Opinión>
spanish.china.org.cn | 04. 06. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

Trump aviva las tensiones raciales

Palabras clave: Trump, Estados Unidos, George Floyd

"Personas de mal vivir y perdedores": el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hace todo lo posible por exacerbar el conflicto en lugar de resolver el problema, con ataques e insultos a los manifestantes.


"Personas de mal vivir y perdedores te están destruyendo. ¡Actúa rápido!" El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, denunció el martes a los manifestantes que se niegan a tolerar un sistema injusto y racista en Twitter. Incluso si el gobernante ha realizado comentarios racistas muchas veces en el pasado, las palabras que eligió dado el ambiente agitado por las continuas protestas violentas en el país, sorprendieron a muchos.

Las marchas por la muerte de George Floyd ocupan al menos 140 ciudades, pero parece que Trump hace poco por calmar los ánimos. En cambio, usa la red social para insultar y amenazar, avivando la ira y la violencia.

Al llamarlos "personas de mal vivir y perdedores", Trump trata claramente de desmoralizarlos mientras fija su atención en su base electoral blanca. ¿Te imaginas a Trump usando las mismas palabras para referirse a las personas de derecha en marchas de supremacía blanca?

Los disturbios reflejan la injusticia racial en la sociedad estadounidense. La gente sale a las calles para desahogar su descontento y desilusión hacia el país que ha permitido tácitamente la discriminación racial.

Pero, lamentablemente dada la política electoral en la nación, la administración Trump no tiene interés en escuchar sus voces o encontrar una solución a los problemas sociales arraigados.

Los votantes afroamericanos son clave para el Partido Demócrata, mientras que Trump depende en gran medida de una base blanca de clase trabajadora que levantó en 2016. En este contexto, a Trump le importa más atacar al bando demócrata y cortejar a los votantes blancos. Golpeó ciudades con líderes demócratas e instó a los "alcaldes y gobernadores demócratas" a "ser firmes" tras los enfrentamientos.

Es difícil saber cuándo terminarán las protestas, pero es casi seguro que bajo el liderazgo del actual gobierno, especialmente en un año electoral, una solución real a la injusticia racial es más que difícil.

La cuestión racial se ha convertido en un callejón sin salida para el país. La desigualdad por raza es tan profunda que incluso un presidente afroamericano no pudo abordarla. La situación no mejoró durante el mandato de Barack Obama, empeoró. Con una dominante política electoral y dados los defectos institucionales y estructurales del país, no hay reparación posible para la injusticia y la desigualdad de larga data.

Los repetidos choques por cuestiones raciales han demostrado que la política de igualdad racial de Estados Unidos ha fallado.

Cuando su fuerza era evidente antes, la nación pudo haber asignado más recursos para calmar a las minorías étnicas. Sin embargo, su fortaleza disminuye y, en el proceso, han surgido otros conflictos agravados por la epidemia de COVID-19, que limita aún más su capacidad para lanzar reformas. Los dos partidos políticos del país no tienen un interés real ni los recursos necesarios para manejar por completo la desigualdad racial.


   Google+