Llueven críticas a Estados Unidos por "egoísta" e "indiferente" tras pedido de ayuda de India en medio de la devastadora crisis de COVID-19

"Egoísta e indiferente": la negativa de Estados Unidos a suministrar más vacunas a India o levantar el embargo a la exportación de materia prima necesaria para aumentar la producción de vacunas en India ha provocado un sentimiento antiestadounidense en India y provocado críticas mundiales en los últimos días en medio del aumento alarmante de casos y muertes por COVID-19 en India.

Imágenes de cremaciones masivas al aire libre de pacientes que perecieron por COVID-19 en India se han quedado grabadas en los corazones de personas de todo el mundo por la gravedad de la epidemia en el país. Muchos cibernautas chinos comentaron que las imágenes son "impactantes" y se preguntaron por qué la situación en India se ha tornado tan desesperada. Si bien la noticia más impactante para ellos es la indiferencia y el egoísmo de Estados Unidos cuando se le pide que ayude a los indios que están sufriendo.

Los analistas explicaron que después de hacer una contribución casi nula a la lucha mundial contra la pandemia, Estados Unidos ha expuesto completamente su egoísmo al negarse a ofrecer una ayuda sustancial a la India y está obstruyendo los esfuerzos globales en la distribución de vacunas a los países en desarrollo y necesitados.

El mundo está profundamente preocupado por la situación de la COVID-19 en la India en días recientes, ya que el número de casos aumentó en un aumento diario récord de 349.691 el domingo, con un total de 16,96 millones de casos. El número de muertos ha llegado a 192.311, reveló el Ministerio de Salud de la India.

Expertos internacionales han pedido ayuda a nivel mundial, ya que 1.300 millones de personas en India están al borde de una catástrofe humanitaria, y algunos instaron a Estados Unidos a levantar el embargo sobre la exportación de materias primas necesarias para aumentar la producción de vacunas en India.

Sin embargo, Estados Unidos se negó a levantar la prohibición de exportación e insistió en que la prioridad es garantizar la distribución de vacunas a millones de estadounidenses. La respuesta indiferente de Estados Unidos encendió una ola de sentimiento anti-estadounidense en las redes sociales dentro y fuera de India, y los internautas criticaron que al hacer una contribución cero e incluso obstruir la lucha global contra la pandemia, Estados Unidos no es un líder mundial como afirma, sino un país egoísta, irresponsable y poco confiable que juega a la geopolítica para servir sus propios intereses.

Situación severa

La situación de la COVID-19 en India se ha intensificado en los últimos días, donde las infecciones han seguido aumentando. Sin embargo, aquellos que están infectados y desarrollan síntomas graves encuentran extremadamente difícil conseguir una cama de hospital, agravado por la escasez de oxígeno, ventiladores y suministros de medicamentos que salvan vidas como Remdesivir, explicó Neil Shah, un residente local en Mumbai, la ciudad más afectada y la capital del estado más afectado, Maharashtra.

"Los hospitales están llenos de pacientes y toda la infraestructura se está desmoronando, ya que la gente común o rica se enfrenta a los mismos desafíos", argumentó Shah.

La situación real en el país puede empeorar, ya que muchos medios informaron que las estadísticas oficiales subestiman seriamente la magnitud de la tragedia y la epidemia actual no es solo una segunda ola, sino un "tsunami", ya que los hospitales se quedan sin camas y oxígeno.

Somil Nagpal, especialista senior en salud del Banco Mundial, comentó el domingo en un panel de salud pública realizado por la Universidad de Pekín, que a pesar de ser un importante fabricante, India aún no tiene vacunas adecuadas para sus necesidades domésticas y esto se ve agravado por la escasez de materias primas necesarias de proveedores extranjeros. Las limitaciones de India también están afectando la disponibilidad mundial de vacunas.

Muchos países, incluidos China y Pakistán, han ofrecido ayuda a India para combatir su aumento de infecciones por COVID-19. Sin embargo, Estados Unidos, que ha trabajado incansablemente para arrastrar a India a unirse a su pandilla para contener a China, no ayudó. El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, afirmó el martes que Estados Unidos se encontraba "ante todo" en el esfuerzo por "vacunar al pueblo estadounidense".

Frente a la creciente presión dentro y fuera de Estados Unidos, el secretario de Estado Antony Blinken escribió en un tuit el sábado por la noche que "nuestros corazones están con el pueblo indio en medio del horrible brote de COVID-19", y agregó que Estados Unidos rápidamente desplegará apoyo adicional a la India.

Blinken no ha revelado ningún detalle sobre cómo ayudar a India, ni sobre el levantamiento del embargo de exportación de materias primas para vacunas.

Sin embargo, muchos cibernautas indios no compraron las dulces palabras de Blinken y comentaron que sus comentarios eran "hipocresía". Un usuario indio de Twitter en un comentario bajo el tuit de Blinken decía: cuando el ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, solicitó hidroxicloroquina, India la proporcionó, aunque no es suficiente para su propia población y las palabras dulces no ayudarán a India. 1.300 millones de indios recordarán quiénes estuvieron a su lado cuando lo necesitaron.

Si bien China expresó su disposición a ayudar a India con oxígeno, mascarillas y otros suministros médicos, un alto funcionario de la máxima autoridad sanitaria de China que pidió permanecer en el anonimato reconoció la gravedad de la situación epidémica en India en este momento y comentó que "la situación es realmente mala".

Aunque China expresó su disposición a ofrecer ayuda a India, le corresponde a India tomar la iniciativa de aceptarla, pero hasta ahora no hay indicios de eso. Para India, es una cuestión de salvar la cara si se toma la iniciativa para mejorar la relación India-China, explicó Zheng Zhijie, profesor y presidente del departamento de salud global de la Universidad de Pekín.

La epidemia en India no ha registrado un punto de inflexión y, debido al aumento de casos y variantes de virus, las olas en curso serían catastróficas y asestarían un duro golpe a India, pronosticó Zheng.

Socio egoísta y poco confiable

Desde la administración Trump, "Estados Unidos primero" ha sido el centro de la política exterior de Estados Unidos, y aunque Biden nunca ha dicho abiertamente "Estados Unidos primero", sí lo está practicando. Este eslogan se ha convertido en una política bipartidista, especialmente en lo que respecta a las vacunas, explica Jin Canrong, decano asociado de la Escuela de Estudios Internacionales de la Universidad Renmin de China.

Lü Xiang, investigador de la Academia China de Ciencias Sociales en Beijing, anotó que "India se ha convertido en víctima de las promesas vacías de Estados Unidos".

El gobierno indio ha tenido grandes esperanzas de producir vacunas contra la COVID-19 desarrolladas en Estados Unidos, ya que el presidente de Estados Unidos, Biden, propuso el plan durante la primera cumbre de Quad en marzo. Quizás alentado por esta palabrería, el gobierno de Modi relajó los controles de la epidemia y con las lagunas del gobierno local, "la situación de la epidemia en la India se ha salido de control", explicó Lü.

Los analistas chinos advirtieron anteriormente que el plan de vacunas de Biden se parece más a una estrategia para contener a China y puede terminar con pocos avances.

Hasta ahora, muy pocas personas en los países en desarrollo tienen acceso a las vacunas desarrolladas en Estados Unidos. En lugar de prestar atención a la vida humana y hacer contribuciones a la lucha global contra la pandemia, Estados Unidos está jugando a la geopolítica para servir a sus intereses nacionales. Su egoísmo no solo decepciona a los indios sino también a la comunidad internacional, afirma Lü.

Según un informe de Forbes en abril, más del 40 por ciento de los adultos y el 75 por ciento de las personas mayores en los EE. UU. están al menos parcialmente vacunados. En comparación, más de 85 países pobres no tendrán un acceso generalizado a las vacunas antes de 2023, escribió The Economist.

India ha estado atrapada en un predicamento ya que Estados Unidos no la ayudaría a resolver el problema de las patentes de vacunas y, presionada por el nacionalismo, le da vergüenza recibir ayuda de China, argumenta Lü.

La situación actual a la que se enfrenta la India es otro recordatorio para la comunidad internacional de lo poco confiable y egoísta que es Estados Unidos. La nación norteamericana ha perdido la autoridad moral para interferir en otros países, expresa Lü.

En lugar de compartir vacunas con más países en desarrollo, EE. UU. no solo ha implementado la política de "Estados Unidos primero", sino que también ha difamado a China y Rusia por ayudar a más países a obtener acceso a las vacunas tildando su accionar de "diplomacia de las vacunas", lo que dificulta la lucha mundial contra la pandemia, concluyeron los analistas.