¿Por qué el Reino Unido sigue a ciegas la política estadounidense mientras la UE prefiere usar la cabeza?

¿Van Londres y Bruselas por caminos separados en sus políticas de China después del Brexit? Cada vez hay más indicios de que el Reino Unido comenzó a seguir de cerca los pasos de Estados Unidos. Por el contrario, ciertos miembros de la UE mantienen actitudes cooperativas hacia Huawei y hacia China.

El argumento de que la política sobre China posterior al Brexit del Reino Unido se desviará por completo de la de la UE es un poco exagerado. Sin embargo, seguramente habrá diferencias.

La política exterior del Reino Unido estuvo limitada por la UE, aunque Gran Bretaña también recibió el apoyo del bloque para poder mantener un grado de independencia estratégica de Estados Unidos.

Sin embargo, una vez que Londres se divorcie oficialmente de Bruselas, perderá la fuerza de dicho respaldo. En este contexto, especialmente cuando Estados Unidos está cambiando su estrategia sobre China mientras aumenta la presión sobre sus aliados sobre temas relacionados, el Reino Unido inevitablemente se acercará a los Estados Unidos.

Sin embargo, Bruselas no se unirá al bando de Washington de una manera clara. Al final, los miembros de la UE priorizarán sus propios intereses nacionales.

Con respecto al acuerdo nuclear iraní, el Acuerdo de París sobre el cambio climático, el proyecto de gasoducto ruso-alemán Nord Stream 2, la tecnología 5G de Huawei o la guerra comercial entre Estados Unidos y Europa, Washington rara vez ha tenido en cuenta los intereses de sus aliados.

La "alianza" es un concepto que se utiliza cuando se enfrentan conjuntamente al mundo exterior. Echando un vistazo al interior de la alianza, las disputas sobre diferentes intereses nacionales son fáciles de detectar.

En el caso del 5G de Huawei, Washington mostró poca tolerancia hacia sus aliados europeos por su colaboración con Huawei. Sin embargo, nunca ha proporcionado una alternativa.

¿Cuál es el plan del tío Sam? ¿Hacer que Europa sufra las pérdidas junto con los Estados Unidos? No hay forma de que la UE no se muestre preocupada por la situación actual, especialmente en una era de rápido desarrollo de tecnologías digitales. La presión de Estados Unidos está perjudicando los intereses de Europa.

Entonces, la táctica de Estados Unidos está tratando de dividir el continente y ganar más apoyo de Europa, un país a la vez. Durante el último viaje del Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, al Reino Unido, visitó el martes a legisladores anti-China y pro-estadounidenses del Partido Conservador antes de reunirse con el Primer Ministro Boris Johnson. Una maniobra demasiado obvia para ejercer presión sobre el gobierno del Reino Unido.

Sin embargo, mientras la mayoría de los principales medios de comunicación occidentales estaban ocupados cubriendo cómo Pompeo estaba forjando una coalición en Europa contra China, olvidaron intencionalmente o no el acuerdo alcanzado el lunes entre Bruselas y Beijing sobre indicaciones geográficas (IG), que es un acuerdo para proteger los derechos de propiedad intelectual de los productos de las dos partes.

Aunque rara vez se mencionó en la cobertura de los medios, el Consejo Europeo lo calificó como "el primer acuerdo comercial bilateral significativo firmado entre la UE y China".

Esto es solo una parte de las negociaciones sobre inversión y comercio entre las dos partes este año. Además, demuestra que la postura sobre China de la UE y la política de China son pragmáticas y que la gran tendencia de cooperación entre ellas no se verá influida.

La UE no busca la hegemonía al estilo estadounidense, sino que promueve su integración e independencia estratégica. Obviamente, Washington no está satisfecho con el objetivo ya que una Unión Europea más fuerte plantearía desafíos a los Estados Unidos. Esta es la razón por la cual, desde el estallido de la Guerra Irán-Iraq (1980-88), Estados Unidos ha estado intentando poner en peligro la integración europea. China, por el contrario, ha estado apoyando firmemente el proceso de integración de la UE.

Después de todo, la condición básica para la supervivencia y la prosperidad de los países de hoy es la economía. La industria manufacturera de los Estados Unidos está disminuyendo. Mientras tanto, China tiene el mercado de consumo y mercado laboral más grande del mundo, también tiene la variedad más madura e integral de sectores industriales.

La ventaja comparativa de la cooperación con China es simplemente demasiado obvia para Europa, que anhela revitalizar su economía en la era posterior a la pandemia. La imposibilidad de reemplazar el mercado chino no puede ser ignorada. ¿La UE podría ignorar este hecho?

Este es también el dilema para los políticos británicos. El Reino Unido ignoró últimamente el sacrificio en sus propios intereses nacionales al tratar temas relacionados con China. Esto es exactamente lo que sucedió durante las guerras en Afganistán e Irak, en las que el Reino Unido se mantuvo en línea con Estados Unidos, independientemente de si las Naciones Unidas aprobaban sus decisiones. Escuchar lo que dice el tío Sam se ha convertido en la corrección política del Reino Unido.

Sin embargo, se cree que el Reino Unido finalmente volverá al camino normal y racional de su política sobre China. Trayendo a Huawei nuevamente a la ecuación: el país realmente se está asegurando un último tanque de oxígeno. Londres anunció que eliminará a Huawei de las redes 5G del Reino Unido para 2027. Para ese entonces, el inquilino de la Casa Blanca hace rato que habrá cambiado.