spanish.china.org.cn | 25. 03. 2021 | Editor:Elena Yang | Texto |
Por Jorge Fernández
Xi Jinping expone en su obra el enfoque y el pensamiento estratégico a seguir para gestionar los riesgos a la seguridad del Estado.
Más allá de los retos sanitarios, el mundo enfrenta los estragos económicos, políticos y sociales que la pandemia de COVID-19 trajo consigo. Nuevos elementos alterarán el torrente de variables que anteriormente definían los retos a la seguridad de los Estados. Por lo que respecta a China, el país cuenta con un protocolo oficial que lo prepara para contingencias inesperadas. El tercer volumen del libro Xi Jinping: La gobernación y administración de China explica de forma clara y sencilla la esencia del espíritu nacional para hacer frente a retos insospechados y, al mismo tiempo, arroja luz sobre la interpretación china del mundo y la estrategia que despliega para garantizar un entorno estable, pacífico, ordenado y seguro, interno y externo, para materializar sus metas.
El apartado Gestión de riesgos ofrece una serie de tres textos en los que están condensados los puntos principales de discursos pronunciados por Xi Jinping ante miembros del Partido y ante funcionarios a nivel provincial y ministerial. En el discurso, Asegurar el liderazgo absoluto del Partido sobre la seguridad nacional, el mandatario destaca la importancia que desempeña la Comisión de Seguridad Nacional como instrumento partidario para encarar riesgos mayores y asegurar condiciones óptimas que permitan la salvaguardia de la seguridad nacional. Asimismo, presenta una serie de observaciones que deberán tomarse en cuenta para reforzar y coordinar la seguridad del Estado, incluidos otros puntos más para actuar frente a situaciones imprevistas.
El tercer volumen de la serie Xi Jinping: La gobernación y administración de China reproduce los trabajos presentados por el mandatario chino frente a figuras de la vida nacional e internacional desde el 18 de octubre de 2017 hasta el 13 de enero de 2020. Es una compilación de discursos clasificados en 19 apartados que tocan temas tan diversos como el pensamiento del socialismo con peculiaridades chinas en la nueva era, la reducción de la pobreza, la profundización de la reforma, la cultura china o el ejército. El apartado sobre seguridad nacional cobra una relevancia especial puesto que, de cara a los retos traídos por la propagación del coronavirus, la dirigencia aplicó varios de esos conceptos protocolarios para garantizar un ambiente propicio para la seguridad del Estado.
China cuenta con planteamientos teóricos y prácticos orientados al trabajo individual y colectivo para luchar contra aquello que pone en peligro temas de relevancia crucial para el Estado, tales como retos que ponen en riesgo el liderazgo del Partido, el sistema socialista, la soberanía nacional, la materialización de las metas centenarias o el rejuvenecimiento de la nación china, solo por citar algunos casos. En el discurso, Enfrentar los retos que hay por delante, Xi Jinping reitera una serie de principios que deben albergarse para reforzar la realización de metas, concretamente, las cuatro conciencias (sobre la política, los intereses generales, el núcleo dirigente y el alineamiento), las cuatro convicciones (en el camino, la teoría, el sistema y la cultura) y las dos salvaguardias (la firme salvaguardia de la posición del secretario general Xi Jinping como núcleo tanto del Comité Central del Partido como de toda su militancia y la firme salvaguardia de la autoridad y la dirección centralizada y unificada de dicho comité).
En el discurso Mantenerse alerta de los riesgos, el mandatario toma nota de la efectividad de tener presente escenarios adversos extremos, como un ejercicio para el desarrollo de sistemas de prevención y gestión ante situaciones de crisis potenciales. “Debemos permanecer intensamente alertas de los “cisnes negros” y de los “rinocerontes grises”, y asir la iniciativa para prevenir el surgimiento de riesgos, al tiempo que se adoptan medidas efectivas para enfocar y solucionar aquellos que sí surgen”. A ojos del mandatario chino, un evento denominado “cisne negro” hace alusión a situaciones imprevistas e improbables que tienen por lo regular consecuencias devastadoras, mientras que un “rinoceronte gris” es una amenaza extremadamente peligrosa que paradójicamente es ignorada. De cara a las innumerables tareas que el pueblo chino debe materializar en aras de la construcción socialista, la nación en su conjunto debe estar preparada para todo tipo de contingencias a fin de no alterar los planes previamente establecidos.
El apartado sobre Gestión de riesgos del libro Xi Jinping: La gobernación y administración de Chinaofrece información valiosa para especialistas y para el público en general sobre cómo China protege sus planes a futuro y sobre la interpretación que la dirigencia nacional hace del entorno desde el cual se emprenden los trabajos nacionales. Queda claro que para el gigante asiático, los riesgos están presentes en el día a día, y por ello, es crucial desarrollar planeas que permitan enfrentar los retos y solucionarlos sin afectar los tareas que han sido trazadas para la edificación socialista. Los textos organizados en esta sección recuerdan que mientras más cerca se está de conseguirse una meta, más complejos y peligrosos pueden tornarse los retos. Y de cara a estas circunstancias, la nación en su conjunto debe estar preparada.