ANÁLISIS: Científico brasileño cree que la COVID-19 no respeta estaciones

Por Pau Ramírez

RÍO DE JANEIRO, 22 ene (Xinhua) -- A pesar de estar en verano, estación donde generalmente son menos frecuentes las infecciones respiratorias, Brasil está experimentando un gran aumento de casos de COVID-19 desde comienzos de este año y suma ya un total de 8,7 millones de contagios y más de 215.000 muertos.

Jones Albuquerque, científico brasileño del Laboratorio de Inmunopatología Keizo-Asami (LIKA) de Recife y del Instituto para la Reducción de Riesgos y Desastres de Pernambuco (IRRD), opina en una entrevista con Xinhua que la COVID-19 no respeta estaciones y que la situación se debe a la falta de respeto de las restricciones debidas para protegerse del virus.

RAZONES: FIESTAS Y MOVILIDAD INTENSA

En opinión de Albuquerque, "la nueva ola de COVID-19 en Brasil es resultado de varios factores, como las aglomeraciones acumuladas en el proceso de elecciones municipales en noviembre, las fiestas de fin de año o los varios festivos".

A su juicio, "todo indica que hay variantes de la COVID-19 ya en nuestro territorio. El propio Japón detectó cuatro ciudadanos que llegaron de Brasil con una nueva variante del virus".

"Esto nos deja bastante preocupados, porque el verano austral, como suponen algunos, no es factor de disminución de la gravedad y agresividad de la enfermedad aquí. La COVID-19 parece que no respeta verano ni invierno, y esto provoca que entremos ahora en un ciclo muy agresivo y sincrónicamente en todo el país, lo que exige en este momento medidas más serias de contención de la movilidad de las personas en todo el territorio", afirmó.

TENDENCIA: AUMENTO CONTINUO

Según el especialista brasileño, la tendencia de la pandemia en Brasil sigue la del escenario mundial, con contagios altos y un porcentaje todavía bajo de casos graves, aunque como la agresividad de la infección es muy alta, se eleva la demanda de camas hospitalarias y de respiradores y plazas en las unidades de tratamiento intensivos, y a partir de ahí la enfermedad se traduce en óbitos.

Para Albuquerque, "es la tendencia del mundo, muy lamentablemente estamos en sincronía con el mundo, y nuestra tendencia para los próximos meses, semanas, es seguir lo que Europa y Estados Unidos sufren desde entonces" y, continuó, a pesar del uso de vacunas, este escenario perdurará en Brasil debido al tamaño de su población, que es de 213 millones de habitantes.

RECOMENDACIÓN: DISMINUIR MOVILIDAD

El investigador del LIKA y del IRRD explicó que "las medidas que se deben adoptar ahora son básicamente disminuir de forma drástica la movilidad de las personas" y evitar que el virus, con una carga viral alta, siga circulando.

"Toda medida que contemple esto es bienvenida, como la disminución de los horarios de bares, restaurantes, centros comerciales, la circulación en las calles... cerrar todo lo que son servicios no esenciales antes de que perjudiquemos demasiado la economía de servicios, en la que se basa Brasil, y dejar solo servicios esenciales, como los de comida, farmacias, etc, que deben seguir funcionando". Fin