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spanish.china.org.cn | 17. 11. 2021 | Editor:Teresa Zheng Texto

Reunión virtual Xi-Biden envía señal positiva; la clave es implementar los compromisos

Palabras clave: Xi, Biden, reunión virtual

Aspectos destacados de la reunión virtual de Xi-Biden


La reunión virtual entre el presidente chino, Xi Jinping, y el presidente estadounidense, Joe Biden, se llevó a cabo el martes por la mañana, hora de Beijing. Las lecturas publicadas por ambas partes son relativamente positivas. El mundo ha visto cómo los líderes chino y estadounidense discuten con franqueza cuestiones estratégicas, generales y fundamentales entre China y Estados Unidos, así como cuestiones de interés mutuo. La redacción de sus lecturas se ha adaptado a los sentimientos de su contraparte. La lectura de la parte estadounidense no utilizó palabras duras como las que había utilizado antes de la reunión. Es de esperar que la reunión juegue un papel activo en inclinar la opinión internacional hacia expectativas positivas en las relaciones entre China y Estados Unidos.

Hablando objetivamente, las relaciones entre China y Estados Unidos han llegado a un punto en el que deben fortalecer y gestionar las divergencias y aliviar la tensa atmósfera. Desde la anterior administración estadounidense, la política de Washington hacia China se ha mantenido alejada de la vía racional, con una prevalente mentalidad de confrontación similar a la de la Guerra Fría. Estados Unidos intensificó las maniobras, incluida la defensa de la disociación de alta tecnología, las sanciones económicas y el fortalecimiento de los lazos con aliados para enfrentar a China. Estos movimientos pusieron en grave peligro la atmósfera anterior entre China y Estados Unidos. También reforzaron las preocupaciones de la gente sobre la confrontación estratégica y los conflictos entre China y Estados Unidos.

Se espera que la cumbre virtual entre los jefes de estado chino y estadounidense desempeñe un papel vital para guiar los lazos entre China y Estados Unidos hacia una corrección estratégica y llevar las relaciones a la senda de ajustarse a los intereses fundamentales de ambos países. Esto también beneficiará a la paz y la estabilidad a largo plazo del mundo.

La causa fundamental del deterioro de las relaciones entre China y Estados Unidos en los últimos años se encuentra en Washington. Esta proviene de cambios arrogantes y agresivos en la política estadounidense hacia China. Sin embargo, Estados Unidos no ha obtenido beneficios reales de sus medidas para poner en peligro las relaciones con China, especialmente en términos económicos. La contención contra China no ha cosechado ningún efecto; por el contrario, se enfrenta a riesgos cada vez mayores. Al menos, hasta cierto punto, ha surgido una demanda para estabilizar las relaciones entre China y EE.UU. en EE. UU. Entonces, este último ha enfatizado repetidamente recientemente la necesidad de evitar que la competencia entre China y Estados Unidos se convierta en un conflicto y afirma que Washington no busca cambiar el sistema chino.

Esta reunión confirmó el deseo común de China y Estados Unidos de aliviar sus diferencias y gestionar su relación. También mostró una actitud positiva hacia la cooperación de las dos partes.

Sobre la cuestión más delicada, el asunto de Taiwan, los dos países reiteraron sus respectivas posiciones. Estados Unidos declaró su "política de una sola China" estándaramericano, pero Biden expresó que Estados Unidos no apoya la "independencia de Taiwan". Se espera que esto desempeñe un papel positivo para reprimir la colusión entre los Estados Unidos y Taiwan para socavar continuamente la base política para la paz y la estabilidad a través del Estrecho y conducir a una escalada de tensiones militares.

Los jefes de estado chino y estadounidense sostuvieron una seria cumbre en video en medio de tensiones bilaterales, enfocándose en los temas más preocupantes para los dos países y el mundo. Fue una declaración estratégica de que China y Estados Unidos no escatimarán esfuerzos para coexistir pacíficamente y no volverán a la era de la guerra fría.

Es sumamente importante que ambos países implementen el espíritu de consenso de esta cumbre y respondan con movimientos constructivos en diversas esferas. Existe la preocupación de que, aunque los dos líderes tuvieron una buena charla, el impulso no se puede transmitir a áreas clave de las relaciones bilaterales. Después de un breve período, la atmósfera positiva se agotará por fricciones nuevas y existentes.

Hemos recibido algunas lecciones importantes y, en general, Estados Unidos tiene la culpa. Por ejemplo, Estados Unidos solía publicar mensajes de confrontación poco después de que se llevaran a cabo importantes llamadas telefónicas o reuniones entre jefes de estado chinos y estadounidenses. Además, en el sistema de poder fragmentado en los Estados Unidos, hay otras fuerzas compensatorias que rápidamente se intensifican para bloquear la implementación del consenso entre los líderes en áreas específicas. La administración estadounidense tuvo que equilibrar esas objeciones internas con algunas palabras duras que socavaron los resultados de la cumbre anterior.

La administración Biden debe recordar claramente su intención original de proponer esta cumbre virtual China-EE.UU. y adelantar movimientos consistentes para aliviar las tensiones bilaterales, y también evitar cálculos mezquinos. Con esta reunión virtual sirviendo como un momento decisivo, podemos plantear que: si la próxima etapa de las relaciones entre China y EE.UU. puede tener más estabilidad y previsibilidad, y menos turbulencias, y si pueden tener una cooperación más amplia, así como manejar las diferencias de manera más adecuada, la administración de Biden merecerá más confianza y respeto estratégicos.

Las relaciones entre China y Estados Unidos tienen enormes intercambios económicos y sociales. Esto es completamente diferente de las relaciones entre Estados Unidos y la URSS en el pasado. China y EE.UU. se encuentran ahora en una encrucijada crucial: ¿o se dirigen hacia una nueva guerra fría o comienzan una nueva era de una relación entre potencias? A través de esta video cumbre, los dos jefes de Estado declararon que rechazan una nueva guerra fría. Esperamos que esta sea una declaración estratégica, y que quien la viole sea hallado culpable.


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