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spanish.china.org.cn | 18. 06. 2021 | Editor:Teresa Zheng Texto

Experto: EE.UU. debe dejar a la ciencia investigar por sí sola los orígenes del virus

Palabras clave: EE.UU., origen, investigación

Instituto de Virología de Wuhan


Si la administración Biden quiere proyectarse como un Gobierno responsable que respeta la ciencia, debería enviar científicos y permitir que un equipo de la OMS investigue los orígenes del coronavirus en suelo estadounidense, en lugar de repetir la táctica de su predecesor de usar el tema para culpar a China o para sus otros fines políticos, opinaron epidemiólogos chinos.

Los comentarios llegaron luego de que Politico informara el miércoles que altos funcionarios de la administración Trump insinuaron en la primavera de 2020 que la COVID-19 provenía de un laboratorio chino, pese a que las agencias de inteligencia que investigaban sus orígenes no contaban con pruebas concluyentes para dicha hipótesis.

El medio estadounidense indicó que algunos funcionarios de la Casa Blanca, el Consejo de Seguridad Nacional y el departamento de Estado habían instado al país a culpar a China por encubrir la fuente de la pandemia, y alegar que provenía de un centro de investigación en Wuhan especializado en el estudio de peligrosos patógenos de murciélagos: un movimiento descrito como ofensiva diplomática.

El objetivo, dijeron las fuentes, era en parte presionar a China para que permitiera que Estados Unidos y la comunidad internacional accedan a Wuhan para investigar, según Politico.

Los analistas chinos no se mostraron sorprendidos. Este informe más las acciones de Biden indican que la administración trata de diferenciarse de la anterior en el tema.

"Pero al final, todos son iguales, 'solo utilizan el asunto para atacar a China'", dijo Zhang Tengjun, investigador asistente del Instituto de Estudios Internacionales de China.

La primicia se produce cuando el presidente, Joe Biden, no escatima esfuerzos para vender la teoría de la fuga de laboratorio y culpar a China durante su viaje a Europa. Antes de su partida, el gobernante dijo el miércoles en Ginebra, Suiza, que no estaba claro si Beijing realmente desea saber de dónde venía el nuevo coronavirus.

El mandatario ordenó a las agencias de inteligencia que indagaran si el virus se filtró de un laboratorio de Wuhan y pidió que le informaran en un plazo de 90 días.

"Si lo piensas bien, ¿quién pondría un límite de tiempo tan corto a algo tan complicado como rastrear el origen de un virus desconocido?

"¿No tienen miedo de que la misión fracase o acaben obteniendo un resultado que no quieren? O a menos que el hombre que dio la orden ya haya dado una respuesta preestablecida al llamado equipo de estudio”, dijo Zhang.

Los analistas predijeron que el "veredicto" final de la misión eventualmente será utilizado por Biden como un arma para unir a sus aliados y atacar a China, con una demanda u otros medios.

Sin embargo, más vale que tenga cuidado. Quizás antes de arrojar piedras a China, se vea obligado a verificar la historia del origen en su propio territorio, anotaron los observadores chinos.

Un estudio de más de 24 000 muestras tomadas para un programa de investigación de los Institutos Nacionales de Salud en Estados Unidos, entre el 2 de enero y el 18 de marzo de 2020, sugirió que 7 personas en 5 estados (Illinois, Massachusetts, Mississippi, Pensilvania y Wisconsin) podrían haberse infectado mucho antes de los primeros casos confirmados el 21 de enero.

Cuando se le preguntó si la OMS tomaría en consideración esta nueva evidencia para la próxima fase de su trabajo, una fuente cercana al equipo conjunto de la organización con China dijo que "las recomendaciones del informe [de la OMS] incluyen tales seguimientos".

Zeng Guang, epidemiólogo jefe del Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades, declaró el jueves que dicho estudio es clave para encontrar la fuente del virus.

"Quizás estaba circulando en Estados Unidos antes que en China. No estoy sugiriendo que el primero sea el país de donde provino el virus", dijo Zeng, aclarando que vale la pena investigar.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, instó el domingo a China a cooperar con Estados Unidos y la OMS en el tema, y el mundo ahora "insiste" en que Beijing lo haga.

En respuesta, Zhao Lijian, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, apuntó que el país colaboró en demasía con el equipo de la OMS durante su viaje a China, y que siempre ha sido Estados Unidos el que ignora el informe preliminar, difundiendo rumores y atacando a China.

Mucha gente también se pregunta si los brotes de una enfermedad respiratoria en el norte de Virginia en julio de 2019 y el de una lesión pulmonar asociada al cigarrillo electrónico (vapeo) en Wisconsin, tuvieron alguna conexión con la COVID-19.

¿Por qué Estados Unidos nunca respondió a las preguntas del mundo en torno a su laboratorio de Fort Detrick y otros de tipo biológico en el extranjero? y ¿por qué no invita a la OMS a investigar los orígenes del virus en su suelo?, inquirió Zhao.

"Si Estados Unidos realmente se preocupa por la ciencia y el tema del origen del virus, debería pedir a los científicos que busquen por sí mismos; de lo contrario, debe tener otra agenda", señaló Zeng.


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