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spanish.china.org.cn | 21. 05. 2019 | Editor:Lety Du [A A A]

Las tecnologías chinas no son una amenaza para el mundo

Palabras clave: tecnologías chinas

Un alto funcionario de Estados Unidos recientemente "advirtió" al Reino Unido sobre la luz verde otorgada a la empresa china de telecomunicaciones Huawei para la construcción de algunas partes no esenciales de la red de datos 5G, y señaló que esto podría permitir a China "controlar el Internet del futuro" y "dividir alianzas occidentales mediante bits y bytes”.

Además de esta calumnia, Washington llegó a incluir a Huawei en la "Lista de entidades" para suprimir a la empresa.

Durante mucho tiempo, autoridades estadounidenses han denunciado en todo el mundo las amenazas tecnológicas de China. En un despliegue de hostilidad paranoica, acusaron en falso diferentes adelantos tecnológicos chinos.

Como la justicia prevalece, una mano limpia no quiere lavarse.

Estados Unidos presentó el argumento porque está celoso del avance tecnológico de China y quiere encontrar una excusa para iniciar una campaña de represión política contra la nación. Las imputaciones, a todas luces por razones políticas, también pretenden frenar su crecimiento.

Los hechos hablan más que las palabras. A partir de marzo, China tuvo para sí el 34,02 % de las solicitudes mundiales de patentes vinculadas con la red 5G, mientras que el país norteamericano solo alcanzó el 14 %, según la empresa alemana de datos de patentes IPlytics.

Al escuchar algunas inquietudes reales en casa, algunos funcionarios estadounidenses todavía afirmaban con descaro que la 5G era una carrera de armamentos en la que Washington es el único ganador y que, por lo tanto, el país protegería dicho adelanto del enemigo.

Tales comentarios reflejan que la nación americana aplica un pensamiento de la guerra fría en el campo de la ciencia y la tecnología y ha tratado de ligar el desarrollo mundial del rubro con el suyo como si fuera un ente exclusivo, algo que va en contra de la actual tendencia.

Hablando sin fundamento para confundir y manipular a la opinión pública, un país solo muestra sus malas intenciones al reprimir políticamente el desarrollo científico y tecnológico de sus pares.

El año pasado, China encabezó el ranking mundial con 4,18 millones de personal en investigación y desarrollo, y obtuvo el segundo lugar tanto en el número total de publicaciones científicas internacionales como en el de la frecuencia de citas.

Asimismo, la tasa de contribución de la nación al progreso científico y tecnológico para el crecimiento económico aumentó a 58,5 %,  ocupó el primer puesto en solicitudes y licencias de patentes globales y la casilla 17 en capacidad de innovación integral nacional.

Los datos demuestran la transformación de China de una fábrica mundial a una plataforma de innovación global sustentada en el trabajo y creatividad de su pueblo.

Si tales logros son "amenazas", ¿Estados Unidos no debería ser la amenaza número uno en el mundo al poseer múltiples tecnologías de vanguardia?

El país norteamericano nunca ha dudado en utilizar enfoques científicos y tecnológicos para alcanzar sus objetivos políticos. Algunos argumentaron que funge de supervisor mundial como quedó evidenciado con los hechos revelados por Edward Snowden.

Sin embargo, no todos utilizan el campo para hacer el mal como lo hizo y asumió Estados Unidos.

Pese a las acusaciones sin sentido, las tecnologías chinas han ganado el reconocimiento y el elogio de la comunidad internacional por sus beneficios.

Hasta la fecha, el "súper arroz verde" creado por China para las regiones de escasos recursos en Asia y África ha germinado en 18 naciones. La artemisinina, descubierta por un científico chino, ha salvado la vida de millones de personas.

Además de impulsar la cooperación internacional en el espacio, China ha escrito un nuevo capítulo en la exploración lunar al lanzar la misión Chang E 4.

Al mismo tiempo, lleva a cabo el Plan de Acción de Cooperación de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Franja y la Ruta en asociación con otras economías para llevar adelante 4 iniciativas principales, a saber, la de Intercambio de Personas en Ciencia y Tecnología, la de Laboratorio Conjunto, la de Cooperación para un Parque Científico y la de Transferencia de Tecnología.

El Gobierno chino ha inyectado confianza, ha brindado oportunidades y ha construido un puente hacia la prosperidad para el sector a nivel internacional.

Mientras que el planeta disfruta de los beneficios mutuos fruto de la cooperación de ganancia compartida con China en ciencia y tecnología, también es notorio que ciertas personas en Estados Unidos arrojan barro a las innovaciones chinas en el ramo.

Para desarrollar la ciencia y la tecnología con una visión global es necesaria una nueva ronda de revolución tecnológica y transformación industrial que cambie el panorama mundial de innovación. La ideología de la guerra fría en el campo está condenada al fracaso.

"Cualquier intento de levantar barreras sólidas es una decepción. Los esfuerzos previos por controlar la tecnología han demostrado que decidir sobre cuáles ejercer presión y luego hacer cumplir tales decisiones es extremadamente difícil", apuntó James Steinberg, ex sub secretario de Estado de Estados Unidos.

Quienes adopten una retórica de intimidación hacia China deben reflexionar sobre su postura. Solo la apertura y la innovación darán pie a la prosperidad. De lo contrario, cualquier tentativa de retrasar la cooperación internacional en ciencia y tecnología se enfrentará a la contundente reprobación de países y pueblos, amantes de la paz y el desarrollo.

Las pruebas y las tribulaciones solo fortalecen a un país, y cualquier intento de impedir el avance de China en ciencia y tecnología es fútil y solo conducirá al fracaso.


 


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