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spanish.china.org.cn | 22. 07. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

Experto: El egoísmo de EE.UU. impedirá su propio club 5G

Palabras clave: EE.UU., 5G, Huawei

A medida que el gobierno de Trump busca llevar a China a una nueva Guerra Fría, está previsto que continúe intensificando su bloqueo tecnológico. Los sectores chinos de investigación científica y alta tecnología sentirán una mayor presión.

La represión contra el rubro tecnológico chino no comenzó con Trump. La firma de telecomunicaciones ZTE ha lidiado con estos desafíos desde el gobierno de Obama. Incluso una victoria de Joe Biden, candidato demócrata a la presidencia, no descartaría los ataques a este ramo en China.

Sin embargo, frente a un entorno externo en deterioro, China debe darse cuenta que es poco probable que ocurra un distanciamiento en este campo con Estados Unidos y, por ello, debe formular estrategias de respuesta basadas en tal juicio.

Para empezar, las tecnologías son demasiado complicadas para que un solo país las domine por completo. Existen al menos 7 u 8 de ellos en la cadena industrial de teléfonos móviles, por ejemplo el iPhone se produce en varias naciones.

En términos de la red 5G, es posible que Estados Unidos no pueda crear su propio club presionando a otros para que excluyan a Huawei, dueño de una gran cuota del mercado. Los estándares técnicos de la red dependen de grandes empresas en muchos países. Huawei ha alcanzado un nivel de líder en la arena internacional, y su rol en el tema no se puede descartar simplemente.

Por lo tanto, no es realista que Estados Unidos se separe completamente de China. Originalmente, este trató de evitar que sus compañías discutandichos estándares con Huawei, pero ahora ha tenido que dar marcha atrás porque no puede ignorar a la firma.

En segundo lugar, las empresas estadounidenses influirán en las decisiones de su gobierno. Y el enorme mercado de China naturalmente creará derechos de mercado. Más de la mitad de las ventas de chips de Qualcomm ocurren en China, por lo tanto, si no puede vender sus productos en el mercado chino, la compañía no podrá sobrevivir. Qualcomm sostuvo que su objetivo es ocupar el 90 % del mercado chino de chips 5G este año y no está dispuesto a perderlo. Como ella, otras compañías estadounidenses saben que China es un nicho importante y ejercerán presión en la Casa Blanca. Además deben considerarse en la ecuación las empresas de otros países o regiones. Muchos apuestan por ambas partes en simultáneo. La holandesa ASML, el fabricante de equipos de chips más avanzado del mundo, ha realizado inversiones en Suzhou, provincia de Jiangsu, en el este de China.

En resumen, esta "nueva Guerra Fría" no conducirá a la formación de dos sistemas tecnológicos paralelos.

Sin embargo, China debe entender que la competencia geográfica es irreconciliable, sin importar quién sea el presidente del país norteamericano. Debido a ella, la tecnológica también sigue el mismo curso.

Así, el bloqueo tecnológico a China por Estados Unidos y Europa probablemente continuará, y esta deberá dar con nuevas estrategias para seguir con su avance. Hay todavía un largo camino por recorrer.

China debe lograr la independencia tecnológica en áreas clave y presionar por estándares técnicos unificados, mientras resiste un entorno de restricción y compite pacíficamente con Estados Unidos.

Debe esforzarse por crecer en varios adelantos como chips y tecnología de motores. La lenta marcha en este último tiene su razón de ser en las limitaciones en materiales y la falta de desarrollo en varios campos de la ingeniería que solo podrán resolverse con el tiempo. Los chips chinos no son independientes en 2 áreas principales: programa de diseño auxiliar y máquinas de litografía. A China le puede llevar de 5 a 8 años alcanzar logros sustanciales en ambos y superar su dependencia externa.


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