La doble moral estadounidense entre Trump y Hong Kong

Las redes sociales de EE. UU. tienen un largo camino por recorrer con respecto a la regulación de Internet: Expertos

Las reacciones marcadamente contrastantes de las plataformas de medios sociales estadounidenses a los mensajes de contenido violento del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, y los de los alborotadores de Hong Kong, han expuesto plenamente su doble moral mientras no escatiman esfuerzos para criticar las "violaciones de la libertad de expresión" de otras naciones mientras toman medidas drásticas para restringir la libertad de expresión de su propio presidente en ejercicio, comentaron los observadores chinos.

Con la excusa del riesgo potencial de una mayor incitación a la violencia, la plataforma de redes sociales Twitter anunció el viernes la suspensión permanente de la cuenta de Trump.

Google y Apple siguieron su ejemplo. Poco después de que Twitter anunciara que suspendería la cuenta de Trump, Google anunció que eliminaría Parler, una aplicación conservadora de redes sociales, de su Play Store. Google argumentó que la aplicación se suspendió hasta que los desarrolladores se comprometieran con una política de moderación y aplicación que pudiera manejar contenido objetable en la plataforma.

El sábado por la noche, Apple eliminó a Parler de la App Store.

"Siempre hemos apoyado la representación de diversos puntos de vista en la App Store, pero no hay lugar en nuestra plataforma para amenazas de violencia y actividad ilegal", señaló Apple en un comunicado enviado a la revista semanal Variety.

Twitter también eliminó las cuentas de Michael Flynn, el exasesor de seguridad nacional de Trump que recibió un indulto presidencial, y el abogado pro Trump Sidney Powell, por violar las políticas que prohíben a los usuarios participar en "actividades coordinadas" que resultan en detrimiento tanto en el mundo real como en línea.

Los movimientos contrastan totalmente con las reacciones de estas plataformas a los violentos disturbios en Hong Kong en 2019, que arrastraron a la ciudad al caos que duró aproximadamente un año e infligieron enormes pérdidas financieras.

Además de permitir discursos que propagan y agitan la violencia, las plataformas sociales extranjeras Facebook, Twitter y Telegram han sido herramientas populares para que los alborotadores de Hong Kong convoquen reuniones ilegales y embosquen a los oficiales de policía. Las publicaciones que promueven la secesión de Hong Kong abundan en estas plataformas, advirtió la policía de Hong Kong.

Plataformas como Telegram han caído en manos de los alborotadores. Estas empresas siempre se han negado a cooperar con la policía en cuestiones de aplicación de la ley, y debido a que no había términos legales, solo operaban bajo el estatus de corporación, explicó Ronny Chan, presidente de la Asociación de Superintendentes de la Policía de Hong Kong.

A principios de agosto de 2019, Facebook y Twitter comenzaron a eliminar cuentas de China en relación con las protestas en Hong Kong, enfrentando una fuerte reacción negativa, ya que muchos usuarios se quejaron de que sus cuentas de Facebook y Twitter fueron bloqueadas después de que expresaron su apoyo a la policía de Hong Kong y publicaron fotos con la bandera nacional china.

La cuenta de la usuaria de Twitter identificada como Sheryl fue bloqueada justo después de que le gustara la publicación de su ídolo: Lay Zhang Yixing apoyando a la policía de Hong Kong y algunos comentarios denunciando a los manifestantes violentos.

En EE. UU., las plataformas de redes sociales son en realidad plataformas privadas con atributos públicos, lo que significa que están controladas por el capital o inclinadas hacia un bando en particular. Si alguien viola los intereses del capital invertido en ellos, la persona es expulsada, explicó Shen Yi de la Escuela de Relaciones Internacionales y Asuntos Públicos de la Universidad de Fudan.

Shen aclaró que esas plataformas tienen un largo camino por recorrer con respecto a la regulación de Internet. "China ha regulado Internet para proporcionar un entorno en línea saludable para el público; pero las plataformas estadounidenses iniciaron una purga de Internet porque esas plataformas se inclinan hacia ciertos partidos políticos y algunos discursos no están en línea con los intereses políticos que defienden", señaló Shen. .

La suspensión de las cuentas de Trump y sus seguidores también provocó olas de burla en las redes chinas.

"Los alborotadores de Hong Kong que incitaban activamente a la violencia superaban en número a los manifestantes estadounidenses y duraron más tiempo, ¿por qué no los vetaron? Esas plataformas perderán para siempre su autoridad moral de libertad de expresión ", comentó un usuario de Sina Weibo, una de las mayores redes sociales de China.