Amplio apoyo ayuda a China a resistir los ataques de EE.UU.

Estados Unidos ha lanzado una represión general contra China y trata de acorralar a los países occidentales para formar una alianza contra ella. El mundo presagia lo peor para las relaciones bilaterales, pero la sociedad china ha resistido el nuevo golpe estadounidense de una manera relativamente estable. En comparación con la velocidad del ataque al estilo guerra fría, China es mucho más rápida en activar la confianza y la capacidad de encararlo.

Primero, Estados Unidos inició con premura una nueva guerra fría contra China, y su gente está lejos de llegar a un consenso al respecto. Parte de ella proviene de las élites estadounidenses, pero una gran porción yace en el intento de la Casa Blanca de desviar la atención interna para lograr la reelección. Esta nueva guerra fría no puede considerarse como la estrategia establecida contra China y el tiempo lo dirá.

El pueblo chino se ha unido para evitarla y romper con el freno estratégico de Washington al expandir su apertura y hacer bien las cosas. El plan de China es muy práctico, mientras que Estados Unidos debe hacer todo lo posible para lograr cambios, cada uno de sus pasos enfrentará una gran resistencia.

En segundo lugar, Washington encara un terrible contexto. Se vuelve contra Beijing, pero la epidemia de la COVID-19 le pisa los pies y los conflictos raciales se han intensificado. Estados Unidos se muestra desunido y débil. Por lo tanto, su ferocidad vocal ha sido mayor hacia Beijing en los últimos meses; no obstante, es cada vez más difícil para el país sacar buenas cartas.

Tercero, la guerra comercial prepara a la sociedad china para mayores desafíos. Le muestra que la fuerza estadounidense es limitada. La COVID-19 ha expuesto los defectos de su sistema. Todo esto, junto al espectáculo político anti-China ahondado por Washington, ha modificado el pensar del pueblo chino sobre la nación norteamericana. La impresión de que "sobresale en todos los aspectos" se ha derrumbado por completo y más personas ahora creen que China y Estados Unidos ostentan sus propias fortalezas. La sociedad china tiene confianza en la batalla.

Cuarto, China y Estados Unidos compiten por el apoyo de otros países occidentales y la mayoría de las naciones en el mundo. En general, se cree que este último tiene una gran ventaja de persuasión, pero no es el caso.

Los países occidentales tienen valores similares a los de Estados Unidos. Sin embargo, este les exige oposición hacia China en renuncia de sus propios intereses. China los alienta a ser relativamente neutrales, lo que está más en línea con ellos. Su sugerencia es normal, pero Washington los conmina a cambios radicales. ¿Qué país tiene más probabilidades de tener éxito?

Quinto, ante la frenética represión, China actúa con calma y solo ha llevado a cabo contramedidas. Estas son recíprocas y no se expanden a otras áreas. En la represión global de Estados Unidos, China es su rival más poderoso. Sus ataques son agotadores y los contraataques de China ordenados. La resistencia ha demostrado sus ventajas.

Sexto, Washington intenta destruir por completo las relaciones con Beijing, lo que ha planteado serios riesgos para sus intereses nacionales y también ha perjudicado la paz mundial. Washington ha perdido en términos de moralidad y justicia. Esto generalmente ayudará a China a acumular más recursos para resistir el embate.

Séptimo, todavía hay algunos chinos que se preocupan por los ataques estadounidenses. Simplemente tienen dificultades para adaptarse a los cambios repentinos y la mayoría de ellos temen que China quede atrapada en el autoaislamiento y el conservadurismo bajo la presión. Sin embargo, todo esto calza en la capacidad de ajuste del pueblo chino. Desde la guerra comercial, el país ha avanzado de manera constante. Existen muchas razones para creer que cuanto más se pelea, más se gana en sabiduría y madurez.