Trump y su intervención en el caso Stone

La intervención de Donald Trump en el caso de su exasesor Roger Stone ha provocado una crisis en la impartición de justicia. Cuatro fiscales de la vista renunciaron el miércoles por la noche, luego que el presidente estadounidense describiera la sentencia como “horrible e injusta”.

El lobista de 67 años fue declarado culpable en 2019 de siete cargos, entre ellos, mentir al Congreso sobre sus contactos con Wikileaks durante la campaña de 2016

Trumpindicó que pese a que la pena le parece “ridícula” y tiene “todo el derecho” a hablar con los funcionarios del Departamento de Justicia, no lo había hecho.

La fiscalía solicitó en principio entre 7 y 9 años de cárcel (la máxima prevista por la ley era de 50 años). El Ministerio señaló luegoque su recomendación inicial fue “excesiva dadas las circunstancias” y ha dejado en el aire el proceso.

Trump felicitó esta mañana en Twitteral fiscal general, Bill Barr, por “tomar un caso fuera de control que quizás nunca debería haberseabierto”.

Para el Partido Demócrata, la actuación de Trump es “escandalosa” y muestra que el mandatario no ha aprendido nada del juicio político.

“El presidente de Estados Unidos no debe interferir en el juicio a su exasesor de campaña”, sostuvo el senador Mark Werner, miembro del comité de Inteligencia.