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spanish.china.org.cn | 01. 10. 2019 | Editor:Teresa Zheng Texto

Avanzan las renovaciones en el antiguo Beijing

Palabras clave: renovación, el antiguo Beijing

La calle Qianmen en Beijing, 25 de septiembre de 2019.


La renovación del antiguo vecindario del centro de Beijing ha traído mejores condiciones de vida a los residentes y al mismo tiempo ha preservado el patrimonio cultural.

El área este de Qianmen, ubicada en el lado sur de la Plaza Tiananmen, ha abordado sus problemas de sobrepoblación y deficiente infraestructura y medio ambiente para convertirse en uno de los mejores ejemplos de los esfuerzos de la capital por reconstruir el área.

Sin embargo, este sector aún necesita una mayor renovación de los antiguos hutongs (callejones) y la introducción de un mayor volumen de comercio para fomentar la vitalidad y lograr la máxima regeneración, argumentó Li Jun, gerente general del Grupo Tianjie, entidad a cargo del desarrollo.

Li sostuvo entrevistas el sábado con periodistas nacionales y extranjeros como parte de una serie de informes sobre el 70 aniversario de la República Popular China.

El área Qianmen de Beijing ha disfrutado de una historia de más de seis siglos, siendo una rica fuente de legados históricos y culturales.

Su área oriental, de más de 50 hectáreas, tiene una de las características más distintivas de la ciudad: callejones estrechos conocidos como hutongs, aunque allí también se encuentran edificios en peligro de desaparecer, instalaciones anticuadas de agua y electricidad y una población densa.

"Muchos jóvenes, o personas relativamente más ricas, han huido del antiguo vecindario", apuntó Li.

"En el pasado, cuando llovía, los hutongs se llenaban de charcos. Las calles estrechas se hacían aun más estrechas por la abundancia de galpones de carbón y bicicletas viejas.

"No podías ver el cielo azul cuando mirabas hacia arriba, sino cables de electricidad como telarañas y no necesitabas buscar un baño público; bastaba con guiarse por el olor", recuerda el residente local Sun Zhenxi.

La renovación comenzó en 2014. En la calle Xidamochang, que tiene unos 1.100 metros de largo, Li narró que invitaron a arquitectos famosos a reparar los edificios y rediseñar algunos de los viejos patios.

El río Sanlihe, formado durante la dinastía Ming (1368-1644), que desapareció gradualmente durante la dinastía Qing (1644-1911), fue dragado, restaurado y transformado en un parque ecológico.

Li señaló que los 17 hutongs en Caochang también fueron completamente renovados y ahora están equipados con instalaciones de agua y electricidad subterráneas.

Las carreteras han sido repavimentadas y los baños públicos han sido reconstruidos.

"Las calles están ordenadas. El carbón se ha transformado en gas. Los cables aéreos se han reinstalado bajo tierra. Nuestro entorno de vida ha mejorado mucho", agradeció Sun.

Li sin embargo, aclaró que el trabajo de renovación aún está lejos de terminar.

El área aún necesita mejorar el ambiente de sus hutongs, reparar edificios abandonados y restaurar sitios patrimoniales. Se necesitan más negocios para atraer a más jóvenes y a quienes aman la cultura de la ciudad vieja.

"La protección y el reavivamiento son nuestras tareas principales ahora. Son dos partes indispensables para hacer que el antiguo barrio de Beijing sea más atractivo y se convierta en una nueva imagen de la cultura de Beijing", concluyó.


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