La lucha de EE.UU. en el campo del internet es un arma de doble filo

Cuando Washington mostró su fuerza política en TikTok, muchos lo vieron como un caso aislado. Desafortunadamente, ha resultado que este es solo el comienzo de una purga de empresas chinas de internet en su mercado.

Donald Trump firmó una orden ejecutiva inesperada la semana pasada prohibiendo "todo tipo de transacción relacionada con WeChat por parte de cualquier persona o propiedad, sujeta a la jurisdicción de Estados Unidos, con Tencent".

Si bien no está claro en qué medida esta disposición afectaría a WeChat, el acto ha causado preocupación en el campo a nivel mundial, ya que la situación parece estar yendo por un camino peligroso, es decir, una separación entre Estados Unidos y China.

Es probable que la orden obligue a las tiendas de aplicaciones de Google y Apple en el mercado estadounidense a eliminar WeChat, según informes de medios locales. Sin embargo, han aparecido una variedad de guías técnicas que enseñan a los usuarios cómo eludir la restricción y a buscar otras formas efectivas de obtener la aplicación en los iPhones.

En tanto, las encuestas en línea chinas han revelado que si WeChat no estuviera disponible en Apple, un porcentaje abrumador de personas desecharía inmediatamente sus móviles y cambiarían a otras marcas como Huawei, Xiaomi y Samsung. Esto se debe a que WeChat cuenta con aproximadamente 1200 millones de usuarios y es muy popular en el mercado chino por su uso extendido en la vida y el trabajo cotidiano.

Sin embargo, visto desde otra perspectiva, los tutoriales en línea y las preguntas hipotéticas reflejan la creciente incertidumbre y ansiedad de los internautas y esto no debe subestimarse.

El inconveniente causado por la restricción de la Casa Blanca y su oferta de disociación en el campo del internet afectarán las decisiones de compra de muchas personas, lo que podría producir un impacto negativo de gran alcance en las ventas de iPhone en China y en otros lugares.

Dos sistemas de internet independientes, lo que desea el Gobierno estadounidense, no es lo que el sector busca.

China seguirá siendo su mercado más grande en los próximos años, ya que posee la mayor población conectada a internet y las redes móviles 4G y 5G más avanzadas del mundo.

Las innovaciones tecnológicas basadas en la red y los nuevos modelos comerciales crearán enormes nichos para hardware y software, incluidos microchips y aplicaciones. Si el gobierno prohíbe a las empresas estadounidenses vender a China, otras compañías tomarán su lugar.

Si Estados Unidos persiste en una mentalidad de Guerra Fría en este rubro, es concebible que el golpe sea devastador para muchas de sus firmas. La economía digital de China totalizó 31,3 billones de yuanes en 2019, esto es el 34,8 % de su PIB. El sector de internet representó 2,1 billones de dólares de la economía estadounidense en 2018, o alrededor del 10 % de su PIB, según informes periodísticos.

En los últimos años, los sectores de ambos países han cooperado en gran medida a nivel empresarial y en intercambios de patentes que han llevado a una explosión de compañías del rubro para las dos naciones.

Esperamos que Washington pueda pensar en las graves consecuencias de una separación en el campo de internet y tecnología, en esencia un arma de doble filo, y deja de hacer política por más tiempo.