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spanish.china.org.cn | 02. 03. 2020 | Editor:Teresa Zheng Texto

EE.UU. tambalea frente al coronavirus

Palabras clave: EE.UU., coronavirus

Trabajadores de salud trasladan a un paciente a una ambulancia en el LifeCare Center de Kirkland el sábado en Kirkland, Washington. Según informes, docenas de empleados y residentes del centro presentan síntomas similares a los del coronavirus, con dos casos confirmados de COVID-19 hasta ahora.


Factores políticos y retrasos en las pruebas dificultanla labor de la Casa Blanca

Cuando los medios de comunicación occidentales, incluidos los estadounidenses, criticaron duramente las fallas del Gobierno chino para contener adecuadamente el COVID-19, especialmente los mecanismos de respuesta inicial, el virus podría haber llegado a muchos países del hemisferio con datos insuficientes y pocas medidas de control en marcha para estudiar su avance.

Con el número de infecciones diarias fuera de China mayor al doméstico y con la primera muerte reportada en Estados Unidos, han surgido interrogantes sobre el nivel de preparación de otros gobiernos ante el brote. En el país norteamericano, las acusaciones, la política partidista y las elecciones presidenciales podrían poner en peligro la labor de control y socavar los intereses fundamentales de su población.

Funcionarios de Washington anunciaron el sábado el primer deceso por coronavirus, mal conocido oficialmente como COVID-19, en Estados Unidos.

Sin embargo, su presidente, Donald Trump, describió con errores al paciente, un hombre de unos 50 años, como una "mujer maravillosa" durante una rueda de prensa, mientras que el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) asumió la culpa al afirmar que se identificó mal al enfermo en una reunión informativa con Trump y el vicepresidente, Mike Pence, quien ahora supervisa la respuesta del Gobierno federal contra el virus.

Esto no sorprendente a algunos observadores de la política norteamericana, ya que Trumptiene poca comprensión sobre esta nueva enfermedad, que ha infectado a más de 85 000 personas en el mundo, con una alta cifra de fallecimientos, en al menos 54 países y regiones.


Mal preparado

Algunos se preguntaron si la Casa Blanca está preparada plenamente para una transmisión comunitaria después de reportes de la prensa que dan cuenta de controles defectuosos del CDC y de la posible escasez de suministros médicos, problemas ya atravesados por China en las fases iniciales del brote. También surgieron críticas sobre fallas en el sistema de salud que podrían dificultar una respuesta efectiva contra el mal.

Ningún país puede decir que está listo para una epidemia del COVID-19, ya que una vez que aparece, es un gran reto reunir provisiones y fortalecer la atención médica, así como la conciencia pública, sostuvoZengGuang, epidemiólogo jefe del CDC de China, a Global Times el domingo.

"Los comentarios del presidente Trump sobre la epidemia son más desde un punto político y carecen de cualquier perspectiva de salud pública", agregó, y acotó que Washington debe manejar el asunto desde una mirada profesional.

El nombramiento de Pence, exgobernador de Indiana, para dirigir la labor gubernamental en contra de la propagación de la epidemia, generó preocupaciones dada su falta de experiencia en el campo y su reacción tardía durante un brote anterior de VIH en Indiana. Sus detractores dijeron que Pence no es la persona adecuada para el cargo,según NPR.

Varios funcionarios estadounidenses y medios acusaron duramente a las autoridades chinas, en particular al CDC, al gobierno local y a las comisiones de salud en el epicentro de Wuhan, provincia central de Hubei, por su reacción incompetente en la etapa primigenia del brote, alegando que la emergencia reveló los llamados defectos fatales de su sistema político y sanitario.

Sin embargo, esos mismos dilemas aparecen en Estados Unidos, lo que subraya las lagunas sistemáticas de su sistema político bipartidista, como la falta de compromiso y coordinación constantes, según observadores y expertos médicos.

"La respuesta apresurada y poco profesional al virus expone deficiencias en el Gobierno federal, que no ha logrado coordinar recursos y abordar las inquietudes bipartidistas", mencionó Li Haidong, profesor del Instituto de Relaciones Internacionales de la Universidad de Asuntos Exteriores de China, al Global Times.

La televisión japonesa Asahiindicó que Estados Unidos puede haber mezclado casos de COVID-19 con gripe, lo que provocó especulaciones sobre si el país no había podido identificar enfermedades similares a la gripe en primer lugar y si el brote ocurrió por primera vez en su territorio. Sin embargo, los observadores afirmaron que la falta de transparencia informativa sobre el virus ayudó a alimentar rumores públicos, poniendo en riesgo la situación.

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