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spanish.china.org.cn | 17. 04. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

Washington necesitaría más que una máscara N95 para dejar de contagiar el mundo con tantas mentiras

Palabras clave: COVID-19, Estados Unidos

Fox News citó el jueves "múltiples fuentes" para afirmar que el COVID-19 "probablemente se originó en un laboratorio de Wuhan". Un periodista de Fox News también le preguntó al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre el tema durante la sesión informativa sobre el coronavirus de la Casa Blanca, y Trump no lo negó. Esto ha promovido la difusión de esta acusación en los medios internacionales.

Para nadie es un secreto que Fox News es un medio de comunicación que defiende firmemente a Trump, que ni siquiera se atrevió a citar sus fuentes y que no sería extraño que Fox News fabricara sus noticias de la nada. A fin de cuentas, el futuro de la cadena depende de si Donald Trump resulta o no reelecto.

Los científicos de todo el mundo se han opuesto a la opinión de que el COVID-19 se filtró de un laboratorio. El 18 de febrero, antes de que China y Estados Unidos tuvieran fricciones diplomáticas sobre el origen del virus, 27 destacados científicos de salud pública emitieron una declaración para "condenar enérgicamente las teorías de conspiración que sugieren que COVID-19 no tiene un origen natural".

El informe de Fox News tiene como único objetivo atender las necesidades políticas de Trump y las élites gobernantes de EE. UU. Los medios se están convirtiendo en parte de su ataque político.

Apenas quedan más de seis meses antes de las elecciones presidenciales de EE. UU. de 2020. Estados Unidos se ha convertido en el foco de la epidemia y no está claro si se puede controlar. Después de un ligero descenso en las infecciones, el número de nuevos casos confirmados y muertes en los EE. UU. se disparó a 40.678 y 2.538 en las últimas 24 horas, ambos alcanzando un nuevo máximo.

La epidemia impondrá una presión política continua y peligrosa sobre la administración Trump. Para ganar las elecciones, Trump y su Partido Republicano necesitan hacer circular grandes sumas de dinero alas partes interesadas y desviar la atención y la ira del público. Movilizarán todos sus recursos y pasarán la factura de todos sus errores administrativos a China. Si para desviar la atención hacia China nuevamente se ven obligados a hundir, calumniar y desfinanciar a la OMS, es obvio que no dudarán en hacerlo.

Las élites gobernantes de EE. UU. probablemente creen que pueden hacer que los votantes crean que las tasas de infecciones y muertes más altas de los EE. UU. se deben a China, y pueden incitar al nacionalismo extremo entre los estadounidenses contra China y hacer que los votantes culpen a China de gestión estadounidense, en lugar de los gobernantes de EE. UU. quienes realmente toman las decisiones en el país.

Fox News, los legisladores republicanos de EE. UU., las agencias de inteligencia controladas por el gobierno y los altos funcionarios que aparecen en público están desempeñando diferentes roles. Están pintando conjuntamente una imagen falsa de que China está mintiendo sobre la información principal de la epidemia y ocultando hechos clave del mundo.

Están tratando de convencer a los estadounidenses de que la supuesta ocultación de China ha llevado al menosprecio del gobierno de EE. UU. por la epidemia, y ha reforzado la impresión de la gente de que el número de muertos en los EE. UU. es demasiado alto. Quieren que los votantes crean que el gobierno de los Estados Unidos ha hecho un buen trabajo, y que el número de muertos en los Estados Unidos es aceptable y es mucho menor que el peor de los casos.

¿Son tan crédulos los estadounidenses y la sociedad internacional? Veamos qué sucederá realmente al final. Nuestro juicio es que la política confundirá a algunas personas y los intereses pueden ayudar a difundir las mentiras, y por lo tanto habrá personas que estén de acuerdo con las afirmaciones de Washington.

A nosotros solamente nos queda confiar en la ciencia y en el sentido común. Las personas dentro y fuera de los Estados Unidos estarán de acuerdo en que los Estados Unidos deben ser responsables de su terrible gestión COVID-19 en Estados Unidos y deberá responder solo ante el pueblo estadounidense.

Washington se prepara para construir una crisis más grande que le permita salir de la crisis actual.


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