Vizcarra sortea la crisis política de Perú e intenta unir el país

El presidente de Perú, Martín Vizcarra.

El presidente peruano, Martín Vizcarra, disolvió el Congreso controlado por la oposición de su nación y convocó a nuevas elecciones, intensificando una amarga disputa sobre lo que ha denominado su lucha para frenar la corrupción.

El sorprendente desarrollo se produjo horas después de que el Congreso dominado por Fujimoristas adelantara una votación para seleccionar una lista de magistrados casi completamente nueva para el Tribunal Constitucional sobre la objeción de Vizcarra, quien asumió el cargo en 2018.

En un discurso televisado el lunes por la noche, Vizcarra confirmó que la constitución permitió su decisión y que se necesitaban nuevas elecciones para abordar la lucha contra la corrupción. "Está claro que la obstrucción y el blindaje no se detienen y no habrá un acuerdo posible", sostuvo.

El presidente asediado anunció que "tratará de poner fin a esta era de punto muerto político que ha impedido que Perú crezca en proporción a sus posibilidades". Agregó que esperaba que "esta medida excepcional permita a la ciudadanía finalmente expresarse y definir, en las urnas y a través de su participación, el futuro de nuestro país".

Vizcarra anunció a la gente de Perú que están "haciendo historia y que este momento será recordado por las generaciones venideras".

De acuerdo con la constitución de Perú, el presidente está en la capacidad de disolver el congreso y convocar a nuevas elecciones si éste le censura dos veces dentro del mismo quinquenio.