilidades. Algunos países occidentales trataron de aprovechar el caos en la región especial para arruinar a China, pero fallaron. ¿Es un pequeño Lituania ahora quien trata de encender el caldero con temas sensibles como Hong Kong y Taiwan, y meterse al juego político de los grandes? Es una ilusión, ya que este nunca podrá afectar la tendencia histórica de la reunificación nacional de China y sus acciones solo reducirán sus propias opciones estratégicas.

Lituania apenas tiene poder nacional. Sin embargo, en lugar de seguir la tendencia general de las relaciones internacionales, escoge unirse a las fuerzas separatistas en Hong Kong y Taiwan, alejándose del buen camino de la diplomacia. Lituania ha ofendido a China y a Rusia, a favor de Estados Unidos, y ha erosionado la base del principio de una China en las relaciones China-UE. Es sorprendente que un país soberano como él se comporte como Law y sus allegados, tratando de ganar intereses a corto plazo al encarar a China. No obstante a la larga, Lituania enfrentará grandes reveses geopolíticos.

"Perderá más oportunidades y perspectivas de cooperación futura [con China]. En la ONU, el G20 y otros mecanismos multilaterales de relevancia, será difícil para Lituania lograr el apoyo de China a sus intereses y demandas", sostuvo Cui Hongjian, director del departamento de Estudios Europeos del Instituto de Estudios Internacionales de China.

No pasará demasiado tiempo antes de que se dé cuenta que dicha colusión solo lo hace víctima de la competencia entre pesos pesados. Perjudica sus intereses y también afecta la paz regional a la larga. Si Lituania carece de autoconciencia y va demasiado lejos, ¿estará dispuesto a pagar el precio?