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spanish.china.org.cn | 27. 04. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

No se inyecten desinfectante, basta una dosis de seriedad, responsabilidad y sentido común

Palabras clave: Estados Unidos, COVID-19

Estados Unidos se ha trazado el objetivo de "aplanar la curva" durante más de un mes, sin embargo, el brote de COVID-19 no se ha frenado, sino que se ha intensificado. Siendo ese el caso, la Casa Blanca, controlada por los republicanos, profundamente consciente de su incapacidad, no se enfoca en contener el virus, sino en montar un teatro que convence a cualquier lector desprevenido y que ya no sabe en qué Trump confiar: en el que halagaba a China por allá en enero mientras construían hospitales a toda velocidad o en el Trump de abril que critica a China mientras Wuhan envía suministros médicos a la ciudad de Nueva York.

Los legisladores republicanos han invertido la mayor parte de sus esfuerzos en eludir la responsabilidad que la pandemia pone sobre sus hombros, dejando a Estados Unidos en una situación grave: más de 939.000 estadounidenses han sido infectados y casi 54.000 muertes por coronavirus al momento de esta publicación y contando.

No es un secreto para nadie que los republicanos no dejarán de atacar a China por la pésima gestión en contención de la COVID-19 en suelo estadounidense, su último salvavidas, especialmente frente a una feroz campaña electoral. Sin embargo, al amenazar con eliminar la inmunidad de China, los republicanos han ido demasiado lejos planteándose el objetivo de sacudir todo el orden internacional, una medida que tendrá consecuencias que Estados Unidos no puede soportar, sin importar que los republicanos crean que su país es invencible.

"Basado en el principio de igualdad soberana prescrito por el derecho internacional, los tribunales estadounidenses no tienen jurisdicción sobre las acciones soberanas tomadas por los gobiernos chinos en todos los niveles en respuesta a la epidemia", indicó el miércoles el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Geng Shuang. No obstante, algunos republicanos tienen la intención de recurrir a la hegemonía estadounidense y cumplir una misión imposible en violación del derecho internacional.

Es impactante ver intentos tan ingenuos y absurdos de revocar las normas internacionales básicas y es aún más patético ver que algunos estadounidenses apoyan ese intento. Se les ha extraviado el sentido común; piensan que pertenecen a una raza superior, que la Tierra les pertenece, pero están empujando a Estados Unidos al abismo.

Algunos analistas chinos afirman que, para los Estados Unidos, la pandemia de COVID-19 fue en realidad "un elefante negro", un cruce entre "un cisne negro" y el "elefante en la habitación". Lo que los políticos republicanos han hecho y han estado haciendo solo perjudicará aún más a los Estados Unidos. Aunque saben que es probable que el gobierno de EE. UU. se arrepienta más tarde si el Congreso de EE. UU. elimina la inmunidad de China en el calor de un año electoral, no detendrán las demandas contra China, y la Casa Blanca los respalda.

El curso de acción correcto para el lado estadounidense es desestimar esta demanda abusiva. Incluso los profesores estadounidenses consideran que las propuestas de los legisladores republicanos para eliminar la inmunidad de China son una pesadilla total. Aunque esos legisladores no dejarán de enfocarse en preocupaciones equivocadas mientras ignoran lo que es realmente urgente para ellos y para Estados Unidos. ¿Siguen viviendo en una fantasía en la que los Estados Unidos pueden provocar a otros países y luego escapar ilesos? Realmente deberían despertarse, el mundo ya tuvo suficiente con lo que han hecho en Irak y en Libia.

La mayoría de las personas con una mente sobria verá a través de la tentación política de los movimientos de los republicanos contra China en este año electoral. El gobierno de los Estados Unidos ha estigmatizado su reputación internacionalmente debido a su manejo de la COVID-19. Mientras tanto, algunos legisladores republicanos han apuntado obstáculos legales a su búsqueda de intereses personales. ¿Hay algo que no se atrevan a hacer?

El gobierno de los Estados Unidos ya se ganó un lugar deshonroso en la historia mundial por culpar a otros gobiernos de sus propias fallas. Si Estados Unidos desencadena un efecto dominó despojando a China de su inmunidad soberana, ¿qué futuro le espera entonces a las demás naciones soberanas?


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